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—¡Por los graduados! —victoreó Félix alzando su bebida, siendo imitado por los demás.

Aún quedaban unos días de clases, pero ya era oficial. Changbin y Minho se habían graduado, y ahora se hallaban celebrándolo en una cafetería del centro.

También Hyunjin estaba allí, pues a pesar de que a Jisung no le simpatizaba ni un poco, el alfa seguía siendo uno de los mejores amigos de Minho, y debía soportarlo.

Por mucho que lo había intentado, después de su discusión en la escuela no había encontrado la forma de que el rubio le volviese a agradar. Y podía decir con seguridad que el sentimiento era mutuo.

No sólo era por lo sucedido aquel día, pues ahora podía entender porque el alfa había reaccionado de esa manera. Pero Jisung estaba convencido de que Hyunjin no veía a Minho sólo como un amigo, y su lobo lo confirmaba, ya que cada vez que aquel chico aparecía, este se enfurecía y se ponía territorial.

Changbin, quien ya había notado la creciente tensión entre ellos dos, le había asegurado que nada pasaba, y que Hyunjin sólo era algo sobreprotector. Pero Jisung no se tragaba ese cuento. Había una delgada línea entre preocuparse por alguien, y que esa persona te guste, y en este caso era obvio que se trataba de lo último.

No es que desconfiara de Minho, pero no podía evitar molestarse cuando los veía juntos, advirtiendo como el rubio buscaba la cercanía de sus cuerpos y provocaba roces "accidentales" entre ellos sin que el otro siquiera lo notara. Lo volvía loco, y la actitud del mayor no ayudaba a que se sintiera mejor.

Después de todo lo que habían pasado en el último tiempo, Jisung creyó que las cosas por fin cambiarían, que todo ese asunto de "esconderse" terminaría de una vez. Pero no.

Minho seguía mostrándose igual de frío y distante como en un principio siempre que estaban junto a otras personas. Incluso con Félix y Changbin, quienes ya sabían todo, seguía reacio a dejarse ver como una pareja, o bueno... lo que sea que ellos fueran.

Que se comportara de esa forma lo hacía sentir inseguro. No podía ni rozar su mano en público sin que este se enfadara, y esas actitudes no dejaban de recordarle como tan fácilmente había terminado con todo una vez.

Lo odiaba y le dolía, pero una y otra vez se decía a si mismo que debía ser paciente y no presionarlo. Sabía que para Minho no era fácil mostrarse, y que debía esperar a que se sintiera cómodo.

—Sólo quisiera que no tuvieran que irse —comentó Félix con tristeza, haciendo que volviera a prestar atención a la conversación.

Changbin tomó la mano de su novio y dejó un beso en ella, tratando de animarlo. El castaño empezaría la universidad el año siguiente y eso implicaba que tendría que mudarse a otra ciudad.

—Sólo serán unas horas de distancia Lix, vendré seguido —aseguró el alfa rodeándolo con su brazo.

Pero eso no parecía convencer al pecoso cuyos ojos ahora se encontraban vidriosos.

—Y también podrás ir a visitarnos Lix —agregó Hyunjin, y Jisung no pudo evitar poner sus ojos en blanco e imitarlo en su cabeza con tono infantil —siempre serás bienvenido en nuestro apartamento, ¿no es cierto Min?

¡¿QUÉ?! ¡¿QUÉ ACABA DE DECIR?!

Jisung buscó desesperado la mirada de Minho, esperando encontrar una explicación, pero éste sólo sonrió a medias, sin decir nada.

—¡Será tan divertido! —prosiguió el alfa ignorando las señas que Changbin le hacía para que cambiara de tema— ¡Min piensa en todo lo que haremos!

ROLLER COASTER - HANKNOWDonde viven las historias. Descúbrelo ahora