Destinadas

Capítulo 17. Valiente (Cumpleaños de Ámbar pt.3)

El público aplaudía fuertemente como cada vez que la Roller Band subía al escenario, los chicos se miraban felices, incluso Nico y Simón olvidaron que estaban molestos el uno con el otro y chocaron las manos orgullosos.

Jim se separó bruscamente de Ramiro, intentando recuperar la respiración, aquel beso había sido muy profundo - ¡¿Qué haces Ramiro?! –

- ¿Qué me vas a decir? Que no te gustó ¿acaso? – él la miraba con una sonrisa soberbia que a ella la terminó de enfurecer, patinó rápidamente para alejarse de él. Al verla, Nico bajó rápido de la plataforma y la detuvo tomándola del brazo, ella se soltó de su agarre con una mirada de fastidio.

- ¿Qué fue eso Jim? –

- ¿Qué fue qué? No es asunto tuyo, ya no somos novios –

- Aún me importas... -

- Pues no lo suficiente – Jim volvió a patinar para alejarse de él, al ver a lo lejos a Yam se acercó a ella, su amiga le sonreía feliz.

- ¡Jim! ¿Qué acaba de pasar? –

- ¡Que Ramiro me ha tomado desprevenida! ¡Eso pasó! Encima, Nico se siente con el derecho de reclamarme y me sale con que todavía le importo –

Yam la miró con reproche – Bueno, debes ser la única chica que conozco que se molesta porque dos chicos lindos se le acercan en la misma fiesta –

Jim la mira y le hace una mueca – No es chistoso –

- Bueno ya, no pienses más en ellos, venimos a divertirnos – le dijo mientras la tomaba de la mano y la arrastraba de nuevo a la pista.

Al terminar la música, Nina salió de su ensoñación y se separó lentamente de Gastón, al verlo sonreírle sintió como sus piernas temblaban como gelatina, pero se obligó a sí misma a reaccionar.

- T-tengo que irme... - se alejó más de él, pero Gastón reaccionó y la tomó de la mano.

- ¡Espera! ¿no me vas a decir tu nombre siquiera? –

Nina volteó a un costado y vio a lo lejos a Nico haciéndole una seña de "¿Qué está pasando?" , aprovechó que Gastón se distrajo siguiendo la dirección de su mirada y se soltó rápidamente de él para salir corriendo. Él pensó un momento en seguirla, pero antes de decidirse, Ramiro se le acercó.

- ¿Qué nos pasa hoy que las ahuyentamos a todas? – dijo Ramiro con una risita.

Gastón simplemente lo miró encogiéndose de hombros.

...

En la cafetería, Clara hizo todos los movimientos necesarios para que Ámbar y ella se fueran en dirección a la cocina. Mostraba una cara de incomodidad, pero por dentro sonreía pensando que su plan estaba saliendo a la perfección.

Al entrar ahí, Ámbar, que aún la llevaba tomada del brazo, la soltó y se giró para quedar de frente a ella. Clara comenzó a ponerse nerviosa, esta nueva Ámbar era muy intimidante, y como bono extra, los patines la hacían ver más alta.

- ¡¿Qué crees que hacés acá?! ¿En serio pensaste que con esa peluca ibas a engañar a alguien? –

- Engañé a Gastón – dijo Clara encogiéndose de hombros – bailó conmigo y no tenía ni idea de quién era yo... -

- Entonces es eso – Ámbar soltó una risa burlona – ¿todo esto por Gastón? Pensé que ya lo habías superado –

Clara no se esperaba ese golpe bajo – No es por Gastón... - habló lentamente – es por nosotras, Ámbar –