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—¿10 millones de dolares?— Pregunta Nate después de contarle todo lo sucedido.

—Si, se que no es mucho, pero tiene acceso a todo el dinero de la familia. Alguien menciono algo sobre una persona que esta haciendo robos de este tipo.— Digo preocupada.

—Si, ha salido en las noticias.— Dice Nate.

Estamos tomando un café en una pequeña cafetería. Decido cambiar de tema ya que no quiero estar más preocupada de lo que ya estoy. Y estoy segura de que pronto se arreglará.

Con mi celular tomo una foto de nuestros cafés y la subo a mi instagram. Pongo la localización y etiqueto a Nate. Me encanta tener mi instagram bien organizado, asi siento que mi vida se organiza también.

—Nena, ya me tengo que ir, mi padre me espera en la oficina.— Dice besandome.

—Esta bien, puedo esperar sola.— Digo mirandolo con ternunra.

Me besa una vez más y se va. Yo salgo de la cafetería y espero a que lleguen por mi. Una chica camina hacía mi y va cargando una caja.

—Disculpa, ¿crees que me pudieras ayudar con la otra caja? Es que no puedo con las dos.— Dice sonriendo apenadamente.

—Claro que si.— Digo sonriendole.

—Gracias, mi camioneta está aquí en la esquina, es una azul. La puerta esta abierta.— Dice indicandome con cuidado de no soltar la caja. Asiento y camino hacia su auto. Apenas caigo en cuenta de que estoy usando tacones y tal vez me caiga, pero no puedo decirle que no a alguien que pide ayuda.

Al llegar a la esquina veo su camioneta y abro la puerta. Pero algo me jala hacia el interior y me asfixia. Todo se torna negro y quedo inconsciente.

***

La cabeza me duele, me punza de dolor. Abro los ojos pero los cierro rápidamente al ver una luz muy brillante y blanca. Trato de levantar mi mano pero esta está atada a algo. Al igual que la otra. Y ambos pies también.

Abro lentamente los ojos, es un flash, y debajo de esta hay una cámara.

Miro a mi alrededor y trato de gritar, pero mi boca esta cubierta también. Trato de gritar, lloro, me muevo. Pero me es imposible.

Esto no me puede estar pasando, no a mi.

No es real, no es real, no es real.

Me repito una y otra vez a mi misma que no es real. Voy a despertar y estaré en mi casa, con mis padres y Jack. Pero estoy aquí.

—Porfin ha despertado. Nuestro pequeño trofeo. La pieza final. La cereza del pastel. Como quieran llamarlo.— Hay alguien detrás de mí. Su mano acaricia mi cabello y muevo mi cabeza. Por favor que no me toque. —Como pueden ver, lo prometido es deuda. Avrey Caswell esta entre mis manos. Y ahora haré lo que estaba acorde al plan. Espero seguir contando con su apollo.

Al terminar su pequeño discurso, escuhco como da pasos lentamente a mi lado.

Y yo reconozco ese rostro. Es el chico con el que choque en la fiesta. Estoy segura de que es el.

—¿Me reconoces, nena?— Dice mirandome con burla. Siempre adore la forma en que Nate que llamaba, pero cuando el lo dice suena horrible.

Me arranca la cinta cubriéndome la boca y hago una mueca de dolor. Las lagrimas no dejan de salir.

—Por favor, deja de llorar. Me vas a hacer llorar también.— Dice haciendo una mueca falsa de tristeza.

—Dejame ir, porfavor. Te dare lo que quieras. Pero dejame ir.— Digo aún llorando.

—Oh no, no, no. Lo que yo quiero no me lo puedes dar tú. Lo que yo quiero lo tiene tu papi.— Dice tocando mi nariz.

—¿Quieres dinero, es eso? El te lo dará, entrégame a él y te lo dará.— Digo asustada. Ya deben de estar buscandome.

—¿Y entregarte así de fácil? Ay no querida, yo quiero divertirme. Y pasa que tu eres la pieza perfecta para mi diversión.— Dice con una sonrisa malvada. —A demás, ve el lio que estas causando.

Una televisión que no había notado antes se enciende dejando ver las noticias.

Avrey Caswell, la hija del multimillonario Richard Caswell ha sido declarada como desaparecida el día de ayer a las 11 horas de la mañana. Si usted tiene información o la ha visto, por favor, marque a este número— La señora de las noticias habla, una foto mía se ve en primer plano.

—¿Llevo un día dormida?— Digo asustada.

—Ah, si. Lo que pasa es que me pareces irritante, por lo que decidi dormirte mas tiempo.— Dice divertido. Esta demente.

Lloro aún más cuando veo a mis padres en la pantalla, estan llorando, están preocupados por mi. Vendrán por mi, lo sé.

Se inca delante de mi y con su pulgar limpia mis lagirmas. Yo quito mi cabeza como puedo y esto parece enojarle. Me agarra del cabello y me obliga a mirarlo.

—No me faltes el respeto. Harás todo lo que yo diga, o si no, las personas que amas van a ir desapareciendo uno por uno. Y tengo una lista llena de nombres. —Saca una pequeña hoja de su bolsillo y la lee divertido. —Jackson Caswell, Nathaniel Holbrook, Maia Riggin, ¿continuó?

Lloro aún más, Jack, Nate, Maia, todos están en peligro por mi culpa.

—No sabes en lo que te has metido, ¿tienes idea de lo que significa mi apellido? ¿El apellido de Nate? No sabes de lo que son capaces las familias como las nuestras.— Me armo de valor. De aquí saldré viva.

En un movimiento, saca una pistola de su espalda y la pone sobre mi cien. Jamás habia si quiera visto una pistola real.

—Créeme que se de lo que son capaces, por eso mismo estás aquí princesa.— Dice riendo.

—No te atreverías, me necesitas con vida, ¿cierto?

Me prueba errónea cuando carga el cartucho. Un simple movimiento y estaría muerta.

—No, cariño. Necesito tu cuerpo. A mi me da igual si vives o mueres.— Se acerca demasiado a mi que siento su respiración. Me da miedo moverme, no quiero morir.

Decide por bajar el arma y la vuelve a guardar detrás en su espalda.

—Mucho cuidado con tus palabras princesa. Aquí no vales lo mismo que allá en tu castillito de cristal.

Money Heist | (completada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora