Capítulo 29

1.2K 245 38
                                    

Thomas

... — Creo que es hora de que empecemos con él. — ...

En menos de dos minutos tenía a Mistic arrodillada, tomándome la verga con su boca, llevándola hasta el fondo de su garganta, como toda una experta. Mis manos que no tenían vía libre estaban tirando de las cuerdas con el impulso que surgía de mi interior, querer agarrarle la cabeza para hacer movimientos más bruscos. Pero, ella tenía otros planes, rodeaba la punta con su lengua, haciéndole una larga caricia, mientras intercalaba con sus manos experimentadas. Sentía la presencia de Elizabeth desde atrás y cuando sus manos tocaron parte de mi espalda, me perdí. Sentí sus uñas recorrer mi camiseta queriendo llegar a mi piel, lamentablemente, tenía prohibido sacarme la prenda para que no descubra mis tatuajes. Su mano llegó a mi trasero y me tensioné absolutamente todo.

— ¿Tiene permitido el sumiso usar esta parte de su cuerpo?

Quise gritar que no, pero no podía emitir palabra, ya que me descubriría fácilmente. Mire a Mistic, que no me prestó atención. Sabía que odiaba que jueguen con esa parte de mi anatomía y, sin embargo, asintió. En un rápido movimiento la boca de Lilith estaba en mis nalgas, mordiéndome, azotándome con la mano abierta si hacía cualquier movimiento, aunque sea leve. De la nada, su mano pasaba entre mi ano y mis bolas, estimulando toda esa zona que prácticamente estaba prohibida en mi sistema. Su lengua hizo estragos en mi ser. Las cuerdas me maltrataban las muñecas y los tobillos por la tensión que emanaba, no me dolían, pero estaba seguro de que iban a dejar marcas.

La tortura paró de un momento a otro. Suspiré aliviado, mientras que chorreaba líquido pre seminal, con las bolas completamente llenas. Me desataron lentamente, torturándome un poco más entre roces. El alcance que tenía esta mujer en mí, no tenía punto de comparación.

— Arrodíllate. — Impuso Lilith y seguí su orden sin ninguna duda. — Quiero que él me coma. — Le pidió a Mistic.

— Está bien, pero todo el tiempo debes mirarme a mí, únicamente a mí. No puedes observarlo a él. — Eli, asintió satisfecha con el rumbo que íbamos tomando.

Amarró mi cuerpo con un excelente bondage para que no la toque. Las cuerdas pasaban por mi espalda, dejándome atrás las manos, daban vuelta por mi trasero hacia adelante, creando una increíble enredada en mi pene, subían por mi pecho, separándose en mis hombros, para luego dar la vuelta, terminando nuevamente en mis brazos.

Se acomodó, dejándome frente a su jugosa vagina. Desesperado por esto, me acerqué a ella y Mistic tomó la iniciativa comenzando a besarla, para que mantuviera su cara en lo alto. Con una de sus manos libres, subió mi careta para dejarla sobre mi pelo y así tener el camino libre para ponerle atención a lo que Lilith había demandado; mientras que con la otra, le rodeaba la cintura, apretándola contra nosotros.

Tomé con vehemencia todo lo que ella me ofrecía, estaba limitado y precisaba más, así que por reflejo, tiré de las cuerdas, ejerciendo una increíble fricción en mi pene, que me sacó un gemido del fondo de mi garganta, sin poder contenerlo.

Me arriesgué a morderle uno de sus labios vaginales, despacio, para que entienda lo que yo quería, y como si estuviéramos hechos el uno para el otro, ella apoyó automáticamente su pie en mi hombro, dándome una increíble vista. Haciendo que tenga más acceso a toda la dulzura que esconde entre las piernas.

Chupé, succioné, mordí ¿Qué es lo que no le estaba haciendo?, pero, todos estos movimientos creaban en mí algunos involuntarios, haciendo que en la desesperación por darle todo, haga que cada vez tire más de las cuerdas, creando ese pequeño roce en mi aparato reproductor. Cuando ella llega al orgasmo, fue inevitable. Derramé el mío dejándolo desparramado entre mi camiseta, mis piernas y el piso. Rápidamente, Mistic acomodó mi careta nuevamente. Suspiré aliviado, mirando detenidamente el desastre que había dejado esparcido, menos mal que no se olvidaba todo lo que había detrás de este juego.

Querido DiarioWhere stories live. Discover now