Super = EL

Parte 51

Kora y Diana bajaron las manos, pero sin soltarse y se besaron.

Todo el mundo aplaudió y se levantaron de su sitio.

Se soltaron las manos y vieron los cortes, Kora vio que se le estaban curando muy rápido, así que cogió una mano de Diana y lamió la herida, después hizo lo mismo con la otra mano y vio que se le cerraban como a ella.

Diana no había entendido el gesto, pero miró sus manos y vio que ya no tenía ningún corte y no le dolían, solo las tenía manchadas de sangre. Miró a Kora sorprendida y ella solo sonreía.

Dos amazonas se acercaron a ellas para curarles las heridas y limpiarlas, pero al ver que no tenían nada, se quedaron mirando entre ellas sin entender. Kora vio el recipiente de agua y la toalla y se dispuso a limpiar las manos de su esposa.

Cuando terminó se dispuso hacer lo mismo consigo misma, pero Diana le quitó la toalla, la mojó de nuevo para limpiarla un poco y se entretuvo a limpiar las manos de Kora.

Cuando ya tenían las manos limpias, se quitaron el cordel y se lo entregaron a la sacerdotisa. Una vez que habían terminado se acercaron a su familia que las esperaba para abrazarlas y felicitarlas.

Iban a celebrar la boda, pero Kora vio que en su pulsera, parpadeaba una luz.

—Dime. —se puso sería y se apartó un poco del gentío.

—Ama, sabemos que dijo que la nave tardaría en llegar, pero parece ser que nuestros cálculos han sido erróneos, la nave de Braniac se encuentra cerca de Mercurio.

—Eso es muy cerca. —dijo Kora con el ceño fruncido.

—Sí, pero creemos que han usado los propulsores para llegar más rápido, creo que Braniac no tiene paciencia.

—Gracias por informarme, avisa a la liga que se prepare, que vayan todos a la DEO, nos reuniremos allí y partiremos todos juntos, pero antes tengo que terminar la bomba.

—De acuerdo ama.

Kora se reunió con las demás y les dijo lo que sabía, la festividad se había acabado para ellas. Kora usó su pulsera y todas cruzaron el portal.

Diana se despidió de su madre diciéndole que tenía una misión urgente, y que volverían más tarde. Después cruzó el portal junto con su esposa.

—Kon quédate aquí y conéctate a las cámaras de Nacional City.

—Vale.

—Alex, termina la bomba por favor, programala 30 minutos.

—Voy. —salió corriendo.

—Alura, Astra quedaos aquí con Kon y Ruby.

—No hay problema.

—Kon, abre un portal a la DEO y trae aquí a Felicity y a William.

—Muy bien, pero ¿Por qué?

—No sabemos cuándo actuaremos y puede que cuando lo hagamos la ciudad esté medio destruida.

—En ese caso tendríamos que avisar también a Cat, no quiero que le pase nada. —dijo Kara.

—De acuerdo, ve a buscarla y de paso ponte el traje. La próxima vez guarda el traje en la fortaleza, estará más seguro. Ya no puedes tenerlo a mano, ya no lo llevarás a diario.

—De acuerdo. —usó su pulsera y salió volando.

—Sam ¿estás lista?

—Todo lo lista que puedo estar.