Cap 12

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Graycee comenzaba a removerse en la cama, algo que hacía muy habitualmente cuando no podía dormirse, o simplemente porque estaba incómoda.

Quería seguir durmiendo, pero no tenía el suficiente espacio como tenía diariamente. Y eso se debía a que Fred se encontraba a su lado.

Se dio la vuelta una vez más, empujando su trasero hacia atrás con fuerza. Tanta que hizo que el cuerpo del pelirrojo cayera al suelo.

Ella se levanto al instante al oír aquel fuerte golpe, se sentó en la cama con sus cabellos revueltos y aún con su cara adormilada. Pero aún así con sus ojos bien abiertos intentando entender de donde había venido aquel golpe.

–Joder...

Frunció su ceño al escuchar un susurro bajo, y pronto vio al pelirrojo sentarse en el suelo, haciendo que solo vea de su cintura para arriba.
Quien estaba con su mano en su nuca sobándola, parece que se había golpeado la cabeza al caer.

Graycee empezó a entender todo en cuanto su rastro de sueño desparecido. Su mano fue a su boca al instante intentando que sus risas no escaparan, porque Fred se pondría de mal humor. Y además de que tampoco era la primera vez que sucedía, cuando dormían juntos.

–F-Fred... ¿Estás bien?–Pregunto ella sentada en el colchón con las sábanas tampando sus piernas. Intentando aún no reírse de la situación. Pero se le estaba haciendo realmente difícil.

–Ya recuerdo el porqué dejamos de hacer pijamadas a diario...–Contestó el pelirrojo de mal humor.

Y fue cuando Graycee no pudo más y estalló en risas, recibiendo una mirada amenazante de su amigo aún en el suelo.

–¡Deja de reírte!–Hablo el indignado. Pero eso hizo que Graycee riera más fuerte.

Fred puso sus ojos en blanco levantándose del suelo, dispuesto a dirigirse al baño mostrando su mal humor tanto en sus pasos, como también expresado en su rostro.

Graycee sonriendo quitó rápidamente las sábanas de sus piernas, y corrió hasta él. Abrazándolo por la espalda, enredando sus brazos al rededor de la cintura de este. Mientras su cabeza se apoyaba en su espalda.

–¡Lo siento! ¡Lo siento!–Empezó a decir sin dejar de sonreír. Mientras lo apretujaba contra ella.

–¡No es cierto! ¡Claro que no lo siente!–Hablo Fred viendo hacia el frente, sin querer que Graycee vea la sonrisa que empezaba a asomarse en su rostro.

Graycee soltó una risa aún abrazándolo, no queriendo soltarlo. No quería que Fred se enfadara una vez más con ella por esto.

–¡Si lo siento! ¡¿Puedes culparme por no encontrar acomodo?!–Se defendió ella sonriendo.

Lo soltó un poco, haciendo que el pelirrojo se diera la vuelta mostrando la sonrisa en su rostro. Algo que hizo a Graycee no sentirse tan culpable, después de todo a él le parecía una situación chistosa también.

–Me alegra que ya estés bien.–Hablo el chico con una pequeña sonrisa en su rostro, sin dejar de verla.

Graycee bajo su mirada pero su rostro con su sonrisa seguía intacta. Le gustaba saber que Fred Weasley se preocupaba por ella. Así como ella con él.

–Me siento mejor, gracias por dejarme dormir aquí aun cuando sabías que te iba a tirar de la cama...–Dijo ella en tono ciertamente burlón.

Fred volvió a rodar sus ojos y soltó una risita.

–Tendría que ya irme, ¿Sabes? Quisiera bañarme y quitarme este disfraz...–Dijo mirándose.

No me voy a enamorarWhere stories live. Discover now