Red swan; Reiner Braun. [#1]

13.

Un suspiro de alivio salió de los labios de Evie al poder salir de la base sin preocuparse por los titanes que había al rededor del lugar.

Habían logrado acabar con los titanes que estaban en el sótano del lugar y, gracias al titan que mataba a los de su propia especie, pudieron salir sin problemas, así que la retirada podía llevarse a cabo en ese mismo momento. Habían tenido más bajas de las que nunca llegó a presenciar y eso la aterraba un poco porque no sabría como podría mirar a los ojos a sus otros compañeros y esperar que nadie la odie por las decisiones que tomó.

Quizá se ponía más presión en su espalda de la que debería, era sólo una cadete recién graduada de diecisiete años. Si, era una de las mejores de su tropa y siempre fue altamente elogiada por su liderazgo, pero no se podía comparar con soldados que tenían años de experiencia en la legión. Junto a ellos Evie Langer era simplemente una niña tonta llena de ilusiones infantiles.

Lanzó un suspiro entrecortado mientras pensaba en que rostro tendría su padre si la viese en ese instante, no Levi, si no su padre biológico, el hombre que Margoth le rogó que buscase, pero que al día de hoy no había encontrado. Su madre le contó que era un soldado excepcional, y se sintió mal de pronto, pensando en que nunca sería lo suficientemente fuerte para compararse con ninguno de los dos hombres que podía llamar padre.

—¿Estás bien, Ev?.-Preguntó Reiner colocando su enorme mano sobre el hombro de la mayor, ella simplemente asintió, agradecida con ella misma por no derramar ni una sola lágrima pese a sus pensamientos autodestructivos.

—Si, tranquilo, sólo quiero salir de aquí.

Aseguró mientras colocaba su mano sobre la ajena, sintiendo así un poco de la calidez ajena. Todavía estaba algo enfadada con Reiner por actuar como un idiota cuándo se refería a ellos dos, pero había demostrado que le importaba cuándo estuvo apunto de morir allí abajo y podía darle el beneficio de la duda con respecto a lo que realmente sentía.

—Nos debemos una charla luego de esto.-Murmuró el rubio para que ninguno de los otros cadetes escuchasen sus palabras.

Reiner sabía muy bien que había sido un idiota al momento de salvarla, si tan sólo la dejaba morir sus sentimientos por ella no serían un problema a futuro, pero aún así había arriesgado su propia vida para tomarla entre sus brazos y protegerla de todos esos titanes que amenazaban con devorarlos.

Tal parece que esa sirena de piel blanquecina y cabellos oscuros podía lograr que Reiner hiciera cualquier cosa con tan sólo mirarlo con esos hipnotizantes ojos azules que podían derribarlo en un instante.

No sabía exactamente que hacer cuándo se trataba de la Langer, si besarla hasta el cansancio o dejarla morir para no sufrir más en ese horrendo limbo. Bertolt y Annie ya se estaban percatando de su accionar y temía que sus propios compatriotas y amigos comenzarán a desconfiar, él había asumido el rol de líder, no podía darles un ejemplo erróneo.