Arma X

Los Vengadores

Los Vengadores. Un grupo con los héroes más fuertes del planeta, que habían salvado a la Tierra de entrar en las garras del dios asgardiano Loki, el dios de las mentiras, Loki el embaucador. Juntos habían derrotado al mismo dios y su ejército de Chitauri, mandando una bomba nuclear contra la nave madre de la flota de los alienígenas, casi llevando a la muerte a Tony Stark, uno de los hombres más listos del mundo. Pero al final, el hombre que encarnaba a Iron Man, el Hombre de Hierro, había logrado salir con vida gracias a una de las potencias del equipo, el Vengador más Fuerte, Bruce Banner, o más bien su alter ego Hulk, aquella masa de músculos sin cerebro capaz de destruir una ciudad por completo y llevarse todo por delante sin más.

Con Loki a salvo tras las rejas de Asgard, los Vengadores habían tomado caminos separados hasta la próxima crisis mundial. Tony Stark enfrentó a Aldrich Killian, uno de los creadores del virus conocido como Extremis, capaz de aumentar la fuerza de un humano, dándole poderes de fuego y una regeneración ligera. Pero siendo tan inestable, la persona que llevara consigo el Extremis, era prácticamente una bomba de tiempo. Killian lo sabía y Tony lo enfrentó cuando el CEO de A.I.M se llevó a Pepper con él, secuestrándola, llegando el hombre a tomar la forma del Mandarín bajo bambalinas y destruyendo su casa en Malibú.

Tony se salvó fingiendo por un tiempo su muerte y gracias a un muchacho de Tennessee, Stark volvió a la carga contra Aldrich con fuerza, descubriendo que el CEO de A.I.M había tomado al presidente, encerrándolo en Patriot completamente y llevándose con él a Pepper, su Pepper, por lo que lanzó todas sus armaduras contra el hombre y su ejército de humanos mejorados.

Finalmente él no había terminado con Killian, si no que fue Pepper quien lo acabó gracias a Extremis en su sistema. Sabiendo que la mujer que amaba estaba en peligro, Tony lanzó todos los recursos y encontró cura al virus, salvando a Pepper a la vez que él mismo se hacía una cirugía para poder vivir sin el reactor ARC conectado a su cuerpo. Todo había salido bien para ellos.

Por su lado, Steve Rogers, el hombre del manto del Capitán América, aquel que representaba a la bandera de Estados Unidos, la libertad, el poder de hacer realidad tus sueños y defender aquello que era justo, tuvo que lidiar con Hydra, descubriendo, junto a Natasha Romanoff, que la agencia nazi había estado dentro de S.H.I.E.L.D casi desde sus inicios, infectando todo y teniendo dentro lo que habían denominado como Agentes Durmientes. Hydra había tomado y lavado el cerebro de cientos de agentes, metiendo semillas dentro de la agencia de protección mundial que esperaban para salir, liderados por Alexander Pierce en un principio y que el Cap y Widow tuvieron que lidiar con ellos, encontrando un aliado en Sam Wilson, alias Falcon y un enemigo, el Soldado del Invierno, quien no fue otro que Bucky Barnes, el mejor amigo de Steve.

Con algo de esfuerzo, Steve y sus compañeros se deshicieron de Hydra cortando una de sus cabezas, evitando que lanzaran el Proyecto Insight sobre el mundo, con el que habrían acabado con miles o tal vez millones de personas. Destruyeron los Helicarrier y detuvieron a Pierce completamente, desmantelando a Hydra y haciendo caer a S.H.I.E.L.D por completo.

Sin S.H.I.E.L.D, Rogers se mudó junto a Romanoff a la Torre de los Vengadores. Clint había abandonado tanto la agencia como el equipo, por lo que él no fue parte ni de la lucha ni del juicio sobre ellos, cuando Natasha reveló toda la información de Hydra. Pero era tarde. Por más personas que el gobierno detuviera, Hydra estaba por encima.

Bruce Banner se mantuvo alejado de todos los problemas de sus compañeros, incluyendo la lucha de Thor contra los Elfos Oscuros, quedando confinado por propia voluntad en la torre, manteniéndose en completa calma y alejando a Hulk hasta que fuera el Código Verde, una llamada para su alter ego completamente destructivo y con el que daba una ventaja sobre fuerza a su equipo.