17: "Uno"

1.4K 142 37
                                    

Estoy acostado en la cama, mirando al techo. Hace horas que mi mente está en blanco, en busca de la respuesta a mi pregunta:

¿Que puedo hacer con Nic?

Llevarlo a comer no, porque el ya lo hizo.

Ir al cine podría ser, pero no se que películas le gustan.

Pongo mis manos en mi cara con frustración. ¿¡Es tan difícil tener una idea buena!? En realidad, lo difícil no es que hacer, sino que me salga bien.

El hizo algo sencillo pero logro que sea especial. Yo busco algo así.

Suspiro. No soy bueno para esto.

Oigo que suena mi celular. Lo agarro y la pantalla marca que llama "Papá". Atiendo.

- Hola papá. - digo.

- Pequeño. - dice con alegría en su voz. - Dios, los extraño tanto. Tu padre no me deja llamarlos, según el los atosigo.

- Nosotros también los extrañamos. - digo riendo.

- Según tu hermano no están mucho en la casa. - dice.

- Así que me llamas para ver mi versión de la historia.

- Solo quiero cerciorarme de que no te obliga a nada o te deja solo.

- Conoces a René, sabes que me obliga a cosas para no dejarme solo, así que... - digo. Hago una pausa. - Tengo que darle algo de crédito, al principio me obligaba pero ahora ya no. Lo disfruto. - mi padre no dice nada. - ¿Papá, sigues ahí?

- Perdón... es me cuesta creer lo que oigo. ¿Tu disfrutando salir al aire libre con personas?

- Ja ja ja. - digo con sarcasmo.

- ¿Hay alguien especial? - pregunta pícaro.

- ¡René voy a matarte! - grito.

- ¡El me interrogó! - grita mi hermano desde su habitación.

Suspiro con fastidio. - Anda, cuéntale a tu papá. - dice suplicante.

- Se llama Nic. - digo. - Esta en el grupo. Es italiano, muy dulce y sonríe por todo.

- ¿Y te gusta?

- No lo sé, apenas nos estamos conociendo. - digo. - Mañana tenemos otra cita, pero creo que no iré.

- ¿¡Por qué!?

- Porque me toca a mí organizar algo y no se que demonios hacer. - digo desanimado.

- Gabe, eso no importa tanto. Un buen plan no necesita de grandes cosas o de planes con itinerario. - dice. - Muchas veces los sencillo gana, cuando la compañía es buena.

- ¿Que hicieron ustedes para su primera cita? - pregunto.

- Nuestra primera cita, no tuvo ese título. Según mi idiota yo de ese momento, era "una salida de amigos". - dice. - Fuimos a un concierto, una orquesta sinfónica muy conocida de Nueva York venia a Newport. Como bien sabes tu padre ama esa música.

- ¿Y que tal fue? - pregunto.

- Muy bien. - dice riendo. - Fue... fue la primera vez que nos tomamos de la mano. Puede que suene como algo simple, pero para alguien como era yo, significó mucho.

- Y ahora no sueltan la mano del otro para nada. - digo con una sonrisa.

Ríe. - Tengo miedo que se me escape. - dice. - Escucha pequeño. No es tan difícil, solo se trata de prestar atención a las personas que nos rodean y a ponerle cariño a las cosas que hacemos.

Déjalos que HablenWhere stories live. Discover now