Epílogo

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"Mi pequeño ángel..."

×××


—... todos eran felices porque sabían que la princesa ahora sería su ángel. Fin. —Todos aquellos pequeños que observaban a la mujer comenzaron a aplaudir.

—Me gustó mucho. —Comentó uno de ellos.

— ¿Algún día también seremos ángeles? —Angela sonrió de lado y acaricio la cabeza de la niña.

—Todos en algún momento seremos ángeles, solo el tiempo sabe cuándo lo seremos. —La puerta sonó y luego se abrió dejando ver a una de las enfermeras.

—Lamento interrumpirte Angela, alguien vino a verte.

—Oh, tranquila Lorey, nosotros ya terminamos aquí. —la joven se levantó. —Bien niños pueden salir a jugar. —Todos los niños comenzaron a salir de la sala donde normalmente Angela los juntaba para contar historias y hacerles pasar un buen rato.

La joven tomó su libro y vio en la puerta al hombre de sus sueños.

— Toc, Toc. ¿Interrumpimos algo? —Angela negó con una sonrisa.

— ¿Qué haces aquí? Creí que tenías una reunión. —la mujer se acercó y lo abrazo del cuello para darle un pequeño beso en los labios.

—Deje a Ashton a cargo, además, había una pequeña que quería pasar a ver a su mami trabajar. —Angela bajo su vista y vio a la pequeña niña de ojos azules asomarse a la puerta.

— ¡MAMI! —la niña corrió a sus brazos y está la alzó en un fuerte abrazo.

—Mi princesa —la mujer sonrió encantada. — ¿Cómo está la niña de mami?

—Muy bien mami, mira, te traje un regalo. —Habló enseñando una bolsa pequeña. Angela estaba tan encantada con lo dulce y tierna que podía ser su hija.

—Oh mi cielo, muchas gracias. —La joven beso a la niña en su mejilla y vio el contenido de la bolsa.

—Son dulces, ¡Papi trajo dulces para todos! —la pequeña estaba tan emocionada.

—Oh mi amor, eso es magnífico. Estoy segura que a los niños les encantará. —la niña río por las caricias de su madre y esta le dio un pequeño beso en su cabello. — ¿Qué tal si vamos a verlos?

— ¡Si! —La mayor dejo a su pequeña en el suelo y esta salió de la habitación, el hombre abrazo a su esposa por la cintura y beso su frente con delicadeza.

Ambos siguieron a la niña hasta la sala central donde las enfermeras entregaban las bolsas con dulces a los niños. Todos los pequeños del centro de ayuda contra el cáncer estaban tan contentos.

A pesar de que habían pasado 5 años, Angela se sentía en deuda con aquel lugar, por haberle dado una esperanza más a su hermana. Luego de que la pequeña Peyton Horan naciera, Angela hizo sus estudios en literatura y publicó su primer cuento para niños.

"El Valle de los Ángeles". Aquella historia que alguna vez Niall había contado a su hermana y que, gracias a las magníficas palabras de la joven, se había vuelto un éxito en la literatura infantil, cautivando a niños y adultos por su trasfondo. Todas las ganancias que la mujer había obtenido por la venta de aquel cuento habían sido donadas al centro de lucha contra el cáncer, dándoles la posibilidad a más pequeños en su lucha contra aquella enfermedad.

Angela se sentía completa, tenía una familia magnífica y un trabajo que la hacía sentirse llena.

—Mami... —Los mayores observaron a la pequeña de ojos azules. — ¿Por qué ese niño está triste? —Habló apuntando al pequeño que se encontraba a una esquina de la sala observando sus manitos con tristeza. — ¿Por qué no le dieron dulces?

—Creo que ya se acabaron. —Habló Niall al ver a las enfermeras sacar las cajas vacías.

—Pues yo le daré los míos. —Habló decidida la pequeña Peyton. Angela y Niall observaron como la niña se acercaba al pequeño Thomas, un niño que padecía cáncer de pulmón. —Hola, me llamo Peyton. —El niño de ojos verdes la observo con atención. — ¿No tienes dulces? —El pequeño negó con la cabeza. —Toma, te doy los míos. —La niña quiso darle el paquete, pero el niño se negó.

—Pero son tuyos.

—Pero quiero dártelos a ti, entre tú y yo... —la pequeña se acercó a su oído. —Yo comí una paleta en mi casa. —El niño río y la niña volvió a insistir. —Tómalos.

—Gracias. —Los ojos del pequeño brillaban por el regalo de la niña. —Me llamó Thomas. Me gustan tus ojos, son muy bonitos.

—Muchas gracias, me gusta tu cabello. —los niños se sonrojaron por sus halagos. — ¿Te gustaría jugar conmigo?

— ¡Si!

—Bien, vamos. Déjame ayudarte con esto. —Habló la niña tomando el tanque de oxígeno portátil del pequeño.

—Es mi tanque, se llama Philip. Podemos llevarlo juntos. —Los niños salieron al patio ambos tomando la manija del tanque portátil.

Angela observo a su marido con una sonrisa y este sonrió de igual manera.

—Es idéntica a ella. —Habló Niall.

—Lo sé, estoy muy orgullosa de ella. Aunque no puedo evitar sentir miedo, no me gustaría ver a Peyton sufrir por Thomas.

—No lo hará amor, y si llega a pasar, estaremos para ella. No evitemos que nuestra princesa haga feliz a los que más necesitan sonreír. —Angela abrazo el cuello del mayor.

—Eres increíble ¿Te lo he dicho alguna vez? —El hombre río y acercó su rostro al de su esposo.

—Tal vez...

—Sabes... —la joven comenzó a acariciar el pecho de su marido. —Llevó unas prendas nuevas debajo de mi vestido para esta noche. —El hombre mordió su labio por la voz sensual de su esposa.

—Mmm... ¿No podría verlas ahora? —Niall comenzó a dejar pequeños besos en la mejilla y parte del cuello de su ángel. —Tengo deseos de mi Bambi.

—Mmm... Daddy... —La joven jadeo en su oído excitando aún más al mayor. — ¡Vamos!

La vida tiene altos y bajos, puedes ver todo tan oscuro que crees que jamás podrás ver la luz de sol otra vez, pero cuando menos lo pienses, un ángel aparecerá para cambiarlo todo...

FIN.


♡♡♡

Y HASTA AQUÍ LLEGÓ VALLEY OF ANGELS.

No saben el amor que les tengo, en verdad mil gracias por todo el apoyo que le dieron a esta historia, fue increíble el recibimiento que tuvo y... Y dios, no se que más decirles más que gracias, mil gracias a todos y cada uno de ustedes.

En verdad me alegra saber que les gustó la historia y espero que haya sido de su agrado este final.

Quiero dedicar esta historia a todos esos ángeles que se van y también a aquellos que batallan día a día contra enfermedades como esta. La mejor cura para todo es ser feliz, la vida es una y nada puede limitarnos a sonreír. Nunca lo olviden.

No tengo mucho más para decir, en verdad les agradezco todo el apoyo y espero que tengan un excelente día. Muchísimas gracias por acompañarme en esta historia y espero que nos volvamos a leer muy pronto. 💕

❤️ LOS AMO CON TODO MI  ❤️

-Ayi

Valley of Angels © |njh|Where stories live. Discover now