Capítulo 44; Leyla Beckett.

1.1K 114 8
                                    

— No pensé que nos volveríamos a ver tan pronto.

La chica dió media vuelta y al fin se alejó de Draco para luego mirarme fijamente con una ceja alzada.

— Tal vez es el destino.

— Pues el destino quiere que te muela a golpes si vuelves a acosar a mi novio.

— ¿Acosar a tu novio? –ríe– más bien dile a tu "novio" que no se acerque a mí, porque si lo vuelve hacer esta vez no me contendré.

La chica pasa por mi lado pero antes le interrumpo el paso para quedar frente a ella.

— Óyeme bien. No te metas conmigo, si vuelvo a encontrarte metiendo tus narices donde no te llaman desearás nunca haberte cruzado conmigo.

La chica me mira a los ojos sin decir nada, para luego pasar por mi lado y chocar mi hombro.

¿Es que tiene que pasar justo ahora?

— ¡Aileen!

Siento como unos brazos me envuelven y unas manos se aferran a mi espalda. Olor a gardenia. Le devuelvo el abrazo y sonrío para luego separarme y darle una bofetada.

— ¡¿Y eso por qué fue?!

— Te dije que te daría una bofetada cuando te viera. Y además, te lo merecías por lo de recién.

— ¡Pero si no hice nada!

— Ese es el punto, no hiciste nada para apartarla –digo tranquila sentándome en un asiento frente a él.

— Se acercó coqueteando conmigo y justo llegaste, no es que estuviéramos así hace mucho, fueron segundos antes que llegaras, Leen.

— Pues asegúrate de alejarla, esa chica no me cae bien. La conocí en Jamaica y me quizo atacar con su varita.

— ¿Y sigue viva después de eso?

— No por mucho, si se vuelve acercar a tí.

Draco suelta una pequeña risa y se levanta para tomar asiento a mi lado y abrazarme por los hombros. No tomé atención de su vestimenta, un conjunto bastante elegante de color negro que resalta su platinado cabello y su rostro, que por cierto, está mucho más varonil. Ha cambiado bastante desde que lo conocí.

— No estés celosa, tú eres la única chica en la que pienso y en la que pensaré –susurra– no te llega ni a los talones, bonita.

Sonreí. Draco si sabe como hacerme sentir especial, sin más tomo su rostro con mis manos para darle un beso. Cómo extrañaba sus exquisitos labios.

— No tienes idea de lo que te he extrañado –susurra sobre mis labios.

— Demuéstramelo.

Draco rápidamente me besa de una manera un poco más desesperada, tomando mi nuca con su mano izquierda.

— Aléjate de nuestra pequeña Aileen.

— Pervertido.

Dylan y Logan le dan un zape a la cabeza bien peinada de Draco para luego abalanzarse sobre mí y llorar por lo mucho que me extrañaron. Extrañé a estos idiotas.

— ¡Extrañé tus retos! –dice Logan.

— ¡Yo tus golpes! –dice Dylan.

— Y yo extrañé sus tetas pero no se lo digo

— ¡Draco! –chillo.

— ¿Cómo has estado? ¿Qué tal Jamaica? Papá dice que las próximas vacaciones iremos allá, pero Dylan no quiero que me acompañes esta vez.

¡Estoy en Harry Potter! {Draco Malfoy} | El cáliz de fuego.Where stories live. Discover now