Capítulo 30

21K 2.8K 4.8K
                                    

Cita educativa lll

Agua, gritos y confesiones.

— ¡Sensei, sensei! —exclamaba Izuku, saltando emocionado en su lugar, mirando hacia atrás en busca de su profesor que se encontraba unos pasos atrás con sus manos en los bolsillos

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.


— ¡Sensei, sensei! —exclamaba Izuku, saltando emocionado en su lugar, mirando hacia atrás en busca de su profesor que se encontraba unos pasos atrás con sus manos en los bolsillos.

Sus escarlatas parecieron sonreírle levemente con un brillo cálido, entonces avanzó lentamente hacia él. — ¿Qué sucede, chihuahua? —preguntó ya a su lado.

— ¡Yo lo acabo de ver, lo juro! —exclamó emocionado con sus jades contentas.

Katsuki alzó una ceja, confundido. — ¿Qué acabas de ver? —preguntó observando el acuario con curiosidad.

— ¡Un pez espada, era enoooorme! —exclamó. — ¡Se fue muy rápido, pero estoy seguro que en cualquier momento volverá a aparecer, observe! —continuo, pegando todo su rostro contra el acuario.

—Si pegas tanto tu cara ahí no podrás ver bien, idiota. —respondió Bakugou, tomándolo de la camisa para despegarlo tal y como si fuese un caracol.

—Ah, cierto. —respondió avergonzado. —No pensé en—Sus jades se abrieron de par en par. — ¡AHÍ, AHÍ ESTÁ! —exclamó señalando hacia su izquierda.

Bakugou rápidamente dirigió su mirada hacia donde señalaba Izuku.

—Demonios, sí que es grande el bastardo. —respondió impresionado.

El pez espada nadaba de manera triunfal a lo largo de todo el acuario, además de nadar de una manera exageradamente veloz.

— ¡LE DIJE QUE ES IMPRESIONANTE! —exclamó Izuku, pegándose una vez más al acuario. — ¡Ahhh! —soltó emocionado. —Es muy hermoso...

Katsuki le sonrió, entonces le revolvió los cabellos verdosos. — ¿En serio nunca habías venido a un acuario? —preguntó, acercándose a él.

—Sí. —respondió Izuku. —Desde que se fue papá, a mi mamá se le ha hecho más difícil todo con respecto a los gastos de casa. Por lo tanto, nunca salimos a lugares así. —continuó, observando el acuario con un semblante serio. —Es por eso que yo necesito dar lo mejor de mi, tener las mejores calificaciones y estudiar en la universidad con todas las becas necesarias, entonces así mi mamá no tendrá que trabajar tanto... —murmuró. Entonces enfrentó las escarlatas que le miraban con seriedad. — ¡Entonces cuando egrese, podré ayudar a mi mamá y ella al fin podrá descansar! —exclamó sonriente.

Bakugou le sonrió.

Es tan propio de ti.

Soltó un suspiró. —No tengo dudas de ello, Izuku. —Le sonrió. —No suelo decirle esto a mis alumnos pero... Eres estúpidamente buena gente, eso me gusta. —respondió. —Llegarás muy lejos.

¡Ah! Katsuki-sensei ¦Katsudeku¦ Where stories live. Discover now