For Whom The Bell Tolls - (Cliff x OC)

Parte 25

Ésa misma noche, se preparaba para salir junto con Hilary, Mike se ofreció a pasarlas a buscar para ir al club, Rebecca ya estaría ahí para cuando llegaran.

-¿No estás entusiasmada? –Le preguntaba Hill, que iba con un vestido escocés, un cinturón con tachas, medias enterizas negras y unas botas.

-No es por soberbia, pero no es el primer club al que voy –Responde Hazel, que prefería ir más sencilla, en jean, zapatillas y una remera de Kiss.

-Disculpa, señorita Metallica... ¿Mike te habló?

-Vendrá dentro de quince minutos, no seas tan ansiosa.

-Lo siento... ¿Es verdad eso que dicen? –Le pregunta mientras se pinta los labios.

-¿Qué? ¿Lo de Kirk Hammett en el grupo?

-¿Quién es Kirk Hammett? ¡Claro que no! Te estoy hablando de lo que ocurre tras camerinos –Le guiña el ojo.

-¿El alcohol?

-Lo... otro..., las groupies –Le susurra como si fuera una mala palabra.

-¡Oh, eso! Pues... todavía hay por ahí, pero los chicos no andan en esas..., espero.

-Lo preguntaba por Mike, quizás que tenga un poco de experiencia me vendría bien, es que me gusta la idea de ser yo la que logre alejarlo de esas víboras ¿A ti no te pasó eso con Cliff?

-...No, porque Cliff nunca... -Se detuvo en la mitad de la frase, recordó que él sí había tenido algo con una groupie de LA, o al menos con una chica anónima.

-¡Vaya, ese chico vale oro!

-No, no, digo..., sí lo vale, pero es que él..., estuvo con una de ellas antes de que seamos pareja.

-Aham... -Comentó Hilary sin saber bien qué decirle -, pero... el sexo es bueno ¿Verdad? Quizás sólo lo hizo para... ya sabes, experimentar, y luego ir contigo.

-Preferiría que nos concentremos en el concierto y no en esas cosas.

-Qué aburrida.

-Podrás sacarte todas tus dudas con Mike, quizás él esté más abierto para hablar de estos temas.

-Me da un poco de vergüenza –Le confiesa -, no quiero espantarlo, pensará que estoy obsesionada con él o algo así.

-Créeme, si estás obsesionada él no lo notará -Hill le arroja un cojín, y las dos empiezan a reír.

Metallica ya estaba en Los Ángeles, Kirk era un miembro oficial de la banda y ya estaba a la venta el primer disco como bien habían anunciado. Para su sorpresa, las entradas se agotaron y nadie parecía tan molesto por la salida de Dave.

-Yo no festejaría tanto –Confesaba Kirk, mientras los cuatro esperaban que el mozo llegara con sus bebidas -. Algunos de los que vienen son fanáticos de Exodus, también, pero el resto debe estar dolido.

-Me importa una mierda –Espeta Lars -, la salida de Dave era inminente, si no lo notaste es porque tan fan de Metallica no eres.

-Creo –Opina, Cliff -, que debimos comunicarlo a través de la radio o algún canal de televisión, no era la manera hacerlo tan apresurados.

-Demasiado tarde –Le responde Lars -, ahora sólo hay que lidiar con esto.

-Cliff tiene razón –Dice James -, debimos dar un aviso.

-Ya dejen de pensar en lo que debimos haber hecho –Insiste, Lars -, ya quedó en el pasado, ahora que Kirk está con nosotros debemos pensar en el futuro, como debe ser.