Sálvame

Capítulo 15 "hotel"

Leonor se fue antes que yo porque terminó las escenas que tenía para hoy. Con respecto a lo que hablamos me dijo que podíamos vernos en un hotel y la verdad es que con tal de verla en otro lado que no sea acá, me alcanza. Estaba emocionada y dijo que iba a hacer una reserva en un hotel y que iba a pasarme la dirección, tenía que ir cuando saliera de grabar; y así fue, me envió la dirección y cuando salí de grabar fui directamente para allí.

Al rato ya estaba en el ascensor, cuando llego al piso salí y me dirige a la habitación. Golpeé y Leonor me abrió casi enseguida, sonreí al verla y me abalancé hacia ella agarrándola de la cintura y cerrando la puerta de un golpe.

-te extrañé tanto– besándola

-Te necesito–excitada

La alcé haciendo que rodeara mi cadera con sus piernas y la llevé hasta la cama dejándonos caer, yo arriba de ella. Deje de besarla para ayudarla a quitarse la ropa, luego me sacó la remera y yo me saqué el pantalón y bóxer, volví a atacar su boca con desesperación.
Bajé a su cuello y ella gimió al sentir mi erección rozar su vagina. Volví a su boca para besarla mientras me hundía en ella y ella se aferró a mí, luego soltó un gemido ahogado de placer y comencé a aumentar la velocidad de mis embestidas. Sentirla gemir en mi oído y sus dedos enredados en mi cabello, tirando, me excitaba aún más; en un momento la habitación era solo nuestros gemidos y el calor de nuestros cuerpos.

-Más fuerte.– rogó

Lo hice y volví a besarla, ella mordió mi labio inferior. Mis embestidas pasaron a ser más lentas pero duras, Leonor se aferraba con una mano a mí y con la otra a las sábanas, yo apoyaba mis manos en la cama a cada lado de su cabeza y me movía entrando y saliendo de ella.

-Dios!– gemí

Luego de un rato los dos nos corrimos y yo salí de ella, me acosté a su lado y ella apoyó su cabeza en mi pecho luego de besarnos

Narra Leonor

Me desperté y me extrañé al no ver a Sebastián. Me levanté y después de ponerme su remera fui al baño para ver si estaba ahí, y efectivamente. Mordí mi labio al verlo bajo el agua, desnudo.

Entré al baño y él sonrió cuando me vio, lo miré pícara y me saqué su remera. Caminé hasta él y nos besamos apasionadamente, Sebastián me agarró de la cintura guiándome hacia la pared y me pegó a ella. Bajó su mano hasta mi muslo y fue subiendo hasta llegar a mi vagina, comenzó a trazar círculos sobre mi clítoris; gemí y me aferré al él.
Dejó de tocar mi clítoris y metió dos dedos en mí, metiéndolos y sacándolos lentamente... me estaba volviendo loca, lo quería dentro de mí. Sacó sus dedos de mí interior inesperadamente y gemí molesta

-Qué haces? No pares– jadeé

-Me encanta verte así... tan excitada– me dice al oído y me gira dejándome de espaldas a él, yo pongo mis manos sobre la pared.

Abrí mi boca y dejé escapar un gemido, apoyando mi cara en la pared al sentir que entraba en mí, y él mordió suavemente mi hombro. Comenzó a moverse lentamente y con el paso de los segundos el dolor que había sentido cuando entró en mí desapareció por completo, convirtiéndose en un absoluto placer. La velocidad de sus embestidas aumentaron, y ambos gemíamos sin parar.
Finalmente él se corrió y salió de mí, yo me giré y lo besé apasionadamente. No puede ser que me esté haciendo tan adicta a él.

-Me volves loco, me encantas.– se separó para hablar y volvió a besarme