Esta era la primera cita que tengo que Chris y por lo que llevamos va de maravilla.
Al terminar de almorzar, fuimos al parque de diversiones que era todo un espectáculo.
-¿A qué juego quieres ir primero, Abb?- Preguntó Chris, tomándome de la mano.
-A la montaña rusa.- Respondí.
-Acabamos de comer.- Se excusó.
-¿Tienes miedo, Vélez?
-Eso nunca, señorita.- Murmuró en mi oído.
Los dos subimos a la montaña. Nos acomodamos y la maquina comenzó a moverse. Iba de arriba a abajo y nos hacía mover demasiado.
-Así fue nuestra noche, ¿no es cierto?- Christopher me murmuró en el oido para que nadie más escuchara.
Puse mis dos manos en la boca e hice una mueca de asco de tan solo imaginarme que la montaña rusa copiaba los movimientos de Chris y yo teniendo relaciones.
-Eres un gato, Christopher.- Jugué, pegándole suavemente con mi brazo.
Luego decidimos ir a un carro que pasaba por un túnel en el agua. Le llamaban "El carro de los sustos".
Chris me tomó de las manos y tenía una sonrisa misteriosa.
El carro comenzó a moverse.
-¿De qué te ríes?- Pregunté.
-No me río de nada, Abbie.- Eso lo empeoró ya que comenzó a reir a carcajadas.
-Estás loco.- Dije. Apenas termine de pronunciar aquellas palabras, una bruja se apareció en medio del camino, causando que me asustara. Salté y Chris comenzó a reírse más fuerte todavía.
-Si te sigues ríendo no saltaré encima de tí.- Le murmuré, haciendo que deje de reírse.
-Vamos, con eso no se juega, Abbie.- Dijo.
Seguí asustándone y Christopher se reía. Luego apenado me tomaba de las manos y eso me daba risa a mí.
Experimentamos todos los juegos y puedo decir que nuestra cita fue increíble.
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No Me Sueltes. -CNCO.
FanfictionLo necesitaba tanto, tanto que le di todo el poder para destruirme, para derrotarme y hacerme mil pedazos, él prometió quedarse por siempre. Ojalá no me sueltes, amor.