Capítulo 23

2.2K 103 5
                                    

Éste capítulo contiene material explícito, lees bajo tu responsabilidad.

---------------------------------

Ese incendio completamente nuevo en el interior de mi cuerpo que no logro apagar se propaga cada vez más y más, y es que tal vez, no quiera hacerlo. Por primera vez en años estoy experimentando sensaciones, emociones que no sabía que existían y ello, con la ayuda de él.

-Así es cariño, lo hiciste– da una palmada en mi centro húmedo, haciendo que mi piel se erice y las piernas me tiemblen –No tienes ni idea de lo preocupado que estaba, y pensar que ese idiota pudo haberte puesto un dedo encima hace que hierva mi sangre-

Por unos segundos hacerme la ilusión de que estaba celoso de que otra persona pudiese estar conmigo, y ponerme un poco más caliente por eso, es suficiente para saber que estaba completamente jodida en todos los sentidos. Sí que lo estoy.

De mi boca no salen más que gemidos, por lo que no contesto nada y eso le molesta. Enreda la mano en mi cabello enmarañado para acercarme a su cuerpo, tirándome para atrás –Aclaremos esto de una vez para no crear confusión, ¿a quién le perteneces niña?- ríe mientras me susurra al oído –Vamos, dame el gusto, gímelo o grítalo si es necesario-

No respondo nada. Sus besos húmedos trazan un camino desde el lóbulo de mi oreja hasta mi cuello y su bulto rozando mis empapadas bragas no me permite pensar correctamente; dándome cuenta así de, vergonzosamente, lo mucho que lo necesito.

James gruñe y me provoca escalofríos -¿No lo dirás? Bien, tendré que sacarlo de ti- me da un beso en la mejilla, suelta mi cabello y presiona mis muñecas detrás de la espalda para que las mantenga allí, apoyando mi cabeza sobre el escritorio.

Sus manos se dirigen a mi ropa interior para acariciándome por sobre la tela y luego, luchando con una sola mano, me las quita dejándola a mis pies. Deposita uno beso en mi espalda baja, separa un poco más mis piernas con la rodilla y muerde mi trasero haciéndome reír torpemente. Escucho como desabrocha su pantalón pero éste no cae al piso, agarra mi cabello y se introduce en mí de una sola vez.

Un gemido hace que me ahogue por la sorpresa y el placer inunda mi cuerpo con solo un par de estocadas. Suelta mis manos y aprovecho para sostenerme del escritorio, rodea mi cintura con el brazo, buscando un mejor agarre para continuar con el intenso vaivén. Pero, de un momento a otro, se detiene. Siendo nuevo en mí la vergüenza y el encogimiento aparecen, cuando en voz alta me quejo porque paró; para luego susurrar más calma un "por favor", provocando que el señor Henderson aporre mi trasero nuevamente.

Aún se encuentra dentro mío, pero no se mueve por nada en absoluto -¿Por favor qué? ¿Qué es lo que quieres?- conduce la mano que sostenía mi cintura a mi clítoris, masajeando aquel centro de placer y haciendo que suelte un, más que gemido, grito.

-A, a ti, por favor. Muévete- mi voz sale entrecortada y más ronca que de costumbre, mientras intento tirar mis caderas hacia atrás, pero él me detiene con otra nalgada.

-Haz lo que te pedí primero cariño- sus dedos no dejan de moverse mientras habla –Dime a quién le perteneces y tendrás lo que quieres-

Río al darme cuenta de que se está burlando de mí, mientras que estoy a pocos segundos de correrme. Con un demonio, a la mierda –Suya carajo, soy suya pero por favor, no se detenga señor-

James intensifica el movimiento de sus dedos y manoteando algo para sostenerme, con mis piernas temblando; consigo mi orgasmo empapando su mano –Mierda que sí lo eres, y que no se te olvide- sin darme tiempo a volver a pisar tierra retoma sus embestidas, ésta vez incluso más duras que antes, haciéndome creer que en cualquier momento me desmayaría –Eres malditamente mía en todos los aspectos. Nadie te va a coger como yo, nadie te va a poner tan húmeda como yo y nadie te va a proteger como yo, ¿me oíste bien Jones?-

Mi corazón está a mil por hora, porque a pesar de aun estar en un trance y por lo caliente de la situación, me causó un cosquilleo en el estómago aquella frase que probablemente, sólo haya dicho por la calentura. Definitivamente estoy jodida.

Su mano choca contra mi trasero, probablemente ya rojo, logrando que salga de mis pensamientos –Sí señor, lo oí bien- toma mis pechos por sobre la tela del vestido apretándolos y la conocida bola de fuego vuelve a aparecer en mi vientre luego de unas embestidas más –Ya voy a...-

Su pecho se posa sobre mi espalda, muerde el lóbulo de mi oreja dejando que sienta su respiración agitada y sus gemidos al entrar y salir de mí –Lo sé cariño, sólo hazlo- para luego de un par de golpes más, llegar prácticamente, al mismo tiempo que él sale de mí y esparce su esperma sobre mi espalda.

---------------------------------

Lamento mucho mucho la demora, tuve problemas con mi computadora, pero ya estoy de regreso!

No se olviden de votar y comentar!

Lxs amo ❤

Free Pass || +18 -EN EDICIÓN-Where stories live. Discover now