Capitulo 35; ¿Mortífagos?

4.8K 464 32
                                    

—Ama Aileen, el desayuno está en la mesa junto con sus padres.

Abro los ojos al escuchar la voz de Dagor, me estiro en mi cama y froto mis ojos con la palma de mis manos. Vaya que descansé.

—Gracias Dagor, bajo en un momento –digo al sentarme en mi cama y ofreciéndole una leve sonrisa aún con mis ojos casi cerrados.

Dagor sólo chasquea los dedos y desaparece de mi habitación, doy un suspiro y me doy ánimos para levantarme. Me dirijo hacia el baño y veo mi rostro. ¡Pero que rostro! Me lavé mi cara y peiné mi cabello con los dedos. Se me vino un recuerdo de mi hermana, Kassandra. Que mala hermana que soy,  dios. En este momento ella estaría en mi habitación hablándome sobre sus cantantes y de sus libros favoritos. Una leve sonrisa se asomó en mi cara al recordarla. Volví a pasar mis dedos por mi cabello que, ahí estoy pasable. Baje las largas escaleras que daban hacia nuestro living y tomé dirección a la mesa donde estaban mis padres, tratando de alejar cualquier pensamiento de mi hermana menor.

—Buenos días –saludo con una leve sonrisa mientras tomo asiento– uy, bollos de canela.

Tomo un bollo para llevármelo a la boca, dios que exquisitez.

—Tenemos que hablar, Leen –dice mi padre mirándome con su mirada seria, al igual que mi madre.

—Si tendremos otra de charla, déjenme decirles que aún no pasa nada con Draco, por milésima vez –me adelanto.

—No, cariño. No es eso...

—Aunque me alegra eso –comenta mi papá– es sobre Quién-tú-sabes.

Me atoro con mi bollo, toso mientras trato de beber lo más rápido de mi zumo de naranja.

—¿Qué ha pasado? –pregunto aceleradamente.

—Sabemos lo que ocurrió en la tercera prueba, Aileen. ¿Por qué no nos contaste? ¡Pudiste haber muerto! –grita mi madre.

—Pero no ha ocurrido nada, mamá...

—¡Y SI HUBIERA OCURRIDO ALGO!

—¿Acaso pensaste que no te podríamos proteger? ¡¿PENSASTE EN CÓMO NOS SENTIRÍAMOS SI PERDIÉRAMOS OTRA HIJA?!

Quedé helada. ¿Qué?

—¡No perderemos otra hija a manos de Voldemort! –grita mi madre.

Miro hacia la nada, sólo escucho un pitido muy fuerte en mis oídos.

—¡Responde Aileen!

Miro hacia mi padre quien está parado a mi lado derecho y mi madre a mi otro lado. Estoy atónita. ¿Kass está muerta?

—Lo-lo siento...

—Ah ¿lo sientes? -dice mi padre de forma incrédula- ¡¿SÓLO LO SIENTES?!

—Damen

Mis ojos empiezan a picar, nunca antes me habían hablado de esa forma. Miro hacia mi padre otra vez y noto como su mirada se suaviza. Trato de no pestañear para que mis lágrimas no empiecen a escurrir en mi cara, no quiero ser débil. Escucho a mi padre suspirar y pasarse sus manos sobre su cara.

—Si algo te pasa no me lo perdonaría, Aileen.

—Eres un milagro que estés con nosotros viva, esa noche...

—¿Qué ocurrió esa noche? -pregunto con un hilo de voz.

—Creo que ya es tiempo de decirle la verdad, Acacia -dice mi padre.

Dos sillas se acercan hacia mis padres para que se sienten. Mis padres se miran esperando que alguno de los dos hable, hasta que oigo a mamá.

—Fueron unos días antes que... Voldemort -suspira- haya interrumpido en la casa de los Potter. Nos estaban buscando, todos ellos. Éramos igual o más buscados que Lilly y James, gracias a nuestros buenos contactos nos supimos esconder, pero algo nos delató y hasta el día de hoy no sé que fue.

¡Estoy en Harry Potter! {Draco Malfoy} | El cáliz de fuego.Where stories live. Discover now