| CASADA CON JEON JUNGKOOK | JUNGKOOK | saga #2

C U A R E N T A I C U A T R O

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- JungKook... -susurró-

Los ojos de ambos se conectaron, el siente que sus piernas están congeladas y no puede moverlas, quiere ir con ella. Mientras que Seoyeon no puede evitar temblar.

El está aquí, el está aquí...

Sin saber que hacer a causa de no estar preparada, se dió la vuelta dándole la espalda.

- Disculpe, me confunde. -su voz tembló-

- Cariño, ¿La conoces? -preguntó Naeun-

Ni siquiera la escucho, está aturdido, está sorprendido, la tiene frene a sus ojos, y esta vez no dejará que se vaya...

- Seoyeon. -volvió a decir-

- ¿JungKook, te sientes bien estás pálido?

Cerró sus ojos con fuerza, necesita ser fuerte, aunque no es como quería encontrarse, debe mantenerse firme.

Controló su respiración, ignoró el segundo llamado de su esposo y comenzó a caminar acelerada.

Lo siento... No pudo.

- ¡Seoyeon! -caminó a ella pero Naeun lo detuvo-

- ¿Qué sucede? -lo miró preocupada-

- Lo siento Naeun... -se soltó de su agarre - Regresa a tu casa. Te llamaré luego.

La dejó completamente confundida.

¿Quién es esa mujer? -pensó Naeun-

- ¡Seoyeon! -alzó su voz cuando no la vió por ningún lado- No... No dejaré que te vayas.

Cruzó la carretera, mirando un parque para niños de lejos, donde pudo divisar que entró.

Corrió para poder alcanzarla y no perderla. Siente su corazón latir con fuerza bajo su pecho, su respiración demuestra lo agotado que está por correr y por la adrenalina que siente.

Seoyeon corrió de igual manera, al llegar al parque tropezó y cayó sobre la tierra cerca de los juegos.

Estoy lejos, el no me siguió.

Intentó controlar su respiración aún sin ponerse de pie. Sus ojos están llenos de lágrimas al igual que sus mejillas. Cerró sus ojos intentando parar su llanto... Es ahí cuando siente una cálida mano sobre la suya contra la tierra.

- ¿Estás bien...? -preguntó preocupado-

Levantó su mirada, haciendo que ambas choquen. Los ojos de JungKook transmiten preocupación, pero es diferente a la de antes, a la mirada que ella conocía.

- JungKook... -balbuceo- Yo... Deberías volver con tu mujer.

Alejó su mano y se puso de pie. Segundos después JungKook hizo lo mismo.

-suspiró sintiéndose arto de la situación- Ella no es m...

Dejó de hablar al verla llorar en silencio. Hace lo que puede para no hacerlo, pero las lágrimas salen sin detenerse.