Capitulo 34

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Jimin pov:

Si Baekhyun se refería a que podía llegar a sentirme exitado con tan solo un beso durante los siguientes meses, pues, estos serían los más difíciles.

Ni yo sé cómo aun no me e lanzado a Jungkook en el auto, mi autocontrol me esta abandonando poco a poco y temo hacer algo que no debería en el auto y despertar a MinHo.

Pero para mi era aun mas imposible controlarme si Jungkook tiene su mano sobre mi muslo y su olor esta llenando mis pulmones.

Esos fueron los minutos mas largos de toda mi vida, parecía que el caminó nunca terminaría, cada vez era largó.

Cuando por fin llegamos bajamos con rapidez, Jin quizo abrir la cajuela pero Nam y Hoseok lo detuvieron, me acerque a Jungkook jalandolo de la manga.

— Jungkook — Jade bajó.

— Esperame dentro, en un momento voy — dejo un beso húmedo sobre la piel de mi cuello.

— P-pero J-Jungkook — gemi arrugando la tela de su camisa con fuerza.

— Confía en mi, no tardare mucho en ir — dejo un beso en mi frente.

Estaba molestó, estaba demaciado molestó, entre a la cabaña cerrado la puerta con fuerza detras de mi.

Fuí hasta la habitación, me quité el chándal aventando lo a un rincon de la habitación, al igual que me quite el buzo el cual también terminó en el piso.

Estaba acostado sobre mi espalda con mis piernas flexionadas y ligeramente separadas.

Con mi mano derecha acaricie mi erección por encima de la tela del boxer, mientras mi mano izquierda se hacía cargó de pellizcar y masajear mis pezones.

Ya estaba comenzando a dolerme, con un ágil movimiento logre deslizar mi boxer por mis piernas, dejando libre mi erección, mi mano derecha volvió a hacer su trabajo, mis labios estaban entreabiertos dejando escapar varios gemidos y jadeos.

Jungkook pov:

Aun mantenía a MinHo entre mis brazos y una erección que me estaba impidiendo pensar correctamente, Jin y Taehyung regresaron a las cabañas de sus parejas, aunque para mi hubiera sido mejor que Tae regresara a la cabaña de mis padres.

Namjoon abrió la cajuela, ambas ya estaban despiertas, parpadearon varias veces para acostumbrarse a la luz.

— ¿Que se supone que haremos con ellas? —

— Ji-min — jade y Hoseok se burló de mi, pero no le preste atención a lo que dijo después, mi mente ahora estaba tan sumergida en todo lo que quería hacerle a Jimin.

— Ve con el, nosotros nos encargaremos de ellas — eso si llamo mi atención.

— ¿Estas seguro de eso? —

— Bueno si quieres puedes llegar con el olor de dos omegas a tu cabaña y quedarte sin sexo y probablemente sin —

— No es necesario que des detalles — le interrumpí antes de que siguiera diciendo que partes de mi cuerpo podría perder.

Hoseok me entregó las bolsas de ropa de Jimin junto a una mas pequeña, le agradecí y salí corriendo a la cabaña, justo al entrar el delicioso aroma de Jimin inundo mis fosas nasales, subí rápido para dejar a MinHo en su habitación con el cuidado de no despertarlo, salí de la habitación y me dirigí a la que ahora compartía con Jimin.

Al abrir la puerta escuche los jadeos y gemidos de Jimin, no eran muy fuertes por esa razón no pude escucharlo en la habitación de al lado.

Sus ojos estaban de color azul, mi miraba fijamente sin dejar de mover su mano por su pene con rapidez, entre cerrando la puerta con seguro detras de mi.

Tu no eres mi alfa - Kookmin -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora