❝Adolescentes.
La curiosidad y todos los sentimientos a flor de piel. Las canciones de moda. Lo que tienen el primer amor que de una u otra forma siempre deja huella. Todo el doble de especial, los primeros miedos y dudas. Los corazones saltando en...
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❙ K i y a m a H i r o t o ❙
Entro a la oficina suspirando.
Camino hasta mi escritorio y cuando me siento en la silla de cuero mis ojos van a parar al pequeño cactus en la maceta situado en la ventana. Pensé que Ryuuji diría algo pero parece que no noto que había comprado uno para él.
Me llevo las manos a la cabeza desesperado. ¿Qué demonios me sucede?, ¿diciéndole que iré a verlo después del trabajo?, ¿después de lo de ayer?
Estoy volviéndome raro. Los días en el trabajo se hicieron eternos, no podía dejar de pensar en sus palabras. Las images aún vividas en mi mente, el ambiente, el olor de la habitación, el rosa en sus mejillas. Él.
A pesar de siempre saberlo, jamás creí que el momento llegaría y que se sentiría de esta forma. De esta forma tan... bien. ¿Era felicidad?, ¿quizá el saber que era querido?, ¿qué era?
Nunca había estado más consciente de Ryuuji. Esta mañana no pasé desapercibido cuando llegó y la pequeña charla que tuvo con esa chica. Me sentía el mayor ridículo del mundo escuchando a través de la puerta entreabierta. Fue tan amable de traerme café y el traje de esta mañana no pudo haberle quedado mejor que ningún otro. ¿Era nuevo?
Debo mantener mi distancio, lo sé, me jure hacerlo. Pero es difícil. Me es imposible no querer estar cerca de él. Y estoy siendo egoísta, porque a pesar de que quiero estar siempre con él, sé que no es del mismo modo que él querría. No puedo darle lo que desea de mi. Estoy dispuesto a hacer todo por él, sólo eso. Sólo eso no puedo entregarle. No quiero mentirme y engañarlo con algo falso. Ryuuji es un pilar importante en mi vida, siempre lo fue, es por eso que no puedo estar lejos, nos criamos juntos y siempre nos mantuvimos cerca del otro. Esa es la razón.
No quiero apartarme de él y sentirme como antes. Incompleto. Vacío. Con un sentimiento de estancamiento. Sufrir ese dolor que no mata.
Quiero creer que aún no lo he perdido. Que aún con todo esto podemos seguir como hasta ahora, juntos.
Me es increíble pensar cómo es que Ryuuji sigue sintiendo lo mismo que hace diez años, pero lo más increíble es que aún lo siga sintiendo después de haber visto todos mis defectos; desde mi yo echando humo, hasta mi yo más vulnerable.
Él no me merece. Todo este tiempo, todos estos años, él se estancó y se quedó en un esperar eterno que nadie merece vivir. Y debería encontrar a alguien más, alguien que le de lo que yo no. Alguien que no pueda lastimarlo, que lo valore y respete, que no guarde sus sentimiento. Él se merece lo mejor.
Y sé que Ryuuji me va olvidar, muy pronto él se cansará de mi y simplemente me verá como amigo. Él va a sanar. Porque sabe reírse con el alma, porque la vida tiene algo aún mejor esperando por él. Porque lo merece. Y entonces yo estaré ahí apoyándolo.
