Capítulo 40: Única

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¡Les recomiendo escuchar la canción antes de leer el capítulo!

Nadie estaba de ánimos para las bromas de Alex. Todos le reclamaron. Sus hermanas le regañaron por decir eso y su esposa, tenía una expresión de entre abatida y vergüenza, por lo que haba dicho su compañero.

— ¡Alexander! —le regañó Cleo. —En este momento, no es para que digas esas cosas. Non essere un buffone!* ¡No seas un bufón!

— ¿Acaso eso existe? —me escuché decir en voz alta. Todavía estaba confundida, o más bien, perdida.

—De acuerdo, de acuerdo —intervino mi papá. Todavía su apretaba una de sus mano, pero la otra la colocado sobre mi hombro. —Creo que ha sido demasiado por ahora...

—Es cierto, Mike —comentó Cleo. —Debo llamar a Vanessa y Zeke. Mi papá debes estar preocupado por todo esto

— ¿Y ahora qué? —inquirió Chad

Escuché algunas voces pero mi mente estaba en otra parte. Estaba procesando todo lo que me habían explicado y aún parecía ser un sueño extraño. Me sentía extraña. Y las palabras mezcla de especies, híbrida, Seivia/Licántropo, Vampiro/Lobo, todas esas palabras me aparecían una locura. ¿Acaso era posible? Y si era el caso, ¿por qué no sentía como yo? ¿Un efecto segundario de mi hibridación? Y si era la primera humana, el primer caso que se conocía, ¿significaba que acaso hubo otros más además de mí? ¿Por qué? Me sentía muy confundida y...mareada.

— ¿Lizzie? ¡Liz! —gritó alguien

— ¿Qué tiene, papá? —preguntaron

—No estoy seguro —respondieron

—Llévala adentro—comentaron

***

No puse que paso después, y creo que estaba todavía en shock porque sentía que mis pies se movían, porque antes estaba afuera y ahora estábamos en la sala de estar. Algunos quedaron de pie, y otros (como yo) estábamos sentados. Contemplé el lugar. Alguien había encendido las luces, y detallé las ventanas; y afuera ya era de noche.

El lugar estaba lleno de aroma, además de los dos, que ya había podido reconocer —vampiro y Licántropo—, pero moví la nariz y una ola de diferentes olores llegaron hasta mí. Eucalipto, rosas, aloe vera, mandarina, pomelo, madera hasta el olor del bosque junto al tierra húmeda. Tuve una sensación extraña en el estómago y el ambiente del lugar, estaba cargado de algo. Pero no sabía que era. Me había sentado en el sofá con Michael a mi lado y Cleo estaba en un sillón. Los demás estaban haciendo ruido; demasiado ruido, a mi parecer. Pero me enfoqué en algunas voces.

— ¿Va a estar bien? —inquirió Lucas.

— ¿Qué le pasa? — demandó Chad.

—Creo que debe estar desorientada y algo confundida, por todo esto que acaba de pasar, Luke —replicó Cleo. —Es...normal, creo pero por el momento...—Cleo hizo una pausa. —Todo esto es nuevo para nosotros...—masculló.

—Para ella lo es, hija —repuso mi papá. Su corazón latía con más fuerza de lo normal. Estaba nervioso. —Es demasiado pronto

— ¿Para qué? —preguntó Will. Puse los ojos en él. Y a detalle, vi como algunas gotas de sudor corrían por su rostro. — Está con viva, ¿cierto? ¿No es más que suficiente? Sobrevivió y está con vida y eso es mucho —señaló él y me dio una pequeña sonrisa.

—No es seguro —murmuró Zack. —Ningún ser humano, que nosotros sepamos ha podido sobrevivir y mucho menos despertar —comentó. — Es imposible...—indicó él y exhaló.

Renacimiento © ✓Where stories live. Discover now