→ Dame otro

2.4K 293 52
                                    

— ¡Mina! — Llamó Chaeyoung desde la comodidad del sofá. Hoy tenía ganas de ver una película, una de terror, por que se sentía peculiarmente fuerte como para soportarlas.

— ¿Que sucede, hermosa? — Mina dejó ver su cabecita desde el otro lado de la habitación. Chaeyoung sonrió al verla, le encantaba ver a Mina con un moño un tanto desordenado y sus lentes de lectura.

— ¿Tienes tiempo? — Preguntó. Su mayor se acercó a ella sentándose a su lado.

— Para tí siempre — Contestó la nipona.

Se movió como niña pequeña colándose entre los brazos de su novia, descansando su cabeza en el pecho de Mina.

Sigilosamente sus manos viajaron por los muslos desnudos de su mayor, ya que ésta usaba solamente una camiseta holgada.

— Saca tus manos de ahí, Chae. — Rió Mina depositando un besito en la cabeza de Chaeyoung.

— ¡No pienses mal! Yo solo quería ver una película~ — Puchereó la menor.

— Está bien, lo siento. ¿Que película?

— ¡Una de miedo! — Exclamó la coreana pateando por accidente a Mina. — Perdón bebé — Dejó un beso en la mano de la extranjera.

La pequeña Chaeyoung se giró para encarar a Mina, viéndola con esos ojitos de perrito.

— ¿No es una excusa para dormir encima de mí, y más si vas a poner a Prince a dormir también encima de mí?

— ¡No! Ya no les tengo miedo~ Igual siempre duermo encima de ti. — Dijo Chaeyoung tomando el control remoto y yendo directo a Netflix.

— Pues sí, pero por qué tú eres mi princesa hermosa, Prince la última vez no olía tan bien que digamos. — Comentó ella un tanto disgustada por su pequeño recuerdo con la bolita de pelo blanca.

— Bueno amor, pero eso no pasará de nuevo. ¡Vamos, veamos una película~!

— ¿Segura? No quiero verte lloriqueando después.

— Ya te dije que eso no pasará. — Dijo con mucha confianza.

Myoui tomó su palabra y decidió levantarse para ir en búsqueda de algunas almohadas y una manta.

En lo que ella las traía, Chaeyoung buscaba una película.

"De miedo pero que no de tanto miedo" Pensó

Sí, se sentía valiente, pero tampoco era para abusar de ello, puesto a que seguramente tendría pesadillas y despertaría a Mina llorando desconsoladamente hasta que su novia la arrullara como a un bebé.

— ¿Encontraste una película? —  Vió el rostro de Mina, la manera en como la miraba seguramente se estaba dando cuenta de su pequeño nerviosismo. Eligió una al azar y sonrió.

— Listo — Se acomodaron en el sofá.

— No quiero verte llorando después.

Pff seguramente Mina estaba exagerando.

•••

"Basado en hechos reales"

Chaeyoung estaba en el punto que le asustaba cualquier diminuto sonido, tanto así que le dió un mini paro cardíaco al escuchar a Prince ladrar.

— No estuvo mal ¿Cierto?

— Para nada, muy aburrida. — Dijo Son. Mina rió y al ya ser muy tarde decidieron irse a dormir.

Se acostaron e inmediatamente la japonesa cayó en un profundo sueño.

•••

Eran ya las 2:45 a.m y Chaeyoung se levantó de repente un tanto sudada. Había tenido una pesadilla y no quería despertar a Mina, sin embargo los ruidos no ayudaban mucho puesto a que creaban más temor en ella.

Se escuchaba como alguien rasguñaba la puerta, tocaban la ventana y pasos por el techo.

Cuando menos se dió cuenta comenzó a temblar y a llorar.

— M-Mina~ — Chaeyoung comenzó a sacudir a su novia.

— ¿Chaeng? ¿Qué pasa?— preguntó ella en un susurro

— Tengo miedo. — respondió en el mismo tono abrazando sus piernitas.

— Te dije que no quería verte llorando.

— Mina~

— No Chaeyoung, déjame dormir. — Myoui dio la vuelta y puso la almohada encima de su cabeza.

Chaeyoung por su parte solo se quedó ahí abrazando sus piernas mientras las lágrimas bajaban por sus mejillas.

Volvió a intentar consolidar el sueño pero seguía temerosa, sentía que en cualquier momento la separarían de Mina mientras la arrastraban lejos.

— Minari~ — Sollozó un poco más fuerte logrando llamar la atención de su novia.

En ese momento Mina la vió en posición fetal abrazada a sus dos piernas mientras temblaba.

— Ay Chaeng, princesa ven aquí. — No tardó ni un segundo en colgarse del cuello de Mina y enredar sus piernas en la cintura de esta.

Mina tomo la sábana y la tiró encima de ellas.

— Ya tranquila...yo estoy aquí. — Besó su cabeza. — No dejaré que nadie te lleve, mi amor. — Dejó otro beso pero esta vez en los labios de Chaeyoung.

Con sus pulgares limpió las mejillas de esta y comenzó a acariciar su cabello.

— Lo siento no quería tratarte así. — se disculpó Mina volviendo a besarla dulcemente.

— D-Dame otro. — pidió Chaeyoung sorbiendo su nariz. Mina estiró su mano fuera de la manta hasta alcanzar los pañuelos en su mesita de noche.

La entregó uno para que se limpiara y luego besó sus labios.

— ¿Ya? — Negó

— Quiero muchos besitos para así soñar contigo.

Mina sonrió y comenzó a repartir dulces y tiernos besos por todo el rostro de Chaeyoung. Acarició sus mejillas y dejó que descansara su cabeza en su pecho.

Así pasaron un buen rato, Mina dándole mimos a Chaeyoung hasta que ésta logró dormirse.

— Pequeña miedosa. — Dejo el último beso en la cabeza de su bebé y se durmió.

Las películas de miedo jamás serían para Chaeyoung, pero si Mina le daba mimos por toda la noche, sin duda alguna las miraría diario.

❝ My Strawberry Princess ❞ || MiChaengDonde viven las historias. Descúbrelo ahora