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Narrador Omnisciente.
—Es el fin de los ninjas. Ya no tienen por qué seguir. —anuncia Obito—. No los mataré si no se resisten.
Naruto sólo pudo comenzar a apretar su mandíbula con furia y lágrimas descendiendo por sus ojos, estaba realmente furioso al ver como hablaba sin sentir algo tras haber asesinado a miles de ninjas.
—Si no quieren tener remordimientos, no hagan nada. —sigue hablando Obito—. No habrá muerte, no tendrán que soportar nada en silencio si obedecen. Viviremos en un sueño.
Nadie de la alianza dijo algo, todos esperaban que alguno dijera algo pero nada, o eso hasta que Hashirama decide hablar diciendo:
—¡No se den por vencidos! ¡Si caen en su genjutsu será igual que morir!
Todos -en su gran mayoría- mantuvieron lo ojos cerrados ante los anuncios de Hashirama.
—Ese árbol colosal está muy unido a Obito... —murmura Sarurobi—. Son como sus miembros intentando reunir chakra.... Será difícil poder acercarse.
—Cuanta debilidad. No suena propio de ti. —dice alguien detrás, Los tres Hokages, Naruto y Sasuke voltean a ver de quien provenía aquella voz—. Sarurobi-sensei.
—Orochimaru... ¡Llegas tarde! —regaña Sarurobi—. ¿Qué pasó con los Kages?
—Ayudé a que se recuperaran. Si no son unos débiles, también estarán acá muy pronto. —responde Orochimaru.
—Tan cínico como siempre, ¿Eh?
Suigetsu que venía junto a Orochimaru y Karin se acerca a Jugo y a ___.
—Perdón por hacerlos esperar, Jugo, ___. —se disculpa Suigetsu.
—Ya llegaron. —le murmura Jugo a ___ que no voltea a verlos.
Karin mira con estrellitas a la Uchiha al verla tan indiferente como solía estarlo.
—Ahora que lo veo buen, ese árbol es bastante grande. —comenta Suigetsu viendo al árbol—. ¿Cuánto tiempo nos llevará talarlo?
—¡¿Y eso qué importa?! Lo que cuenga ahora es...—grita Karin relamiéndose los labios—. Que quiero abrazarme a ___-senpai...
—Tu trabajo consiste en ayudar a que se curen los ninjas de la alianza, ¿No? —le pregunta Suigetsu.
—¡P-Por supuesto que sí! ¡Ya lo sé, desgraciado! —balbucea Karin manteniendo distancia de Suigetsu.
