La Mate del Alpha © TERMINADA

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ADAM SMITH

Salimos de la mansión apenas nos avisan del ataque y expiación que hay a la salida de nuestras tierras.

Tyler está a unos metros de mi corriendo para llegar, vemos que hay tres lobos heridos que reconozco porque son de los míos, dos están bien, pero puedo sentir que algo les pasa.

Veo por todos lados y camino hacia unos cuerpos junto a un árbol, el olor a muerto que desprenden es tan característico que sólo los miro con desprecio.

-¿Que paso?-le pregunto al que está más consciente.

-Alpha-dice agachando la cabeza-esos vampiros intentaron traspasar las fronteras y han herido de gravedad a tres de los nuestros, asi que hicimos lo que pudimos para reducirlos-informa por nuestro link.

-Hicieron lo correcto, llevemos a que curen a los demás y ustedes vayan a casa después, descansen los días que sean suficientes para recargar energía y curarse por completo.

-Si Alpha-camina lejos de nosotros y veo como los heridos se transforman, los demás ayudan a que se suban encima de sus compañeros para empezar nuestra partida.

Después 10 minutos llegamos a nuestra manada, todos nos dirigimos hacia uno de los pequeños hospitales donde los doctores se encargan de curar las heridas que nuestros genes no son de mucha ayuda.

-Alpha-llama un hombre atrás mío-tengo algo que informarle-dice abriendo su mano señalando su oficina.

-Dígame-entramos y nos sentamos frente a frente con un escritorio de por medio.

-Como le puedo decir esto-opina agachando su mirada a unos papeles frente a él-tres de sus hombres fueron heridos de gravedad, lo que quiero decir es que pudieron haber muerto, pero en vez de eso sólo hay rasguños-frunzo el ceño totalmente confundido por lo dicho.

-¿Que esta diciendo?-pregunto con desconfianza.

-No es nada grave, les haremos un par de estudios para saber la razón de que no estén heridos, aunque no se si deberíamos, después de todo es un milagro-dice sonriendo y caminando fuera de la oficina dejándome más que confundido.

Pienso en las razones que hay de que ellos estén así y la única que se queda en mi cabeza es, Rose.

Me paro y camino afuera buscando con la mirada a Tyler, lo encuentro hablando con uno de los heridos.

-Tyler-llamo su atención-¿Que pasa?-pregunto.

-Adam, lo que ocurre es que los que más heridas tienen dicen que son los que menos se lastimaron en la pelea.

-¿Qué?-cuestiono.

-Dicen que fue Rose, Adam.

-Informales que dejen de esparcir esos rumores hasta que sepamos la verdadera razón-mi cuerpo esta tenso.

No quiero que lo que dicen pase a oídos de gente que puede si quiera pensar en lastimar a mi luna.

Veo que Tyler habla con ellos y camino hacia los baños de aquel hospital con desgano, apenas cierro la puerta me saco la camiseta que llevo puesta y mis sentidos se ponen en alerta por lo que veo.

La cicatriz que mi hizo Rose hace apenas un par de días ya no existe. O al menos ya no está abierta y ni si quiera me había dado cuenta que ya no duele.

Mierda.

Esto es malo.

Me pongo rápidamente de nuevo la ropa y sin más camino fuera del hospital y me dirijo a la mansión, demoro apenas unos minutos y al entrar me recibe el aroma a mi mate apenas cruzo la puerta.

-Rose-la llamo temeroso de que no responda.

-Mi luna- vuelvo a decir más fuerza con los nervios a flor de piel, sólo unos segundos bastan para verla caminar a recibirme.

-Hola-dice con una sonrisa-¿Como te fue?-pregunta curiosa, sin nada que decir sólo me acerco a ella y la abrazo, mi cuerpo se relaja casi al instante en que la siento cerca y el darle la bienvenida a su aroma a mi sistema hace que una sonrisa se apodere de mis labios calmando cualquier pensamiento que puede abrumarme.

-Sólo quiero estar así, un momento-digo respirando profundo.

No estoy entendiendo nada de lo que pasa cuando ella está cerca, pero sea lo que asea que haya hecho, funcionó.

Mi gente está bien y no está herida.

Y aunque no sé que es exactamente lo que hizo, cumplió el papel de luna al protegerlos.

-Adam, me asustas, ¿Pasa algo?-interroga queriendo separarse, pero se lo impido y vuelvo a abrazarla.

-Sólo quiero estar cerca tuyo, te eche de menos como no tienes idea- susurro cerca de su oído.

-Nos vimos esta mañana- responde confundida mientras se ríe.

-¿Fue esta mañana?, parecía que hubieran pasado muchos años- digo para mi mismo, pero ella ríe y me da un manotazo.

-Ya basta, no vuelvas a asustarme así, pensaba que te había pasado algo malo, tonto- me regaña.

-Pero si paso algo- digo, pero me arrepiento rápidamente cuando ella me miro confundida- lo que pasó es que vi a algunas parejas afuera y me hicieron recordar que yo también tengo una y que quería verla- respondo y sus mejillas se tiñen avergonzada de mi comentario.