· E p í l o g o ·

60.8K 5.6K 4.3K
                                    

Aviso: mañana subo la portada aquí y abro ficha de la tercera parte: "UPD".

¡Disfrutad!


¿Estaba cometiendo un error?

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

¿Estaba cometiendo un error?

No sé.

Quizás.

Vale, sí.

Definitivamente sí.

Entonces, ¿por qué seguía adelante?

Porque eres una chica de ideas fijas, Olivia. Y debes aprender a dejarte llevar.

Casi podía escuchar la voz de mi mejor amiga Isi, de mi tía, de Chiara... ¡e incluso de la Nonna!, decirme esas palabras.

Cuando le conté a Isabella la propuesta de Jax de irnos juntos a recorrer parte del sur de Europa en su autocaravana (porque sí, fue la primera persona con quien hablé), le pareció lo mejor del mundo.

Cuando le conté que había dicho que no, me alegré de estar a unos cuantos kilómetros de distancia o hubiese cumplido su amenaza de meterme la cara en el retrete hasta que recapacitase y accediese a irme con él.

Mi tía fue un poco más amable. Solamente me recordó que la universidad siempre seguiría allí, que aquello era una gran oportunidad y que "si ni siquiera sabes qué estudiar, ¿por qué desaprovecharla?".

Chiara me llamó "stupido sciocco americano". Sigo sin saber mucho italiano, pero estoy bastante segura de que eso era un insulto.

Angelo simplemente suspiró y negó con la cabeza.

Incluso Tony, mientras metía nuestras maletas en el coche de alquiler para irnos juntos al aeropuerto, me había preguntado varias veces si estaba segura de mi decisión.

Entonces, si todo el mundo parecía pensar que debía quedarme, ¿por qué yo no?

Primero, porque la decisión tenía que nacer de mí, no de los demás.

Y segundo... porque estaba cagada de miedo.

Una parte de mí se había hecho ya a la idea de que tras estas pequeñas vacaciones en Italia, que se habían alargado más de lo ya planeado, todo lo que tenía con Jax terminaría. Quedaríamos como buenos amigos que probablemente se viesen en las cenas de Navidad y ocasiones especiales, y solo porque mi tía y su padre mantenían una relación.

Me quitaría la tirita de cuajo, aunque raspase.

Pero si accedía a irme con él, varios días solos en una caravana y compartiendo experiencias... Entonces no solo me rasparía, sino que me arrancaría la piel de cuajo.

Y dolería.

Dolería mucho más de lo que ya lo iba a hacer.

—¿Está todo?

Una Perfecta Oportunidad © 30/03/2023 EN LIBRERÍASWhere stories live. Discover now