Destinadas

Capítulo 32. Linda (Soy tu Súperstar pt.6)

Después de ver la presentación de Jim y Ramiro, Nico sentía que la canción que habían elegido para la presentación de la banda no era la más apropiada, pero ya no había nada que hacer, se habían preparado mucho para ese momento, cambiar la canción de un momento a otro era riesgoso y poco profesional, así que, junto a Simón y Pedro, se preparó para subir al escenario. 

Antes de empezar a caminar, Clara hizo algo que lo tomó totalmente desprevenido, ella tomó rápidamente su mano y se puso de puntitas para besar su frente, Nico no supo cómo reaccionar, lo de ellos eran leves toques en la frente con el dedo, ese era su gesto de amistad y, aunque ella había besado su mejilla varias veces desde que eran niños, ese beso en la frente lo hizo sentir extraño; al verla sonreír, él le sonrió levemente y comenzó a caminar detrás de sus amigos al ver que Tamara se preparaba para presentarlos.

- Ya estamos llegando al final del show de hoy, pero recuerden que la próxima semana todos los chicos volverán a sorprendernos en el escenario, por ahora los dejo con el gran talento de una banda que nació aquí en el Jam&Roller, ellos son Simón, Nico y Pedro... ¡La Roller Band! – Tamara bajó del escenario al tiempo que los chicos subieron y saludaron al público mientras se acomodaban en sus instrumentos.

Pedro enfocó a Tamara con la mirada y sonrió al ver que ella lo miraba sonriente y le hacía un gesto con la cabeza para animarlo. Simón encontró entre el público a Sol que lo miraba con sus ojos verdes brillando, se le quedó viendo un instante, pero su mirada se desvió hacia la de Ámbar que también lo miraba fijo, Matteo notó las miradas entre ellos y de inmediato tomó la mano de Ámbar ocasionando que ella volteara a mirarlo, la rubia le sonrió para intentar tranquilizarlo y después regresó su mirada al frente, pero evitando mirar hacia Simón. Nico notó que Ramiro estaba sentado al lado de Gastón, buscó a Jim con la mirada y la encontró en la barra al lado de Yam, Nina y Clara, en ese momento fijó en Jim su mirada al sentir curiosidad por la reacción que tendría al escuchar la canción que hace algunos meses él le había dedicado a ella; los tres chicos salieron de sus pensamientos cuando Pedro inició la cuenta para comenzar con la canción.

Nico: "Sí, me gustas, y no te imaginas cuánto, cuánto.

Sí, me gustas, si supieras desde cuándo y cuándo.

Eres especial, eres el paraíso,

Te veo pasar y me paralizo."

Simón y Pedro: "Tu sonrisa brilla y me hace soñar, y me hipnotiza."

Jim sonrió al escuchar la que para ella siempre sería su canción, no le importaba que lo de ella y Nico no hubiese funcionado, al verlo sonreírle mientras cantaba, se dio cuenta de que esa canción era un regalo que él le había dado sinceramente, y que siempre le pertenecería a ella.

Los tres: "Linda, no puedes ser más linda,

Sólo dime que sí, no me digas que no,

Linda, ¿quién puede ser más linda?

Dame tu corazón, dame todo tu amor."

Nico: "Dame amor, sólo amor..."

Pedro: "Sí, me gustas, y no te imaginas cuánto, cuánto.

Sí, me gustas, si supieras desde cuándo y cuándo."

Simón: "Has quedado en mí, desde aquel instante,

solos tú y yo, lo único importante."

Pedro: "Es aquello que yo veo en ti."

Pedro sonreía hacia Tamara, le gustaba pensar que la sonrisa de ella era sólo por él... Simón estaba perdido en sus pensamientos, la letra de la canción le traía a la mente muchas cosas; la forma en que Sol se había atrevido a cantar con él el día de la audición aquella canción que él escribió para ella cuando se sentía totalmente enamorado; también el modo en que Clara había cantado para él hace unos momentos, aun después de la forma en que habían terminado, en aquel momento se sintió feliz al saber que ella lo había perdonado y que las cosas podrían estar bien entre ellos; pero después estaba Ámbar, ella aparecía fugazmente en sus pensamientos,cada momento de cada día, no podía dejar de pensar en ella desde aquella vez en que la ayudó con la canción de Matteo...

Los tres: "Linda, no puedes ser más linda,

Sólo dime que sí, no me digas que no,

Linda, ¿quién puede ser más linda?

Dame tu corazón, dame todo tu amor."

Pedro: "Dame amor, sólo amor."

Nico seguía con la mirada en Jim, pero de momento se encontró con los ojos de Clara, no pudo evitar sonreírle mientras cantaba al ver la alegría con la que ella lo miraba. Simón volvió a encontrar aquellos ojos azules mirándolo intensamente, casi sin pensarlo, comenzó a cantar sin apartar su mirada de ella, haciendo más que evidente que estaba cantando sólo para la rubia.

Nico: "Eres todo lo que siempre soñé..."

Pedro: "Eres linda, nadie es cómo tú..."

Simón: "Eres todo aquello que yo siempre busqué..."

Los tres: "Eres linda, la más linda amor. Linda..."

Nico: "Linda, oh, eres..."

Los tres: "Linda, no puedes ser más linda,

Sólo dime que sí, no me digas que no,

Linda, ¿quién puede ser más linda?

Dame tu corazón, dame todo tu amor."

Simón: "Dame amor, sólo amor..."

Nico: "Sí, me gustas, y no te imaginas cuánto, cuánto."

Al terminar la canción, los aplausos no se hicieron esperar, pero también las reacciones a las miradas entre Ámbar y Simón. Matteo soltó la mano de la rubia haciéndola reaccionar, sin decir nada, se levantó de la silla y se perdió entre la gente, Sol hizo lo mismo después de dirigir una mirada triste hacia Simón; mientras él la veía alejarse encontró también la mirada de Clara quien parecía confundida, Simón se dio cuenta que tal vez había lastimado a ambas sin si quiera notarlo. 

Pero no sabía que no eran sólo ellas, Delfi miraba a Jazmín quien tenía la mirada perdida, los demás del grupo sólo se miraban entre sí confundidos; Ámbar no sabía qué hacer, sentía que debía ir a buscar a Matteo, pero sentía que no podía moverse, ni siquiera se daba cuenta de lo que sucedía a su alrededor, sólo escuchaba al público que seguía aplaudiendo.

Sol llegó a los lockers y se recargó en una pequeña banca que encontró, sentía que sus piernas flaqueaban y cerró los ojos para respirar profundamente, sentía que debía calmarse, era su prima, la chica que la estaba alejando del único chico al que ha querido siempre... se sobresaltó al escuchar un duro golpe del otro lado de la fila de lockers, se levantó y caminó para ver que sucedía, al asomarse vio a Matteo apoyado en los lockers, él apretaba los ojos con fuerza mientras soltaba más golpes logrando que su mano quedara cada vez más roja; ella se acercó rápidamente y tomó su mano antes de que él golpeara de nuevo, Matteo abrió los ojos y la miró confundido.

Ella lo miró, sabía que no era correcto, que más de una persona se molestaría por lo que pensaba hacer, pero ella era impulsiva y cuando se decidía a hacer algo, no había nada que pudiera detenerla.

- Trae tu guitarra... -

...