Capitulo 10 Hijo del diablo

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Entré al baño y miré mi cabello en el espejo. Parecía un león. Bueno, mi signo del zodíaco es Leo, así que también podría verse bien.

Me arreglé el cabello con un poco de agua del grifo y el endeble peine para el culo que me dio Harin. Decidí simplemente ponerlo en dos trenzas separadas por la mitad, pero inmediatamente cuando paseé el peine por mi cabello para separarlo, escuché un chasquido. Miré el peine que tenía en la mano y el otro peine que sobresalía de mi cabello. Gemí cuando saqué la pieza y salí del baño hacia donde vi por última vez a Harin.

Debido a mi ira, tiré el peine sobre la mesa sin darme cuenta de que los otros dos invitados estaban sentados frente a ella, "Harin, este peine se rompió y mi cabello sigue siendo un desastre y todo es culpa tuya".

Ella se sobresaltó por mi repentina aparición y se apretó el pecho con sorpresa. Me sentí mal por asustarla, pero no me importó en ese momento porque estaba enojado.

Escuché que alguien se aclaró la garganta detrás de mí y me di la vuelta en un instante para dirigirme a esta persona grosera.

"¿Qué?" Rompí.

El tipo parecía genuinamente sorprendido por mi comportamiento, pero no fue su cara de sorpresa lo que me hizo recuperar la sobriedad. A su izquierda estaba la última persona que esperaba ver cuando me levanté de la cama esta mañana. De hecho, esperaba no volver a verlo nunca más después de mi idea no tan brillante la otra noche.

Nuestros ojos se encontraron por lo que pareció ser mucho tiempo. Me tomé el tiempo para admirar sus rasgos. Tenía la nariz más linda con unos labios tan bonitos. Tenía una mandíbula fuerte y la sonrisa gingival más perfecta. Cualquiera podría enamorarse fácilmente de él porque tenía rasgos tan perfectos. Estaba disfrutando de la vista si estaba siendo totalmente honesto. Llevaba una camiseta sin mangas que mostraba sus músculos tonificados.

No se veía tan flaco como la otra noche, pensé, pero luego, siendo el idiota totalmente molesto, sonrió con suficiencia ante mi manera no tan sutil de mirarlo.

Me sentí tan avergonzada porque se suponía que debía odiarlo por no haberlo violado públicamente. Era tan molesto que podría apuñalarlo con el peine roto y llamarlo defensa propia. Mmm no es mala idea.

Harin me dio un golpecito en el brazo como si estuviera leyendo y me giré para mirarla. En sus ojos vi una mirada de 'ni siquiera lo pienses'. Era un poco tarde para eso, aunque no estaba seguro si esa mirada era para 'no te enamores de él' o 'no lo mates'. Decidí ir con este último.

"Atalia" se dirigió el hijo del diablo recuperando mi atención, "nos encontramos de nuevo".

Me giré para verlo sonreír con esa molesta sonrisa suya. Me quedé allí mirando perdido por las palabras todavía en estado de shock por su repentina aparición hasta que me recuperé y me aclaré la garganta.

"Shiwoo y compañía" dije asintiendo.

Le sonreí cortésmente al chico de aspecto dulce mientras arrastraba a Harin conmigo hacia el baño a un paso apresurado. Iba a matarla.

Si mi piel no hubiera sido tan oscura, habría estado tan roja como un tomate. Dios bendiga mi melanina, pero mis oídos y mi cara todavía estaban calientes por la vergüenza. Podrías freírme un huevo. Así de avergonzado estaba.

"¿¡Por qué él está aquí!?" susurro gritó como si estuviera del otro lado de la puerta.

"Mira, no sabía que él era el amigo que pensé que traería Minseok. Si lo hubiera sabido, le habría dicho que no. Tampoco lo quiero aquí" se defendió.

Tenía razón acerca de que la amiga era linda, pero ese no es el punto.

Minseok. Ese nombre suena familiar. Pensé mientras frotaba mis manos sobre la cara.

"Me vio pareciendo un vagabundo Harin" dije deslizándome por la pared para acurrucarme en una bola.

Sólo mátame ahora y líbrame de futuras vergüenzas, pensé.

"Oh, por favor, ¿a quién le importa? No es nadie, no es como si te gustara, ¿verdad?" preguntó mientras me ponía de pie. Había algo en sus ojos. ¿ Estaba celosa o amenazada? Me rei del pensamiento tonto. Ver a Shiwoo debe haberme sobresaltado más de lo que pensaba.

Aún en negación evité su pregunta y me miré en el espejo.

"Parecía una mujer de las cavernas y peor aún estaba actuando como tal" me quejé.

"Chica, por favor, hazte un favor y cállate. Tienes el sexo más perfecto que he visto en mi vida. No es como si conociera a mucha gente con sexo, pero aún así. En cuanto a tu comportamiento. Sí, eso apestó". Dijo encogiéndose de hombros.

"Oww", dijo mientras le daba un golpecito en la frente.

Me miré en el espejo y ella tenía razón. Tuve un buen lado, así que a quién le importa. Ahuequé mi cabello y me gustó cómo caía sobre mis hombros. Me giré para mirarme en el espejo. La parte superior era en realidad un poco linda. El amarillo con mi melanina se veía muy bien. Abrazó mi cintura que estaba metida en los pantalones cortos. Los pantalones cortos también abrazaron mi trasero 'gordo' a la perfección, pero aún me dejaba algo de espacio para movimientos libres.

Decidí que me veía bien. Con una última mirada salimos del baño y caminé de la mano con Harin de regreso a donde estaban sentados. Minseok fue amable y vi la forma en que miró a Harin. Anda niña.

Mis vitores mentales terminaron cuando me senté frente al demonio junior y tuvimos un concurso de miradas. Me gustaban los desafíos, así que no retrocedi. Es hora de poner a este chico en su lugar.

Nos habían pedido café mientras estábamos fuera y él tomó un sorbo del suyo sin quitarme los ojos de encima. Yo también hice los mismos ojos sin vacilar.

Finalmente miró hacia otro lado sonriendo. ¿Por qué estaba sonriendo? Gané. Para darme el gusto de la victoria, tomé un gran sorbo de mi café, lo que me hizo eructar.

"Lo siento" dije alterada.

La mesa se rió de mi 'lindo error'. En la cultura coreana, ser el más joven de un grupo, incluso por tan solo dos días, automáticamente significa que eres el bebé. Encuentran lindo todo lo que haces y te tratan como a un niño. No me importa que me paguen la comida o que me llamen lindo porque fui el más joven de mi familia durante unos años hasta que llegó mi hermana, pero a veces se vuelve molesto. No toman nada de lo que dices en serio y te recompensan por las cosas más estúpidas.

Me senté allí haciendo pucheros porque no era un bebé. Sentí que alguien me pateaba debajo de la mesa y miré hacia arriba para ver a Shiwoo tratando de ocultar una sonrisa. Retrocedí y escuché a Minseok gritar.

"Oh, Dios mío, lo siento, pensé que sentí un mosquito" mentí.

Shiwoo se echó a reír y le disparé dagas y lo cubrió con una tos.

Otro momento vergonzoso del día. Atalia, estás en racha.

Harin me regañó y cambió de asiento con Shiwoo y procedió a arrullar mejor a Minseok. Mientras miraba a Shiwoo. ¿Eh?

Arrugué la nariz con disgusto por su cariñosa dulzura. Era muy irritante pero no tan irritante tener que sentarse al lado de alguien que te pone la piel de gallina. Señor, ayúdame a salir vivo de lo que sea.

Debería estar en la escuela. Me sirve por decir que puedo faltar un día porque ya tengo un registro de asistencia perfecto. Yo y mi bocota.

Señor nocheWhere stories live. Discover now