Querido Diario

Capítulo 12

Elizabeth

26 de abril del 2021

Querido diario:

¡No sabes lo increíble que es el premio que le dieron a Thomas! Aparte le obsequiaron máquinas más sofisticadas y precisas. Una parece una lapicera y es súper liviana... Se ofreció a enseñarme con esa para hacer micropigmentación, es como una pintura permanente que se hace en labios y cejas, también parece que en estrías. Quiere pagarme un curso para que me especialice en eso y yo estoy súper contenta. Esta semana estuve practicando en naranjas, bananas y donde podía tatuar y me dio un mini diseño para que lo ejercite varias veces, así la semana que viene empiezo a probar en piel. Quiere el tatuaje de una flecha en su dedo medio.

Si algo anda mal o bien entre nosotros, no lo sé. Él hace su vida, yo la mía. No hablamos de más nada que no sea de algunos exámenes o trabajos pendientes y de lo que nos depara el día a día laboral.

Ya está empezando a hacer más calorcito, así que, saqué mi manta del sofá, la lavé y guardé. También bajé, de la parte alta del ropero, la ropa que tenía archivada de verano. Hoy me tocó hacer las compras y pagar una factura de luz. Cuando consulté el saldo de mi cuenta bancaria me sorprendió ver la cantidad de dinero ahorrado que tengo, pero no pienso tocarlo para mucho. Para eso trabajo y no estoy ganando mal. Todo el negocio se está incrementando.

Con Christian pudimos concretar el fin de semana. Fue rápido, no tardó tanto como Thomas. Ni se tomó tanto tiempo. Así que me dolió un poco, pero sé que se va a pasar con el tiempo. Me llenó de besos y se aseguró de lubricarme bien. Me di cuenta de que la sensación con preservativo no es la misma que la anterior, la que tuve por primera vez, piel a piel, no tiene nada que ver con esta. Me sentí incómoda, al principio, pero Chris fue dulce, no llegué al orgasmo y me explicó que todavía era muy nueva, que iba a sentir la sensación en algún momento cuando logre disfrutarlo plenamente. No tiene sentido la información que me da, porque tuve tres orgasmos en el viaje.

Ayer vino nuevamente a cenar e inesperadamente se quedó a dormir.

El sexo con él estuvo bien, al menos mejoró desde el otro día. Calculo que fue la emoción del momento. No puedo seguir comparándolo con mi primera vez, porque creo que es una sensación que no voy a volver a sentir, así que tan solo me estoy dejando llevar. Chris esta vez se esforzó bastante y con su lengua ahí abajo llegué al bendito nivel que todos esperamos.

Hubo un segundo round, en la madrugada. Sus movimientos esta vez fueron un poco más bruscos. Llevó una de mis piernas a su hombro y tuve una pequeña punzada de dolor que se calmó cuando se dio cuenta y desaceleró sus embestidas. A pesar de eso, como te dije, estuvo bien.

Cada vez que está conmigo a solas hay algo extraño en sus ojos. Como si esperara más de mí. Su mirada dulce, esa que me da en el colegio o en la calle, desaparece y se vuelve bastante bruto o salvaje, no sé cómo describirlo.

Me preguntó si yo había visto la clásica película donde él la ata a ella. ¿Quién no la vio? Y sí, me gustaría que me hagan algo parecido, en algún momento.

La verdad es que no lo sé todavía, creo que es muy rápido, prefiero practicar un poco más el sexo común o tradicional hasta que me sienta más confiada. Se lo aclaré, pero también le dije que me gustaría tener las manos atadas o los ojos vendados. Algo sencillo. Tampoco nos vayamos al extremo. Eso le sacó una sonrisa. Dormimos abrazados como si fuéramos una pareja de hace años y hoy a la mañana fuimos juntos al establecimiento donde estudiamos.

Obviamente, echaron a la profesora de matemáticas y como si fuera a propósito, pusieron un profesor que está para chuparse los dedos. No sé de dónde mierda los sacan ahora, parecen modelos.

Yo sé que me mira... Y yo lo miro a él.

Mar ya dejó muy claro que le encantaría hacer un trío con el bombón. Estoy en desacuerdo total con ella, me gustaría tener a ese profesor solo para mí. Alice le pregunto su edad, contestó que tenía veinticinco recién cumplidos. Tampoco es tan mayor, pero relación profe/alumn@ no va, no debería de existir. Está prohibido totalmente por la institución y lo comprobamos con el lío que se armó después de que Thomas se tirara a la profe, a pesar de que él es mayor de edad.Como nosotros no vamos con uniforme, opto por volverlo loco con shorts que se ajustan a mis caderas hasta un poco más arriba de mis rodillas (no se pueden llevar cosas demasiado cortas) y hoy, cuando todos salían de la clase, me hizo quedar para, supuestamente, mostrarme un ejercicio que me había salido mal.

Soy buenísima en matemáticas y todos en mi curso lo saben, pero mientras me explicaba, su atención estaba centrada en mis muslos. Ahí fue cuando llevé el lápiz a mi boca y se embobó mirándome a la cara, le pregunté qué pasaba y cuando estaba a punto de decir algo, Thomas entró al aula. Nos saludó y me pidió que lo acompañara. Me levanté muy sexy, usé la artimaña de llevarme una mano a mi bolsillo trasero y sentí los ojos del profesor clavados en mi culo. Inmediatamente, me puse un diez en mi cabeza, pero Thomas empezó a decir que ese tipo solo quería tener sexo conmigo, que lo iba a hacer echar y no sé cuantas cosas más.

Armamos una mini discusión en los pasillos de la preparatoria, llamando la atención de varios que caminaban en el mismo horario donde todos los cursos cambiábamos de aula. Le dejé en claro que ya estoy mayorcita para hacer lo que quiera y con quién quiera, que no se olvide que él también se acostó con una profesora.

Yo creo que se comió el papel del hermano mayor o guardaespaldas personal, pero no me importa. Cuanto más se pone así de terco, más quiero refregarle que no puede controlarme. Si el problema de él es nuestro profesor, entonces ya sé qué hacer. Estoy cansada de que quiera manejarme o manipularme con qué tipo de hombre puedo estar y con quién no, como si él fuera un ejemplo. Ya le gané la partida con Chris. Soy consciente de que con este tengo que arriesgarme un poco más, pero ya empecé el juego y soy de esas que hasta que no gano, no paro.

Fuimos con las chicas a un nuevo bar, que se abrió acá cerca. Tiene karaoke. Hace tanto que no canto, tengo miedo de que mi voz se haya desafinado. Mamá decía que canto como los ángeles, las chicas y Thomas siempre se complotaban para hacerme cantar en los cumpleaños o cuando nos juntábamos, pero ya no siento lo que antes, con la música...

Me siento más bien tipo robot. Haciendo lo que tengo que hacer todos los días. Ya nada es lo mismo. Los días cada vez están más vacíos. Me aburro rápido de todo...

Bueno, no sé que más contarte.

Me voy a cenar... E.

PD.: La foto es de la previa con las chicas. Creo que necesitamos más momentos como estos.

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Momento Importante:

#TeamThomas o #TeamElizabeth

Por mi parte, creo que los dos puntos de vista son importantes. Él puede narrar los sucesos, pero Elizabeth cuenta a su diario cosas que solo ella siente. 

Mmm... Ese profesor. xD