4- Corazón congelado

1.4K 249 92
                                    

Realmente me daba mucha pena haber sacado un tema que le molestara o le trajera recuerdos dolorosos a Yoongi. Podía imaginarme que se trataba de alguna ex novia que le había costado mucho olvidar, o quizás una chica muy reciente; y entendía que no se sentía bien que te sacaran tema, de repente, de algo que te está generando angustia. Pero aún así... no hacía falta hacer un silencio incómodamente sepulcral durante media hora en camioneta. Okey, sí, tal vez había sido la pregunta errada para entrar en su frío corazón, ¡pero yo no podía haberlo adivinado jamás! Además, era tan sencillo como decirme "no quiero hablar del tema" y ya, habría preguntado otra cosa como ¿y cómo es trabajar en una maderera? ¿Estudias algo? ¿Como cuánta gente va a éstas fiestas? ¿Cómo te gusta pasar el rato? ¡Pero no! Tenía que ponerse en modo roca y no decir nada en absoluto y hacer con ello el momento más incómodo inimaginable.

Cuando llegamos a la costanera comenzamos a bordear sobre la avenida hasta alguna parte, probablemente, donde el muchacho podría descender con la camioneta. Del otro lado, el aroma de la sal me llegó como una deliciosa bienvenida. No pude evitar sonreír. El mar estaba calmo, y por consecuente no había mucho viento en la playa. El muchacho descendió lentamente con la camioneta hasta que, repentinamente, el lugar comenzó a estar atestado de coches y personas. El barullo se fue haciendo más y más estruendoso a medida que íbamos pasando. Varias personas pararon a saludar a Yoongi, que respondía tocando el claxon de la camioneta, y varias otras se quedaron mirándome como si fuera una nueva especie de ser humano con tres ojos y cuatro brazos.

Me apreté en el asiento, agachándome un poco, como si quisiera esconderme de tanta mirada curiosa. Pude sentir como Yoongi me miraba de reojo, pero no dijo nada hasta que por fin, luego de varios minutos que se me hicieron eternos, aparcó y bajó del coche dando un portazo que me hizo pegar un respingo.

-Pásatelo bien -oí que decía mientras rodeaba el capó y metía sus manos en los bolsillos de su campera, caminando directamente hacia un grupo de chicos más allá.

Abrí y cerré la boca varias veces.

-¡Espera! -abrí la puerta y salté para bajar. La cerré y estaba a punto de ir hacia él, cuando comprendí que...

Que no me querían ahí.

Lo vi hacerse con varias bolsas de hielo para luego bajar con ellos, y sus pesados contenedores llenos de cerveza, imaginaba, hacia la playa; donde podía ver un tumulto de gente exageradamente grande. ¿Es que estaba toda la ciudad allí? Más allá, una fogata enorme que chispeaba en el aire frío.

Tragué saliva y apoyé la espalda contra la puerta de la camioneta, un poco asustada. ¿Y ahora qué iba a hacer?

-¿Eh, te dejaron sola? -oí a un tipo venir hacia mi y me encogí ante el desconocido.

-Oye, lárgate de aquí -dijo otra persona casi al instante. Me giré al otro lado para verle: alto, esbelto, bien peinado y tan bello como un príncipe. Miraba al que acababa de hablarme con una seriedad imperturbable, casi letal-. ¿Me escuchaste? ¡Vuela! 

El chico que había venido a hablarme murmuró algo por lo bajo y se marchó.

Mordisqueé mi labio inferior y casi al instante sentí una sensación de alivio al recibir la sonrisa amable del desconocido que me había rescatado de mi propia soledad. ¿Cómo era posible pasar de una mirada de advertencia tan terrorífica a la expresión más cálida del universo? No tenia ni idea, pero él acababa de hacerlo.

Detrás, un muchacho delgado me saludó con la mano tímidamente.

-Esto... gracias por eso -murmuré.

-¿Por qué estás sola aquí? -el chico miró alrededor, con gesto un poco preocupado y otro poco molesto-. ¿Dónde está él?

¿Sabía con quién había venido?

How Soon is Now? [Min Yoongi]©Onde histórias criam vida. Descubra agora