❝Adolescentes.
La curiosidad y todos los sentimientos a flor de piel. Las canciones de moda. Lo que tienen el primer amor que de una u otra forma siempre deja huella. Todo el doble de especial, los primeros miedos y dudas. Los corazones saltando en...
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❙ N a g u m o H a r u y a ❙
Le di un sorbo a la bebida y pase la punta de mi lengua por mis labios saboreando el amargo sabor. No solía beber café pero en el lugar era lo único que servían. Un poco ansioso muevo mi pie izquierdo. Veo fuera del cristal las personas pasar, van de aquí por allá con carpetas en sus manos. Era difícil distinguir a alguien entre toda esa multitud.
❝Maldición, estas demasiado nervioso. Tranquilízate❞—, me dije.
No sabía porque había aceptado hablar con Fuusuke y mucho menos sabía qué era lo que le iba a decir. Mi vida comenzaba ponerse en orden hasta que él me llamó. Lo que no sirve, que no estorbe, estar cerca del pasado es lo peor que puedo hacer sí quiero cerrar heridas, heridas que hasta ahora aún no quieren cicatrizar. Ni siquiera sé porque le di tantas vueltas, Fuusuke ya no puede arrebatarme nada, cuando no tienes nada no hay nada que puedas perder.
Lo admito, me da nervios pensar que volveré a verlo... diez años han pasado, diez malditos años.
Y he estado recordando los momentos, por alguna razón en las noches se me da de pensar en lo feliz que éramos y lo mucho que nos deseábamos. Me preguntaba, ¿cuándo había empezado?, ¿cómo fue que jamás noté que ya no sonreía, que se estaba volviendo doloroso y era difícil seguir intentándolo?
¿Cómo fue que pude soportarlo?
Deseaba olvidar. Deseaba borrar mi memoria y poder vivir sin esos recuerdos. Yo lo necesitaba, necesitaba mi mente en blanco, necesitaba borrar cada pedazo de dolor de mi cabeza y sacar toda la mierda fuera de mi. Anhelaba volver el tiempo atrás donde me hacía el fuerte, donde pretendía que nadie me podía lastimar, donde era otra persona. Donde no lloraba a solas, donde no me embriagaba, donde era fácil decir lo que pensaba y jamás vacilar. Estaba harto de mi, de mi mente maquinando todo el día.
En esta reunión con Fuusuke tenía pensando sacarme algunas espinas. Tenia la oportunidad para encarar mi pasado, de darle respuestas a las preguntas que siempre me hicieron ruido en las noches. No lo desperdiciaría. Hay muchas cosas que me gustaría aclarar, pero había algunas en particular que me seguían angustiando. No tuve la oportunidad de despedirme de él y preguntar qué es lo que pasaba, quizá sí lo hubiera hecho la historia terminaría más rápido y no sería así de duro.
No sé que es lo que pase cuando nuestros ojos se vuelvan a encontrar. Pero si soy sincero, me da miedo volver a confiar en Fuusuke. Me aterra pensar que volveré a caer y se repetirá la misma escena...
Pero vale, ahora soy un adulto. Sé como funciona. La gente siempre te hará daño alguna vez, el dolor forma parte de la vida. Desafortunadamente a mi me tocó Fuusuke. Y ni siquiera podría saber sí fue él quien me hizo daño o sólo yo era demasiado débil para convertir esto es un shock emocional. Porque lo he notado, yo ya no puedo amar como antes, ya no me puedo enamorar. La desaparición de Fuusuke marco un antes y después en mi vida... igual, son cosas que jamás diría en voz alta, sería una molestia. Nos hicieron creer que cada persona es una media naranja y que la vida tiene sentido cuando encontramos la otra mitad, y yo realmente creí que la había encontrado con Fuusuke. Pero no es así. Desde el comienzo nací entero, nadie en nuestra vida merece cargar en la espalda la responsabilidad de completar lo que nos falta. Nadie.
