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Jisung despertó con el sonido de la alarma. Minho ya no se encontraba a su lado y por un momento creyó que todo había sido un sueño. Bajó las escaleras esperando encontrarlo desayunando con su primo pero tampoco estaba allí.

—Buen día, ¿cómo te encuentras? —le preguntó Changbin desde la cocina donde comía un tazón de cereal.

—Algo dolorido... ¿Minho se fue?

—Mm sí, hoy temprano, dijo que tenía que buscar algunas cosas antes de ir al colegio.

Jisung sólo se limitó a asentir mientras se servía un vaso de jugo.

—Ji... tengo que preguntar... —comenzó su primo, pero lo interrumpió antes de que siguiera.

—No digas nada por favor, s-sólo olvidemos lo de ayer ¿sí?

—Sólo quiero entender qué pasa ... bueno qué hay entre ustedes.

—Nada, nada pasa, apenas nos conocemos y... y tú sabes como soy...

—Ey está bien, sólo quería asegurarme. Quiero mucho a Minho, pero como dijo Hyunjin es mejor no complicar las cosas.

—¡Te juro que no es nada! Yo... yo no sé qué me pasó estos días, pero no volverá a suceder.

—Tranquilo, te creo. Ahora ve a cambiarte, todavía debemos ir al colegio.

Jisung miró su rostro en el espejo. Todavía estaba algo hinchado, pero no se veía tan mal. Quería saber cómo estaba Minho, pues él había sido el que se había llevado la peor parte. ¿Por qué se había marchado así? ¿Se había molestado? No tenía sentido, él fue quien le había pedido que se quedara la noche anterior.

Sacudió su cabeza tratando de quitar la idea de su mente. Las últimas semanas no había pensado en otra cosa que no fuese en el pelinegro, pero era suficiente. Habían sido días muy raros e intensos y estaba decidido a dejarlos atrás y comenzar de nuevo.

Se enfocaría en ponerse al día con el colegio, en salir con sus nuevos amigos y tener una vida normal cómo la que llevaba antes de mudarse, o por lo menos algo así. Si Minho quería ser parte de ella no era un problema, pero sólo como un amigo y nada más. Aunque su lobo gruñera, se quejara y gimoteara ya no le haría caso.

—¿Quién es? —preguntó Changbin curioso mientras conducía.

—Es Félix, quiere saber porque no le contesté anoche.

—Oh, ya veo... ¿crees que le gustes?

—¡¿QUÉ?! NO, CLARO QUE NO... s-sólo es un amigo.

—Jaja, está bien sólo preguntaba, él es lindo.

—¿Peeerdón?

—Ajaja sólo digo.

Jisung lo miró con su ceja levantada pero su primo se limitó a encogerse de hombros. Llegaron al colegio y se encontraron con Seungmin y Wonjin, quienes hablaban animadamente hasta que lo vieron, y ambos ahogaron un grito de asombro.

—Wow ¿qué le pasó a tu cara? —preguntó el beta de anteojos.

—Mm no es nada, luego te cuento.

—Está bien supongo... Lix te estaba buscando, creo que está en el salón.

—Iré a buscarlo, ¿nos vemos adentro?

El castaño asintió para seguir su conversación. Jisung se adentró al recinto y pudo jurar oír murmullos a medida que avanzaba. Supo que no sólo lo estaba imaginando cuando su primo lo rodeó con su brazo y puso un semblante serio y un poco amenazante. Supuso que la pelea de ayer ya había llegado a los oídos de todos. Realmente no le interesaba lo que pudieran decir sobre él pero algo lo inquietaba. ¿Dónde estaba Minho? ¿estaría bien?

ROLLER COASTER - HANKNOWWhere stories live. Discover now