{CHAPTER TEN} The Loric Chest

64 9 0
                                    


||EL COFRE LÓRICO||

||EL COFRE LÓRICO||

Deze afbeelding leeft onze inhoudsrichtlijnen niet na. Verwijder de afbeelding of upload een andere om verder te gaan met publiceren.


CUATRO

Alysa vuelve a casa por la tarde. Se pone unos shorts y una camiseta de manga corta y se une a nosotros. Entrenamos un rato, repitiendo sin prisa la misma maniobra de bloqueo y patada una y otra vez hasta que nos sale de forma automática. Pero, mientras que yo no me empleo a fondo contra Sam, Seis y Alysa ponen toda la carne en el asador, y con cada golpe me empujan hacia atrás tan fuerte que me deja sin aire. A veces eso me irrita, pero de todas formas noto que estoy mejorando. Seis ya no puede desviar mi telequinesia con un ligero movimiento de la mano, ahora tiene que emplear todo el cuerpo. Desgraciadamente con mi hermana es un caso completamente diferente, nos llevamos por igual al usar nuestros poderes. Una desventaja de ser gemelos es que calculamos y prevemos todos nuestros movimientos. Sam se toma un descanso y nos observa desde un lado con Bernie Kosar y Beagle. Alysa ha subido a su cuarto para prepararse, me ha mentido y me duele, dice que irá con los chicos a una pijamada, pero no soy ciego ante lo que pasa en Beacon Hills. Se ha llevado la computadora de Marcus, lo que significa que está planeando algo con sus amigos. Se que he sido sobreprotector con ella, pero me duele que me mienta. Somos gemelos al fin y al cabo. Si hago todo esto, es solo porque me preocupa su seguridad. Me preocupa que haga algo que nos delate ante los mogadorianos. Peor aún, que la atrapen. Se que es más lista que yo, pero no sé, no puedo evitar dejar de preocuparme.

- Puedes hacer mucho más que eso, Johnny. Enséñame de una vez de qué eres capaz -me reta Seis después de derribarme al suelo como respuesta a la torpe patada circular que le he lanzado

Yo me lanzo hacia ella, eliminando la distancia que nos separa en una décima de segundo. Le dirijo un gancho de izquierda pero ella lo bloquea y, agarrándome del bíceps, se sirve de mi impulso para hacerme volar sobre su cabeza. Me preparo para una caída dolorosa, pero ella no me suelta el brazo, sino que me hace girar sobre su hombro para que mis pies se posen en el suelo. Acto seguido, envuelve mis brazos con los suyos, de forma que se queda con el pecho apretado contra mi espalda. Pegando su cara a la mía, me besa la mejilla en broma. Antes de que yo pueda reaccionar, me golpea la parte de atrás de la rodilla con el pie y caigo de culo en el césped. Seis me aparta los brazos del suelo de un golpe y me deja tirado de espaldas. Me inmoviliza sin dificultad, y la tengo tan cerca que podría contarle los pelos de las cejas. Un hormigueo me invade el estómago.

- Ya está bien -interviene finalmente Sam- Le has hecho morder el polvo. Ahora déjale que se levante

La sonrisa de Seis se ensancha, y la mía también. Nos quedamos en esa posición un segundo más hasta que ella se echa atrás y me ayuda a levantarme tirándome de las axilas.

- Ahora me toca a mí con Seis -dice Sam

Inspiro profundamente y agito los brazos para desentumecerlos.

SOY EL NÚMERO DIEZ °Legados de Lorien x Teen Wolf°Waar verhalen tot leven komen. Ontdek het nu