Vinimos diez a la Tierra.
Tenemos el mismo aspecto que ustedes. Hablamos igual que ustedes. Vivimos entre ustedes.
Pero no somos como ustedes.
Podemos hacer cosas que solo puedes imaginar. Tenemos poderes con los que solo pueden soñar. Somos más fue...
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El día pasa sin ningún problema. Stiles y yo estamos en su cuarto esperando que anochezca para ir al partido en la escuela. Estoy acostada en la cama de Stiles con los pies del lado de la cabecera y boca-abajo, leyendo una novela de Nicholas Sparks, El Viaje Más Largo. Beagle yacec acostado sobre las baldosas de madera del suelo, y Stiles está sentado en su escritorio, del otro lado de la habitación, concentrado en su tarea de química. La habitación de Stiles, es un poco más pequeña que la mía. Sus paredes son de color azul turquesa, hay varios posters de bandas de música, su equipo favorito de beisbol (Los Mets), series de películas, y hay cuadros colgados de fotos con sus amigos, su familia y algunos conmigo. Hay una encimera junto a la cama y está pegada a la pared; del otro lado, donde está Stiles está el escritorio junto las impresoras, una pizarra con casos abiertos de los sucesos sobrenaturales en Beacon Hills y canastas con revistas, además de una pequeña con estambres de color (rojo, azul, amarillo y verde). Al centro, hay una pizarra transparente que usa para los casos abiertos, pegadas están fotos recientes y temas relacionados con El Benefactor, y una mujer llamada La Loba Del Desierto. Adjunto hay un caso aún más reciente, marcado en estambre rojo, donde aparece Cuatro y los mogadorianos. Stiles se toma enserio su papel en intentar ayudarme a encontrar a los otros seis y con mayor empeño a Cuatro, mi hermano y el siguiente en ser buscado por los mogadorianos. La puerta está frente a nosotros y está abierta, levanto la vista cuando escucho que tocan. Parado junto el marco de la puerta está un hombre de piel clara, ojos verdes y cabello castaño con algunas partes blancas. Es el padre de Stiles, Noah Stilinski.
- Hola, señor Stilinski -le saludo sonriendo
- Hola, señorita White -responde sonriendo. Al nombrarme por mi apellido, le miro confundida- Te he dicho muchas veces que me llames Noah. Si no me llamas por Stilinski, yo te llamaré White
Vuelvo a sonreír y está vez digo:
- Está bien, Noah
El hombre sonríe.
- Ahora -dice Noah- Dejen lo que estén haciendo, los llevaré a cenar. Lo que quieran
Stiles levanta la mirada hacia su padre algo apenado, preocupado y frunciendo el ceño.
- Papá. No creo que alguien con tus deudas deba invitar a nadie -dice Stiles
- Bueno... Ya no tenemos deudas de las cuales tengamos que preocuparnos -dice Noah entregándole un sobre a Stiles
- ¿Qué es eso? -pregunta Stiles tomando el sobre confundido
- Una carta de disculpa de la casa Eichen -responde Noah- Al parecer han decidido condonar nuestra deuda debido a... que Lydia, Alysa y tú -nos señala algo nervioso- intentaron matarlos ahí
