Aporreé la puerta del baño, oyendo risitas del otro lado.
-¡Eh! -exclamé-. ¡Ya salgan, necesito hacer pis!
La puerta se abrió y dos chicas que parecían haber estado acampando en el baño salieron murmurando cosas entre ellas y mirándome de reojo.
-Si, si -me quejé, sacudiéndoles una mano para luego entrar casi corriendo al baño y sentarme apresuradamente en el váter. Lo juraba, si hubiera esperado un minuto más me habría hecho encima.
Suspiré, poniendo los codos sobre mis rodillas y mirando la baldosa del suelo mientras esperaba a acabar. Cuando lo hice me acerqué al lavabo y levanté la mirada para verme al espejo; y la verdad es que me veía terrible pero... tampoco tanto: el maquillaje de los ojos un poco corrido y ya ni una gota de labial en mi boca. El cabello un poco despeinado, pero bastante en orden considerando que había estado jugando a la pelota con Taehyung, Jimin y Namjoon. Llevaba la chaqueta de Jimin encima, que me quedaba un poco grande, porque ya a esa hora había empezado a hacer un poco de frío y más al aire libre en el patio; aunque sudaba de tanto moverme tratando de encestar la pelota sin éxito, porque era malísima.
Entonces la puerta de abrió de golpe y yo pegué un respingo de la sorpresa.
-Oye, deberías tocar porque... -me detuve mientras hablaba.
Yoongi me miraba directamente a los ojos, apoyado de brazos cruzados contra la puerta cerrada del baño.
-¿Qué? -pregunté secamente, molesta.
-¿Es que lo haces a propósito o qué?
-¿Qué cosa?
-Darme la razón -entrecerró los ojos, mirándome como si fuera la cosa mas tonta que hubiera visto en su vida-. Llegas llorando al taller, toda mojada, diciendo que este tipo te dejó plantada; básicamente me cuentas que es un imbécil, ¿y ahora lo traes a la fiesta y te la pasas besuqueándote con él?
Sólo le di un beso.
-¿Acaso te importa lo que haga de mi vida?
-En absoluto.
-Entonces te aconsejo que no te metas en mis asuntos, que de imbéciles tú no puedes hablar -me acerqué a la puerta con intención de moverlo para salir de allí, pero el muchacho no se movió de la puerta.
-¿Ahora yo soy el imbécil?
Solté un jadeo.
-Me dijiste que no habías besado a nadie luego de Garin -lo miré a los ojos, tratando de no mostrar lo decepcionada que estaba.
Yoongi mantuvo mi mirada unos segundos que se hicieron eternos, en silencio.
-No lo hice -dijo al fin.
-Claro -volví a intentar moverlo, pero no lo logré. Suspiré y me quedé mirando la puerta en silencio, esperando que se moviera y demostrando que ya no tenía ganas de hablar con él.
Y aunque muy en el fondo de mi ser esperé que el muchacho volviese a hablar y me aclarara las cosas, me dijera que estaba equivocada, que Namjoon estaba equivocado, eso no pasó. Al final, Yoongi apartó la mirada y se hizo a un lado para dejarme salir.
Salí del baño a trompicones y me sostuve de la pared del pasillo, tocando mi frente con la otra mano y viendo como todo de repente se veía bastante borroso; tal vez demasiado.
-¿Estás bien? -Taehyung llegó a mi lado como una bala-. No te encontraba por ningún lado.
-Estaba en el baño -murmuré. Justo cuando mi amigo miró hacia la puerta del baño a mis espaldas, un Yoongi salía rápidamente y se dirigía a la dirección opuesta del pasillo. Taehyung volvió a mirarme con una ceja enarcada. Cerré los ojos y sacudí la cabeza haciendo gesto de dolor-. Estoy muy, muy ebria; creo que ya debería ir a casa.
KAMU SEDANG MEMBACA
How Soon is Now? [Min Yoongi]©
Fiksi PenggemarEn un desesperado intento por comenzar de nuevo y cerrar ciclos, Sofi se muda con su tía a Sokcho, una pequeña ciudad bastante despoblada al Este de Seúl. Pero ya saben lo que dicen por ahí: pueblo chico, infierno grande; y su infierno personal tení...