Capítulo 29

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Fue después de una semana que volvió al trabajo. Teisen se hizo responsable de que no sea llamado a la oficina, primero tuvo que comunicarle que Nick no se presentaría por estar atravesando un dolor inmenso por la reciente muerte de su amiga, aunque aquella justificación no valió la pena, ya que el mismo dueño de la pizzería decidió cerrar el local como respeto a la familia Fernández, decreto tres días de duelo. Lo que quedaba de semana presento el certificado médico de Nick.

—¿Qué desean comer?

Lo están supervisando pero tampoco fue motivo para poder fingir una sonrisa. Son días espantosos, él no logra conciliar el sueño y su apetito disminuía como nunca, estar allí adentro no fue una opción sino una escapatoria de su papá.

Hernández siempre ha sido bueno memorizando, el uso de la libreta podía ser innecesario, pero el cliente le acababa de repetir el pedido y la hoja esta blanca.

—¿La lapicera tiene un problema?

—No—se dio la vuelta y respiro hondo. Volvió a enfrentar al hombre y sonrió—. Tengo un problema de audición y hoy no traje mis audífonos. ¿Podría usted repetir la orden?

El cliente se apiado e hizo caso al pedido del joven. Después de asentir y anotar correctamente camino hasta el mostrador, ahí Teisen lo esperaba tranquilo, la razón viene a que planeo una forma de orden para que el cocinero no se sienta presionado a leer tantas órdenes.

"Un Messi" dice en su mente.

—¿Desde cuando eres sordo? —recibió el papel y le palmeo el hombro amistoso—. Vamos, te necesito arriba. Ahora le voy a decir al pibito este que te cubra, mientras vos te vas a lavar la cara y tomar un poquito de aire.

Dicho y hecho, Teisen hablo con Santiago, el adolescente lo recibió con una inmensa alegría, por lo menos es más liviano que limpiar los baños, y haciendo referencia a ellos, hay uno de los cubículos que esta ¡uff!

Paso a la cocina y decidió hacerlo con rapidez con una actitud seria y siendo cauteloso. No quería de ninguna manera tener contacto con Darío y su falta de empatía, porque desde que le informaron que el puesto de cocinero era suyo, su ego se triplico y disfrazar burlas con chistes hacia los demás es un pasatiempo no tan nuevo.

Ya estando en la parte trasera de la pizzería, saco del bolsillo un cigarrillo y un encendedor. Él no es de fumar, y la primera vez que lo probó fue ese día con María.

María, si en vida era un remolino, estando enterrada es una tormenta de dolor. Prendió el cigarrillo y como venía haciendo desde su muerte, lo dejo consumirse por sí solo, enredado entre el índice y el dedo del medio.

...

Su papá había pasado por él al trabajo. Nick sabía que enviarle un WhatsApp mencionándole que llevaría pizza agilizo que viniera.

—No espero llegar a casa y darle de probar a Flacus—las manos adornadas de anillos golpearon el volante al detener el coche en el semáforo, desvió la mirada y la sostuvo—. Mañana regresaras ¿contento?

¿Regresar? Realmente el hijo mejor de Hernández necesita tiempo. Tiempo para plantear mejor su futuro sin interferencia de Jorge, tiempo para recuperarse del duelo e incluso tiempo del trabajo. Comprende a la perfección que algunas de las acciones que tomaría harían que perdiera amistades o familiares.

El color cambio y tuvo la oportunidad de sacar el celular. Las únicas aplicaciones que tiene instaladas son la de Uber y WhatsApp. Entro a la última y activo los datos.

10 mensajes del grupo "La Pizza"

3 mensajes del grupo "Trabajo"

2 mensajes de Ricardo

5 mensajes de Cata

Ignoro los dos primeros y pincho el que le seguía. Se trata de dos audios, y como era de saberse es preguntando sobre su salud. Otra vez prefirió dejarlo para luego. Abrió el de su hermana y escribió un breve mensaje contando un poco como le fue en el trabajo, y al colocar la primera mayúscula los dedos quedaron suspendidos en el aire. No está en mente rechazar la invitación de Cata, además menciono que el tema importante es Jorge, la relación de ambos sigue tirante. Y otro plus que lo fuerza a ir es que la adorada hermanita que tiene es muy buena insistiendo tanto que un promotor de una cocesionaria de autos.

Cuando envió la aceptación, regreso al chat de Ricardo.

—Ah por cierto, esta mi novia Poly en casa, quiero que...

—La trate bien, nada de mencionar verdades que te hagan quedar como mal parado y buscar una excusa para irme ¿no es así? —crecía la bronca y asumió que la mejor forma de evitar decir más es morder su lengua. Saco aire de su boca y cruzo los brazos—. Entre nosotros, vos so el que vive en una nube ignorante pensando que siendo la versión de un adolescente argentino hará cambiar tu realidad ¿no? ¿Alguna vez no se te cruzo la idea de conseguir un trabajo? Porque eso de estafar a la gente no es un ejemplo para nadie.

Abrió la puerta y salió con la cabeza arriba y con un aire distinto. Creía que alguien lo ayudaba a revelarse.



Indirecta Recibida (PAUSADA)Where stories live. Discover now