「83」

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Minho quitó el gancho que sostenía la venda con manos temblorosas, luego le dio vuelta alrededor de la cabeza de Jisung unas cuantas veces hasta que cayó, Jisung tenía los ojos cerrados y los abrió con lentitud.

Blanco.

La luz dio a sus ojos, y tuvo que parpadear para acostumbrarse, su visión se enfocó poco a poco.

—Minho —murmuró.

Minho tenía el cabello desorganizado, sus ojos marrón examinaban el rostro de Jisung en busca de respuestas.

Café.

Los ojos de Minho eran cafés, sabía que café era la tierra y el chocolate, pero solo importaba que en este momento los ojos de Minho eran de ese color.

Piel.

La piel de Minho era suave, la había tocado un millón de veces, pero solo entonces vio cuán pura se veía.

Rosa.

Los labios delgados de Minho estaban de color rosa, Jisung los había besado tantas veces, los había delineado con sus dedos. Era un rosa suave, un rosa intenso, un rosa que le provocaba besarlo allí mismo.

Cataño.

El cabello de Minho era castaño, también sus cejas y sus pestañas, Jisung supuso que cuando tenía barba también era de ese color.

—Sungie, ¿Me ves? —Minho preguntó, puso una mano en la mejilla del rubio — ¿Puedes verme?

Podía ver que Jisung movía los ojos, pero no quería estar haciéndose ilusiones, Jisung tomó la mano de Minho entre las suyas, viendo la diferencia de tamaños que ya sabía que existía, las manos de Minho eran delicadas, algunas venas estaban marcadas, vio un 28 en sus dedos de en medio, pero decidió que ya le preguntaría más tarde.

—Te veo, te puedo ver.

Le sonrió radiantemente, sus ojos llenos de lágrimas, descubrió que las lágrimas hacían que la vista se distorsionara.

—Oh por Dios, Jisung —Minho le sonrió de vuelta, no pudo evitar abrazarlo, Jisung tuvo poco tiempo para asimilar lo lindo que se veía Minho sonriendo, miró a su alrededor por encima del hombro de Minho.

Eun Hye estaba de pie al final de la cama, su mano sobre su boca sorprendida, Jisung la miró.

—¿Mamá?

Minho se apartó, dio un paso atrás para que Eun Hye se acercara, Jisung miró cada rasgo de su madre, y luego miro a su padrastro, quien le sonreía.

La puerta de la habitación se abrió, dejando ver a la chica de más temprano, quien al ver la escena sonrió, tras decirles algunas recomendaciones, y Jisung escuchando atentamente, mientras detallaba cada cosa en la habitación.

Eun Hye y su esposo se tuvieron que ir cuando ya era de noche, y no lo hubieran hecho si no tuvieran que trabajar al día siguiente. Quedaron solo Minho y Jisung en la habitación.

Minho cerró la puerta detrás de los padres de Jisung, el menor lo miraba con atención. Por primera vez pudo ver las suaves curvas de Minho, y su pequeña figura, sus ojos se pasearon hasta su trasero, y está bien, llevaba poco tiempo viendo pero ya sabía lo que era la belleza.

—Ven —pidió y Minho se acercó a él, tomando su mano suavemente.

—Así que... —Minho le sonrió — ¿Qué opinas de mí?

Jisung rió rodando los ojos.

—La verdad, eres horrible.

La sonrisa de Minho cayó.

—¿Enserio?

—No —Jisung frunció el ceño, no entendió como alguien tan hermoso como Minho podría creerle si le decía que era horrible—. Eres precioso.

Minho sonrió aliviado, dio un beso en los nudillos de Jisung.

—Dime más de eso.

Jisung rió, viendo como Minho se subía a la camilla, y se acostaba a su lado, poniendo la cabeza en su pecho, admiró por un momento la diferencia de tamaños.

—No —murmuró —No te hagas así, quiero verte.

Minho le sonrió, subiendo todo su cuerpo hasta que su cabeza estuvo al lado de la de Jisung, quien se giró para quedar de cara a Minho.

—Hola, guapo —Minho le sonrió, y esas palabras hicieron que Jisung lo notara.

—Espera, quiero verme —Jisung dijo.

Minho rió, porque tampoco había pensado en eso. Sacó su celular del bolsillo trasero de su pantalón, bajándole todo el brillo para que no afectara la vista del rubio. Le mostró la pantalla de bloqueo.

—No te enamores de ti mismo —advirtió.

—Fue antes de que te cortaras el cabello —Minho mencionó, Jisung levantó una ceja, y Minho rió suavemente.

—¿Cuando la tomaste?

—Cuando viajamos a la playa, ni lo notaste. Soy bueno tomándote fotos de imprevisto. Supongo que ya no más.

—¿Me has tomado una con el cabello corto? —Jisung preguntó, pasándole el celular a Minho.

—Sólo como ocho mil —Minho respondió, haciendo a Jisung sonreír.

INKED ♡━мιиѕυиg.|| αdαpтαcιóɴDonde viven las historias. Descúbrelo ahora