Uzumaki Naruto

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Salió del baño completamente renovado, mandando el olor a muerto al simple olvido de sus fosas nasales, deshaciéndose del olor a orines que había quedado en su ropa, la cual había quemado por recomendación de la mujer que le había dado un techo. Hydra le había dado un techo, comida y formación como soldado, como arma; pero no sentía lo que sentía en Alias Investigaciones, el hogar y el lugar de trabajo de Jessica Jones, la mujer que lo había sacado de la calle antes de que la policía o las personas hicieran demasiadas preguntas sobre la sangre que empapaba sus manos, su ropa. Incluso su cabello había quedado algo manchado del líquido rojo.

Cuando terminó con el sujeto, clavando sus garras en la tráquea del pandillero al servicio de Kingpin, no había esperado que la mujer investigadora lo ayudara. Esperaba tener qe salir luchando, con más disparos en su cuerpo, dejando un rastro de su sangre manchando la escena del crimen, como Jones había declarado mordazmente. Parecía no gustarle su actuar.

¿Estaba mal matar a cualquier persona? Era una pregunta que rondaba su mente desde que salió de Hydra, dejando atrás a Cable, quien lo había querido llevar junto al profesor Charles Xavier, un inminente defensor de los mutantes. Se especulaba que el mismo profesor había fundado un hogar para los mismos incomprendidos, algo que nadie había logrado probar todavía.

Si Wade Wilson no hubiera detenido a su compañero, probablemente ahora estaría atado al lado del profesor y sus estúpidos seguidores. Debía deshacerse de Hydra y no podía jugar al héroe cuando los nazis estaban llevando la guerra hacia las sombras, ganando. Se decía que S.H.I.E.L.D había resurgido, pero era casi imposible poder contactar con la organización antes liderada por Fury.

Tenía demasiadas cosas en mente. Wyndham lo estaría buscando con aquellas copias suyas. Se había desecho del Depredador X; pero probablemente tendría otro espécimen en la recámara para soltarlo sobre la ciudad, detrás de él para matarlo. Y era algo que no le dejaría fácil. Antes moriría que volver con el profesor Helbert Wyndham.

Masajeó sus hombros un poco, apartando unos mechones de su cabello. Había tenido un corte de pelo, algo brusco, del lado de Jones, así como una cuchilla que había usado para deshacerse de la barba, dejando completamente su rostro carente de pelo. Su cabello ahora estaba desordenado, rubio dorado, limpio. Debía agradecer la ducha que le había permitido Jones para eliminar el olor. No sabía como lograr quitarse ciertos olores y la suciedad.

―Entonces, ¿qué edad tienes?―Jones preguntó, dejando sobre la cama una bolsa llena de ropa. El muchacho se acercó, rebuscando. Sacó unos boxer y unos calcetines, pasando a tomar los jeans completamente azules claros, algo desgarrados―. No aparentas ser un adolescente. Te echaría unos veintiuno.

Alto, su cuerpo había tomado un cambio total en el mes y medio que había pasado fuera de Hydra. Creció hasta el metro setenta y nueve, formando unos músculos bien definidos, perdiendo toda grasa de bebé y pasando a una maduración casi completa del cuerpo.

―Según lo que tengo entendido, tengo quince años―el mutante informó, entrando al baño para proceder a ponerse la ropa. Dejó caer la toalla al suelo frío del baño y cubrió su intimidad con los boxer, pasando al jean que ajustó en su cintura.

―Venga, deja a un lado las bromas―Jessica, algo cínica, declaró. Se había sentado en su cama, moviendo la botella vacía de ron, dejando solamente unas gotas. ¿Quince años? Eso era imposible, al menos para ella. El chico mostraba un cuerpo adulto, formado. Un rostro algo afilado y sin grasa. Los adolescentes no estaban tan...¿buenos?

Jessica Jones meneó la cabeza, suspirando y mandando aquellos pensamientos a lo más hondo de su mente. Estaba embarrada con Kingpin por un lado, Hydra por otro y lidiar con Killgrave entre medias para poder sacar a Hopes de la cárcel. Los trabajos estaban sobre sus hombros, haciéndola sentir superada por el dolor. Recuerdos de su tiempo bajo el control de Killgrave, estaban cada vez mucho más presentes, como un mosquito dando vueltas, sobre el oído.

Arma XWhere stories live. Discover now