Capítulo 78

4.9K 597 635
                                    


En el capítulo anterior, Bakugou Katsuki quiere tener una cita ideal con Izuku Midoriya, es por eso que incentiva a un panal de abejas e impulsa a Izuku a lanzarse al lago. Finalmente, se apodera de un bote con una pareja acaramelada y un guía que al parecer lo único que quiere es renunciar de su molesto trabajo. 

Por otro lado, Todoroki Shoto quiere hacer hasta lo imposible para fastidiar a su padre, es por eso que se une al movimiento de sus compañeros Kaminari Denki y Kirishima Eijirou, con el propósito de expulsar a Miyamoto-sensei. Todoroki Shoto insiste en usar su botellita de cloroformo para incentivar a Miyamoto con su renuncia, pero Kirishima y Kaminari intentan persuadirlo. Se dirigen a la oficina del director a exponer su queja y entonces, Inasa quien sale de la oficina se les une. 

────┈┈┈┄┄╌╌╌╌┄┄┈┈┈────

Pero Inasa niega de inmediato. —Pierden el tiempo. —suelta. —Acabo de ir a por lo mismo, pero el director no tiene personal de matemáticas. Entre dejarnos con él o sin profesor, él prefiere que nos quedemos con él mientras encuentre a alguien con mayor capacidad.

—Si tan solo Yakuza-sensei no nos hubiera abandonado. —susurra Denki apoyando su rostro en sus manos en un suspiro decepcionante.

— ¿Yakuza-sensei? —inquiere Inasa confundido.

—Ellos hablan de Bakugou-sensei. —responde Todoroki.

— ¡Oh, sensei era realmente asombroso, y muy paciente para explicar! —exclama Inasa recordándolo, acomodándose en el asiento con su palma sobre una de sus rodillas en una postura totalmente abierta y confiada. —Él siempre se esforzaba por darnos una clase de calidad aún si su temperamento no le ayudaba. Aún no entiendo porqué se fue.

—Nosotros tampoco, fue de un día para otro. —responde Denki decepcionado aún en su misma postura, hasta que una idea fugaz le llega como si acabara de hacer conexión eléctrica mental. — ¡Pero si Bakugou-sensei regresara, entonces Miyamoto no tendría otra opción más que retirarse! ¡Oye Kirishima, ¿por qué no le dices a senp- digo, a tu hermano que se contacte con él y le convenza para regresar?! ¿No que muy amigos ellos dos? —inquiere clavando sus ambarinos sobre el pelirrojo.

— ¿Mi hermano?

— ¿Entonces no molestaremos a Miyamoto-sensei? —inquiere Todoroki ahora desanimado, sus planes lentamente se estaban yendo por el traste.

────┈┈┈┄┄╌╌╌╌┄┄┈┈┈────

Ya no más Miyamoto-sensei


Ahh, el amor. El dulce amor romántico digno de las más grandes sonrisas y sensaciones llenadoras del alma.

El dulce amor tan único y a veces también fugaz. El dulce amor mezclado con las iluminaciones finales del atardecer cuyos colores tornan de anaranjado a violetas es la mejor de las combinaciones. Es cuando las miradas se unen rememorando aquella chispa fugaz del cual en un inicio provocó que dos corazones palpitaran en sincronía para finalmente unirse.

El amor es tan… — ¡Y aquí es donde golpeé a un sujeto por querer robarme los calcetines! —Indica Bakugou a Izuku y la pareja acaramelada, —aunque ahora un tanto asustada— y el sujeto dueño del bote que, en estos momentos roncaba tan fuerte que provocaba que Bakugou tuviera que gritar aún más fuerte de lo que solía ya gritar. El rubio cenizo transforma su mano en un puño y endurece su mirada fúrica sobre todos los espectadores, causando un silencio lleno de tensión y dureza por unos segundos. —Nadie podrá tener uno solo de mis calcetines. —declara.

Izuku, quien hace unos minutos atrás se había encontrado embobado observando el cómo aquellas escarlatas parecían lentamente oscurecerse conforme el atardecer avanzaba hasta el clímax, ahora mismo ya no puede comprender lo aleatorio que es aquel rubio cenizo para hacer planes amorosos. 

¡Ah! Katsuki-sensei ¦Katsudeku¦ Where stories live. Discover now