12- Sólo una niña

1.2K 224 50
                                    

Cuando salí del ascensor me apresuré a cruzar el lujoso hall de entrada, ignorando la mirada de los guardias que me veían con bastante curiosidad, a toda pastilla, hasta cruzar la puerta y recibir como una bofetada de realidad la lluvia torrencial sobre la cabeza. Entreabrí los labios, asombrada por lo fría que caía sobre mi piel y mi ropa, y alcé el rostro al cielo. Parpadeando entre la lluvia, vi el cielo gris tan oscuro que comprendí que tenía que ir a casa... y pronto.

Claro que no traía dinero encima y no podía comprar un boleto para tomar el autobús, lo cual suponía un problema. Es decir, siempre podía caminar a un lado de la carretera, el camino no se desviaba. Pero tardaría unas cuantas horas yendo a pie y por mucho que me gustase pasear, la lluvia me daría una neumonía antes de hacer media cuadra.

Me abracé a mi misma y corrí bajo un alero. Frente a mi se extendía una calle apenas transitada, aunque la zona en plena ciudad estaba llena de comercios que parecía cerrarían pronto por el mar clima. Lancé un hondo suspiro y miré a mi alrededor, entre desesperada y perdida. ¿Qué podía hacer? Por supuesto que no iba a pedir ayuda a Jimin, y mucho menos llamar a mi tía. Taehyung no tenía coche y pedirle que viniera por mi no iba a ser correcto.

Unos ojos café agatados cruzaron por un momento en mi memoria. Me encontraba estúpida pensando en que necesitaba de su ayuda. Una parte de mi casi estaba acostumbrada a que él apareciera, como si fuera obvio que cuando más lo necesitaría él estaría allí. De hecho casi que se sentía extraño que no estuviera saliendo del cuento del que había salido para rescatarme.

Sacudí la cabeza. ¿Qué estaba pensando? Yo no necesitaba ser rescatada por nadie, yo era mi propio caballero de armadura azul y ahora mismo rescataría mi propio trasero de aquel lío en el que sola me había metido.

Comencé a caminar bajo el alero, pegada a las vidrieras y empapada hasta la médula. Sorbí por la nariz y limpié del rostro el agua del cielo y de lágrimas. La verdad es que no me encontraba muy de humor para ir sola por la vida caminando bajo la lluvia; se me partía el corazón y la cabeza y sólo quería escaparme de allí rápido y estar mullida bajo mis mantas escuchando el buen regaño que probablemente mi tía me daría en cuanto pusiera un pie dentro de su casa.

Solté un suspiro amargado y me quité el teléfono del bolsillo para marcar el teléfono de Taehyung. Me lo llevé al oído y seguí caminando en silencio, ignorando la mirada de curiosidad de un adulto mayor que pasaba por allí con su paraguas anaranjado.

-Anda, contesta... -murmuré, abatida. Era obvio que no iba a contestar.

Crucé la calle corriendo bajo la lluvia hasta nuevamente resguardarme bajo el alero de un negocio que abría sus puertas de madera en la esquina. Me pegué a ellas, de espaldas, y comencé a pasar el zapato por el asfalto, tratando de sacarme el barro que tenía pegado en la punta (si es que era barro, ¿en qué momento lo había pisado?).

Me saltó la contestadora y yo rodé los ojos. Apreté el número para hablar y comencé, llevándome una mano a la frente y despegándome de la puerta para girarme y seguir caminando.

Me detuve un segundo viendo del otro lado de la puerta de cristal con borde de madera lo que parecía ser un taller. Había aserrín por todo el suelo, varias tablas de madera de metros de anchura y altura paradas en las cuatro paredes del espacioso lugar. Más cerca de la puerta, un mostrador con catálogos de tipos de madera, sillas, varias estanterías muy bonitas y demás objetos de madera de pino.

-Hola, Tae, ¿cómo estás? Mira, me encuentro en un aprieto y quería saber si de casualidad tu estabas cerca y... -me detuve.

Colgué el teléfono sin siquiera mirarlo y dejé caer la mano a mi costado. Entre los mechones empapados de mi cabello, que en algún momento se habían caído sobre mi cara, pegándose a mi piel; vi aquello que en cualquier momento me habría hecho bufar, pero ahora mismo parecía la mejor escapatoria posible.

How Soon is Now? [Min Yoongi]©Where stories live. Discover now