La Mate del Alpha © TERMINADA

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ROSE BROWN:

-¿Quisiste hacerme daño?-he leído sobre la mirada del Alpha, puede llegar hasta matar de dolor con sólo una mirada y él la utilizo en mí, de solo pensarlo en verdad duele.

-No- su mirada esta fija en el pasto-nunca quise lastimarte, así como tu yo no sé controlarme mucho aunque hubiera entrado muchos años, cuando dijiste que te querías ir me dolió, no se porque utilice ese poder contra ti, perdón-sus palabras parecen sinceras, pero yo si le quise hacer daño y eso no me lo perdonare-sé que no quisiste lastimarme, Cloy toma a veces el control, ella me odio por utilizar mi poder contra ti y no la culpo, ahora mismo yo me odio por eso.

Siento el mismo dolor de antes, pero ahora solo dejo que pare sólo, quedo desnuda, mis patas ya no están, ahora soy yo, me pongo mi vestido y lo miro, él también vuelve a su forma humana, lo miro, su pecho sigue teniendo mi marca, no puedo evitar sentirme mal.

-Perdóname-las lagrimas, comienzan a descender en mis ojos- no quería hacerte daño, no quiero lastimarte-pongo mis manos en mi rostro-no pude controlarme, no pude protegerte de mi-me siento demasiado mal, siento sus brazos envolverme.

-No tienes la culpa, tienes que aprender a controlar a Cloy, veámoslo como nuestra primera discusión de pareja-rio sin ganas con mis lagrimas aún en mi rostro-no quiero tomar el control de tu vida Rose, solo que esto es nuevo para mi, siempre me han obedecido y de la nada te encontré, todo es tan diferente-bueno lo entiendo, yo tampoco estaba tan tranquila como ahora, rodeo su cuerpo con mis brazos y nos quedamos así por unos minutos.

TAMARA VILLARREAL:

No puedo evitar sentirme mal por la reacción de Rose, los busque por todos lados cuando se fueron, pero no los encontré, fui a la habitación que me habían dado y estaba Tyler sentado en la cama, su presencia me hace sentir muy nerviosa, aún no entiendo o tal vez no supero que yo sea parte de esta vida donde existen seres sobrenaturales, le pedí unos días para poder pensar en todo esto, pero se ve que no entendió.

-Hola- dije llamando su atención, él se queda quieto y sólo me mira, desvío mi mirada y muerdo el interior de mi labio.

-¿Ya pensaste suficiente no crees?- pregunta como si fuera la pregunta más fácil que haya dicho en su vida.

-No es un tema fácil de asimilar-digo sin mirarlo-¿Que eran esos aullidos?-pregunto cambiando de tema, hace un rato escuche muchos aullidos que provenían del bosque.

-Una pelea de Adam con Rose-lo miro confundida.

-¿Adam lastimo a Rose?-digo preocupada.

-No, diría que fue lo contrario, pero no puedo asegurarlo, no sé mucho al respecto, aunque llegué en el momento en el que Rose lo lastimó y me siento diferente desde que nos lanzo esa cosa- murmura lo ultimo como si fuera para el mismo.

-¿Que estas diciendo?-digo con el ceño fruncido-mi amiga no lastimaría ni a una mosca, además que es humana, imbécil-di medio vuelta dispuesta a irme, pero su brazo me detiene.

-Ese no es tu problema, debemos hablar y no quieras cambiar de conversación para confundirme- si que esta molesto, creo que se me paso la mano.

-Bueno ¿De que quieres hablar?- sé de lo que quiere hablar, pero estoy demasiada confundida y ya no tengo nada para cambiar el tema.

-Tamara quiero que seas mi novia-  su seguridad al pedírmelo, me sorprende, me quede quieta y nada sale de mi boca al no saber que decir, me quedo parada en mi lugar mirándolo directo a los ojos, no creía que me iba a pedir algo así.

-Yo, tengo novio-digo en un susurro, recordando a mi ex, el responsable de hacerme tanto daño para que ahora me niegue a que alguien lo vuelva a hacer, no ahora.