Cap 27

224 16 1
                                    

Los días corrían con velocidad, pasando cada vez más apresuradamente. Eso pasaba cuando en verdad estabas disfrutando de aquellas merecidas vacaciones.

Como en este caso lo era para Graycee Rosier. Quien se encontraba acostada en el sofá, con su cabeza apoyada al apoya brazos, y el control remoto del televisor, quien lo había dejado en su barriga.

Luna se había ido a casa hace tan solo unos días. Por lo tanto, Graycee y Fanny estaban conviviendo una vez más solas.

La castaña se encontraba algo disgustada, y con un pequeño nudo en su estómago. Lo suficientemente grande, como para no poder prestar atención a la película que veían sus ojos.

–Dime por favor que este vestido de novia, también te parece horrible.–Espetó Fanny escandalizada, mientras se sentaba junto a su nieta. Con la revista de moda en sus manos.

Graycee miro sin mucho ánimo hacia aquella imagen, donde se mostraba una hermosa modelo de piel negra, con un largo cabello ondulado. Quien llevaba puesto un vestido de novia blanco, que tampoco parecía muy lindo en los ojos de Graycee.

–Si, tal vez...–Contestó, y volvió a poner su mirada en la pantalla del televisor.

Su abuela un poco extrañada, dejó la revista apoyada en su regazo. Y sus ojos se dirigieron a la chica acostada a su lado.

La conocía lo suficiente como para saber que algo le estaba ocurriendo, desde que Luna había dejado la casa. Graycee se había vuelto un poco desanimada, pero Fanny creía que era porque su amiga se había ido.

Pero con el pasar de los días, el animo de Graycee cada vez bajaba más. Y era algo que comenzaba a preocuparle a su abuela.

–Cielo... ¿Que sucede?–Preguntó viéndola, mientras una de sus manos acariciaban su suave cabello.–Y no me digas que "nada", porque seré una señora de tantos años, pero no soy tonta...

Graycee sonrió levemente al escuchar el último comentario de la mujer, y dándose por vencida. Pensando que ya no tenía sentido ocultar lo que le pasaba, se sentó en el sofá, apoyando su espalda al apoya brazos de este. Decidida a contar lo que le sucedía.

–Es Cedric...–Empezó a hablar, mientras sus dedos rozaban los bonotes del control remoto.–Habíamos dicho que pasaríamos juntos año nuevo, pero pasaron los días, y no me ha vuelto a escribir.

Fanny la miro con cierta tristeza, y acaricio una de sus manos con su pulgar. Intentando consolarla.

–Año nuevo es esta noche, supongo que ya es tarde para quedar con él.–Suspiró aún sin mirar a su abuela.–Tenía ilusión con que lo conocieras...–Sonrió con tristeza.

–Oh, Cielo... pero no te pongas mal, tal vez le surgió algún inconveniente, y por eso no pudo responderte. Pero algo me dice que él está bien, así que no pienses en cosas malas.–Empezo a decir mirándola.–Y sobre conocerlo, ya habrá otras oportunidades, estoy a segura.

Graycee volvió a sonreír, pero esta vez mirando a su abuela. Quien no pudo no evitar abrazarla, envolviéndola en sus brazos intentando que se sintiera mejor.

Si había algo que odiaba Fanny era ver a su Graycee mal.

~*~

La tarde había llegado, el departamento estaba silencioso. Y eso era por los ánimos bajos de Graycee, ya que ella y su abuela hablaban casi las veinticuatro horas del día.

Había estado encerrada en su cuarto la mayor parte de las horas, ni siquiera se había molestado en bañarse. O siquiera pensar en que se pondría esta noche.

No me voy a enamorarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora