Parte 3

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Ésa tarde, al regresar a su casa, Cliff se "encerró" en su habitación y comenzó a improvisar con el bajo y su pedal. Sus padres no se encontraban en casa y le significaba un alivio, ellos pese a alentarlo con su música, no soportaban el ruido por mucho tiempo. En cambio, su hermana Connie no tenía problemas con eso.

Mientras tocaba las cuerdas y movía su mano por los trastes del instrumento, no podía evitar pensar en lo que pasó en el auto, fue mínimo, seguro que duró apenas unos minutos, pero para él y seguro que para ella también, duró una eternidad... y fue fantástico. Creía que ya tenía el riff perfecto hasta que...

-¡Cliff! -Era su hermana que golpeaba la puerta y gritaba para hacerse escuchar sobre el sonido -¡Cliff! ¿Se puede pasar?

-¡¿Qué?! -Le pregunta entreabriendo la puerta.

-Donnie te busca.

-¡¿Donnie?! ¿Qué quiere?

-Es sobre la gira.

-No es una gira, Connie, es una presentación.

-Lo que sea.

El viaje se había adelantado, siempre le había llamado la atención eso de poder anticiparse a las cosas, creía que era algo de herencia pero sus padres no tenían ese "don", especulaba que sus hermanos sí. Lo cierto era que su ida hacia L.A sería próxima..., demasiado próxima, y algo le decía que ése viaje marcaría un antes y un después en su vida.

-¿Por qué se adelantó? -Le preguntaba Hazel al teléfono desde su casa.

-Cosas de Donnie -Le responde al otro lado del tubo -. Podríamos salir mañana... si no te molesta.

-¿Molestarme? ¿Por qué me molestaría? -Ríe - Sólo prométeme que estarás aquí cuando esté la nueva de Rocky.

-Seguro, prometí ir al cine sólo contigo.

-Mhm... -Afirma ella y se quedan en un silencio incómodo.

-Te prometo que nada cambiará -Le dice metiéndose en sus pensamientos.

-Sí, tu cumples tus promesas, de eso no hay dudas, pero no es sólo el regreso lo que me preocupa.

-¿No?

-No..., es que... -Suspira intentando encontrar las palabras exactas -, la paso bien contigo y extrañaré eso.

-Tendrás a Mike... y a tus amigas -Le dice sin la menor intención de mencionar a su amigo Travis, no sabía por qué ése sujeto le provocaba celos, sólo se habían visto una vez.

-Te prometo que cuando vuelvas sabré tocar la batería, no se si tan bien como Mike pero haré le intento.

-Muy bien, luego podrás ir por el bajo.

-Es una posibilidad.

Se quedaron hablando de muchas cosas, como si fuera la última vez que conversaran aunque, en realidad, sólo les quedaban un par de días antes de que él se fuera. Tuvieron que cortar ya que los padres de Hazel se lo pidieron, los de Cliff no habrían querido interrumpir su momento.

Ésa misma noche, los dos, de manera sincronizada pero obvio sin saberlo, pensaron en lo que había ocurrido en el auto y no pudieron evitar excitarse por ello, para Cliff ya resultaba habitual hacerlo, solía tocarse mirando chicas playboy o modelos, pero comenzó a pensar en Hazel hacía ya un año. A diferencia de él, ella jamás lo había hecho, jamás sintió ese interés por autodescubrirse ni pensaba en chicos como sus amigas solían hacerlo... pero ésa vez con Cliff en el auto, había jurado haber sentido algo en su parte inferior pero se negaba a pensar en eso ¡Era su amigo! Sin embargo, ésa noche fue inevitable desear que eso ocurra otra vez, aún no se sentía capaz de usar los dedos, le parecía arriesgado. Tomó una almohada y la colocó junto a ella simulando que era el cuerpo de Cliff, casi queriendo replicar lo que había pasado. Al principio sólo la abrazó pero luego comenzó a frotarse y eso no hizo más que excitarla más y aumentar el ritmo.

For Whom The Bell Tolls - (Cliff x OC)Where stories live. Discover now