histeria (01)

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—no sé, sinceramente no sé que me sucede. Me siento vacía, perdida en la monotonía. Hastiada de la misma rutina aburrida una, y otra vez.

La chica se remueve en el diván hasta que termina por sentarse para encarar a su terapeuta. Él la observa con detenimiento y elevando una ceja, pregunta. —hablaste de esto con tu esposo?

—no quiero que él malinterprete las cosas— chasquea la lengua y suelta una sonrisa triste —según él, todo es su culpa. Si no soy feliz, es por qué de seguro no me alcanza con su amor o con el amor del niño.

Una lágrima se le escapó producto de su propia impotencia. De todas esas frustraciones que la venían apagando desde hace un tiempo. El joven se inclinó para ofrecerle un pañuelo y se sorprendió cuando notó lo tenso que estaba. No era normal verla tan frágil, tan afligida y eso comenzaba a removerle algo en el pecho. Sabía que eso estaba mal, que no debía cruzar la línea de lo profesional. Pero habían ocasiones en las que quería dejarse llevar y consolarla cómo tanto se le apetecía. —tienes que ser sincera contigo misma. Admitir si tú esposo no superó tus expectativas. Decirle cómo te hace sentir.

—el problema no es él. el problema es todo lo que ocurre cuando él no está— se limpia el rostro con el dorso de las manos siendo conciente del pañuelo que él termina por encerrar en su puño. No le gusta sentirse vulnerable, no podía permitirse (aunque fuera un profesional) mostrarse indefensa.

—la sesión terminó hace cinco minutos. Así que voy a dejar de hablarte cómo tu terapeuta y voy a hacerlo cómo tu amigo— su espalda se recarga sobre el respaldo de su silla y espera a que ella asimile sus palabras para comenzar a hablarle. —tú, no estabas preparada para este tipo de relación. Taehyung, prácticamente te metió en esto y esperó a que te amoldes a su vida, pero él no hizo lo mismo. No respetó tus tiempos, ni los miles de problemas que tenías en ese entonces.

—él no me obligó a nada. Soy yo la que quiso meterse en esto aún sabiendo que sería difícil— dijo para no darle la razón. Pero su inconsciente le gritaba lo contrario. Amaba a su esposo y la aterraba la idea de saber que no era feliz a su lado y que últimamente disfrutaba mucho más de la compañía de su amigo. Ese que gracias a las sesiones de terapia, sabía exactamente lo que ella sentía y siempre tenía las palabras correctas.

—Moa, formar una familia debe planificarse con anticipación. Debe ser un deseo mutuo. Si bien, muchos embarazos no son deseados, las mujeres van adquiriendo conocimiento y amor maternal mucho antes de dar a luz. Ese no fué tu caso.

La joven muerde sus labios, esforzándose por ahogar un sollozo. Es inútil seguir negando que él tiene razón y aunque haya creado un vínculo con el hijo de su esposo, es conciente que con eso no alcanza. No lo siente suyo. —Jeon, crees que soy mala persona?

—no. Te sientes mala?— responde con una interrogante que la deja pensando. Si bien, muchos le han dicho que tenía actitudes frías con respecto a su esposo e hijastro, nunca se puso a hacer una auto evaluación de si misma.  —qué es lo que más te molesta?

Lo mira arrugando el ceño. Tenía demasiadas cosas que asimilar antes de pensar en el meollo del problema. Pero no aguantó y dejó salir su lado hostil, ese lado que por respeto a su nueva familia, había escondido en su interior. —odio aceptar que mi madre tenía razón— el joven asiente animandola a seguir. Con una expresión que le hizo saber que estaba bien ser ella misma y que no la juzgaria por eso. —yo... Soporté vivir en la miseria sólo por orgullo. Para no tener que verle la cara a mi madre, para no darle la razón. Ella me crió para eso. Para ser fuerte, indomable, para no demostrar debilidad ni siquiera en los peores momentos. Pero... No fui criada para cambiar pañales. Mucho menos, ajenos.

***
Moa llega al departamento que comparte con Taehyung, respira hondo antes de abrir la puerta e intenta revivir cada una de las cosas que su amigo le dijo.
Ya pasó más de un año desde que decidió  volver con su esposo y a pesar de ser felíz. Algo le faltaba.

será nuestro secretoWhere stories live. Discover now