Odasaku

1.7K 215 23
                                    

Dos meses después, SK SOUKOKU había tomado más fama y popularidad rápidamente, debido a su estilo, la letra de sus canciones, su inusual vestimenta y la voz de su vocalista principal, además de que el grupo fue invitado para filmar una película en Los Ángeles, y eso los volvió más populares aún.

Afortunadamente, Chuuya ya no presentaba tantos síntomas del embarazo, y podía ocultarlo con facilidad, pues su barriga apenas y comenzaba a notarse y tenían que estar muy cerca para notarlo, y nadie lo estaría tanto más que sus compañeros de banda.

Los cuatro integrantes, Dazai, Kunikida, Rampo y Chuuya, se disfrazaban de mujer, de sus respectivos personajes femeninos de banda. Sus maquillajes eran perfectos, al igual que sus vestuarios.

Para Rampo, ser baterista de una popular banda, era un pasatiempo después de una larga semana llena de casos criminales como detective. Además de que nadie los conocía sin sus vestuarios de mujer.

— Chicos, estoy preparando una canción para el bebé que viene en camino. Chuuya saldrá con el papel de madre cuando tenga ocho meses de embarazo. Será un vídeo musical, y nadie sabrá si tu barriga es real o no. Además, es una canción dedicada para mi niña...

— ¡¡¡NO ME JODAS, DAZAI!!! ¡¡¡NO SALDRÉ EN NINGÚN VIDEO MOSTRANDO LA BARRIGA CUANDO LA TENGA Y ADEMÁS ¿CÓMO ESTÁS TAN SEGURO DE QUE EL BEBÉ ES UNA NIÑA?!!!

Gritó irritado, lanzando una peluca hacia el de vendaje.

— Chuuya, respóndeme tres cosas... ¿Quién es el creador de SK SOUKOKU? ¿Quién escribe las canciones y quién es el vocalista? ¿Quién es el líder al que debes obedecer?

Interrogaba con una sonrisa. Chuuya gruñó y lanzó una peluca más al suelo, molesto.

— ¡¡Lo haré!!

— Por cierto, chicos... ¿Con quién se quedaron los bebés?

Preguntó Rampo preocupado. Irían a una gira por toda Asia, viajarían, entonces... ¿Dónde se quedarían Ryūnosuke y Atsushi?

— Imagino que los dejarán con los padres de Dazai, ¿O no?

Opinó el rubio. Kunikida sabía que Chuuya no tenía padres por ser una reencarnación de algo llamado Arahabaki, pero desconocía a los padres de Dazai.

— Kunikida-kun, mi padre es un maldito demonio que quería matarme para salvar a su segundo hijo. Además...parecemos hermanos...

— ¿Y qué tal tu madre? ¿Dónde está ella?

Añadió Ranpo.

— Mi madre no es "ella", es un hombre que me abandonó en el basurero cuando apenas tenía cuatro años... No recuerdo mucho su apariencia, sólo... que siempre traía una peluca de color negro, para hacerme creer que su cabello era de ese color, seguramente. Ese mismo día, un hombre de cabello tinto o rojizo, con la voz idéntica a la de mi madre, su altura y todas las características excepto de la peluca, me recogió del basurero. Ese hombre es mi gran amigo Sakunosuke Oda, Odasaku, el de menor rango en la Port Mafia. Ese hombre es mi madre, pero quiso hacerme creer que era otra persona al momento de regresar por mí...

Respondió con la cabeza agachada y un aura triste y depresiva. Sonreía por haber sido salvado por Odasaku, su gran amigo, un adulto de 33-34 años de edad que amaba a los niños y a los huérfanos. Podía recordarlo todo pese a su corta edad en aquel momento.

FLASHBACK.

Fyodor abusó de un adolescente de 15 años en situación de calle, pero al ser un demonio, lo pudo dejar embarazado y él se fue a Rusia.

El joven de nombre Sakunosuke Oda, ni siquiera sabía lo que le ocurría hasta que fue atendido por médicos en una clínica cercana a dónde cayó débil, y lo ayudaron en el parto, realizándole una cirugía. Le presentaron a su bebé, a esa criatura que se parecía mucho al hombre que lo violó. Comenzó a llorar y a temblar asustado. 

Tenía miedo, estaba aterrado. Se vió obligado a criar a su bebé durante cuatro años, sin ningún día dejar de sentir miedo por las constantes visitas de Fyodor, quien tenía muy presente a su hijo y a la madre de éste y el lugar donde se ubicaban siempre. Pues el niño era un Demonio al igual que él, y su habilidad era la única en el mundo, una de las más poderosas de todas.

Ahora el pequeño Shūji vivía en una humilde casita de cuatro paredes junto con su madre. Aunque nunca conoció el nombre de la persona que le dió la vida en aquel entonces.

— Saku-kun, ¿cómo te ha tratado la maternidad? Espero que mi hijo no te dé muchos problemas—. Decía Fyodor con burla. Sacó algo de dinero y lo lanzó al joven de ahora 20 años, riéndose de él.

— No quiero tu maldito dinero, Fyodor.

A pesar de su miedo, se había vuelto más valiente por su hijo, para poder protegerlo de todos los que quisieran hacerle daño.

— Pero Shūji-kun lo necesita. Ven con papá, Shūji.

— ¡No! ¡No me gusta papá Demon!—. Gritó el menor, lanzando una pelota hacia Fyodor.

La tarde de ese mismo día, cuando Fyodor se había ido...

Sakunosuke caminaba de la mano con Shūji. Traía puesta su peluca negra de siempre, que para el niño era un cabello falso, pese a no haber visto el color real antes de su cabello. Tenía un plan.
Llegaron a un basurero, y el joven se puso a la altura de su hijo, abrazándolo mientras lloraba. Lo abandonaría pero no del todo. Se quitaría la peluca negra, cambiaría su ropa, y se haría pasar por otra persona diferente frente a él, siendo "su salvador" y hermano mayor. Se sentía terrible al ser llamado "mamá" por ese niño siendo un hombre, era deprimente y quería cambiar el "mamá" por un "oniisan" o algo parecido.

— Shūji-kun... Mamá tiene que dejarte aquí por tu propio bien. Por favor, perdóname por lo que voy a hacer.

Explicaba. Miraba que el castaño empezaba a derramar lágrimas y apretaba sus pequeños puños. Limpiaba las lágrimas del pequeño.

— ¿Me vas a abandonar, mami?—. Cuestionó con sus ojitos llenos de lágrimas.

El "pelinegro", no le dió una respuesta. Se alejó del niño, perdiéndose de su vista, e iría a transformarse en vestuario en otra persona.

Después de 15 minutos, regresó siendo Sakunosuke Oda, su verdadero nombre, el mismo que Shūji desconoció siempre.

— ¡Hola, pequeño! ¿Estás solo? ¿Te gustaría venir conmigo?

Se acercó a él, supuestamente engañando al castaño y haciéndole creer que era otra persona, pero el menor no era engañado tan fácilmente.

"¿Por qué mi mamá se quitó la peluca y finge no conocerme? ¿Por qué me abandonó para volver por mí más tarde? Mi mamá no quiere ser mi mamá..."
Pensaba el niño.

El castaño tenía la cabeza agachada, lloraba.

— ¿Q-Quién eres?—. Cuestionó, siguiendo el juego a su mamá.

"Pude engañarlo. Ahora podré cuidarlo y protegerlo sin que sepa quién soy".

Pensaba Oda.

FIN DEL FLASHBACK.

— Y bien... ¿Ese Odasaku no puede cuidar a los niños mientras regresamos de la gira?

Preguntó Kunikida. Se daba los últimos toques de maquillaje para salir al escenario.

— H-Hace tiempo que no me encuentro con él... Además, Odasaku cuida a muchos niños huérfanos, no puede cuidar a dos niños pequeños...

— ¡¡Pero son sus nietos!!

Gritó el rubio. Rampo lo detuvo.

Chuuya sabía que Dazai sufría al hablar de su pasado, de su infancia y de sus extraños padres. Lo notaba triste y deprimido antes de la presentación, así que se acercó a él, y besó una de sus mejillas, antes de ponerse el labial.

Dazai se sonrojó levemente. Era la primera vez que el pelirrojo hacía algo tan cariñoso por él, y le parecía raro pero agradable.

— Debes estar bien, cariño...

Murmuró Chuuya, con sonrojo. Dazai se sonrojó más al escuchar la última palabra. Cariño. ¡¿Chuuya lo había llamado "Cariño"?!

— ¿M-Me llamaste "cariño"?

— S-Sí... ¿T-Tienes algún problema con eso?
Respondió nervioso.

FAMILIA IMPROVISADATahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon