Capítulo 47

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La ventaja de ser egoísta

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La ventaja de ser egoísta...
30 de Junio

3:00 pm

Linda amaba las clases de física teórica con Derek. A medida que el semestre avanzaba, más enamorada quedaba de las teorías cuánticas y de todas esas cosas de las que hablaba su profesor. Cada teorema se escuchaba como música para sus oído. Si todo se oía tan bien desde el interior de ese armario vacío, ¿imaginas cómo se escuchaba desde afuera de ese armario?

Una vez la clase dio por terminada, Linda se asomó por las rendijas del armario para esperar que el resto de los estudiantes se marchara. Conocía a muchas caras de haberlas visto tanto en el campus. La de ese chico, aquel de cabello oscuro y sonrisa relajada, la recordaba bastante bien. Él era uno de los alumnos más brillantes en la clase del profesor Osbone, aunque Derek le había contado que era un tanto distraido y eso le traía problemas. Como sea, eso no quitaba el hecho de que Elliot O'doneall era increíblemente inteligente.

—El, ¿nos vamos? —Linda observó como una de las amigas del chico se acercaba a él.

—Si, claro Linds —él se puso de pie y la tomó de la mano. Le sonrió con dulzura antes de dejar un beso cerca de su labio. Al parecer, no era solo su amiga —. ¿Qué quieres hacer?

—Estudiar...—Ella suspiró —. Sabes lo rudo que estarán los exámenes y, aunque me encantaría hacer algo mejor contigo, no me puedo permitir reparar alguna materia.

—¿Tú? ¿Reparar? ¡Pero si eres la rubia más brillante que conozco! Eso jamás podría pasar.

Lindsay Candau soltó una risa un tanto tímida ante el halago del chico. Esa relación hizo sonreír a Linda, quien aún sentía esa chispa de fascinación al ver como el amor regia la vida de otras personas. Era como tener una historia frente a sus ojos, una que no estaba escrita en letras sino que se daba a partir de casualidades. Resultó algo tan bonito que no pudo evitar suspirar...

Y quizá lo hizo demasiado fuerte, porque Elliot volteó hacia el armario y lo miró con el entrecejo fruncido. La habia escuchado.

—¿Oíste eso? —le preguntó él a la chica.

—¿Qué? —cuestionó ella, un tanto confundida.

—Creo que escuche algo que provino del armario. Dentro del armario.

— No seas paranoíco, El ¿Qué puede haber en esa cosa? ¿Un monstruo?

Si bien Lindsay soltó una risa bromista,  en la cara de Elliot se notó que aún creía que habia algo dentro se lugar. Linda sintió como su corazón se aceleraba al ritmo del miedo. La habían escuchado, la descubrieron ¿Ahora qué debía hacer? Pensó en correr en cuanto vio como Elliot se acercaba hasta ella, ¿pero cómo podía escapar de ese armario sin ser vista? Estaba atrapada, la verían. Verían su feo rostro, sus cicatrices, sus quemaduras, sus ojos avellana llenos de pánico.

Narciso || P.E #2Tahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon