Recomponer | Five Nights At Freddy's |

🍕 Capítulo 14 🍕

Michael llegó a Fredbear's Family Diner. Vio muchos autos estacionados afuera del local. Parecía que hoy iba a ser uno de esos días en los que Henry iba a salir molido del trabajo. Recordó la visión de Cassidy, y la voz de aquel Henry viejo. Le dio cierta pena y escalofríos. Pero no había más que hacer, más que ver esos antiguos recuerdos. Suspiró, y se dispuso a cambiar todo eso. Estaba determinado a hacer lo que fuera necesario para cambiar las cosas. Sus hermanos no iban a sufrir por su culpa. Pero ahora simplemente iba a comer un almuerzo en el local de sus padres y de su padrino.

Entró por las puertas de vidrio y Scott lo reconoció.

-¡Hola Mike! No pensaba verte por aquí luego de que te pelearas con ese compañero tuyo -Rio el Junior de la empresa, mientras se aferraba al papeleo que tenía entre manos.

-¡Agh! -Se quejó él, mientras agitaba la cabeza- ¿Mi mamá le contó a todo el mundo? Que vergüenza.

-¡Ánimo! -Scott le dio una palmadita en la espalda-. Tu madre dijo que fue un tipo mucho más grande que tú, y que fue por defender a tu hermano, ¡Todo está bien!

-No sé si eso me hace sentir mejor, viejo -Scott rio-. Por cierto, ¿Hay un cumpleaños?

-Sí, y Henry dijo que era grande, por lo que está usando a Fred -El Junior se vio algo inquieto al ver la hora-. Mike, tengo que irme, tu madre me va a matar si no entrego estos papeles antes de las tres.

-Está bien, cuídate viejo -Scott levantó el pulgar y se fue con su bolso y los papeles.

Michael se adentró en la recepción. Obviamente no le pidieron nada, ya que era hijo, no tan sólo del dueño, si no de la directora general de la empresa matriz. Usualmente siempre pedían un ticket para entrar, que se vendía ahí mismo. Se adentró lentamente, viendo como una multitud de gente estaba alrededor del escenario. Observó a Fredbear moverse con mucha gracia sobre el escenario, cantar, y bailar. Los niños lo adoraban, gritaban por verlo más de cerca, por darle un abrazo y compartir con el animatrónico. Lo que probablemente no sabían esos niños, es que dentro estaba Henry. Fue al comedor principal, y en la cocina pidió una pizza pequeña. El perfecto almuerzo para un muchacho como él.

-¿Mike? -El que atendía lo reconoció-. ¡Vaya! No esperaba verte aquí hoy,

-Sí, créeme que esto que me vas a dar es la primera comida del día que voy a comer -Rio Michael-. Bueno Dane, mucha suerte con la cocina, que hoy va a estar a reventar.

-¡Ni me lo digas! Ayer estuvimos toda la tarde haciendo masa extra para hoy, además de recibir un cargamento enorme de gaseosa -Él río mientras anotó el pedido-. Luego voy a decirle a tu madre que viniste.

-Gracias, hoy probablemente esté en Partes y Servicio todo el tiempo. El tío Henry me dio unos ejercicios que debería de hacer si quiero ayudar en esto -Michael suspiró-. Qué flojera todo...

-Recuerda hacer tus deberes, Mike -El hombre se fue a la cocina, mientras esperaba en el mostrador.

Estaba tranquilo, sabía que los fin de semanas eran horribles para los trabajadores de Fredbear's. Pero dejaba, mucho, mucho dinero. Eran pocas personas, se trabajaba mucho, y la paga era muy buena. Se podría decir que valía la pena. Las luces se apagaron, dejando el pequeño resplandor de los focos auxiliares del recinto. Michael sabía que significaba eso. Henry llevaría la tarta a quien sea que estuviera de cumpleaños. Las cortinas estaban cerradas en el escenario, y todo el mundo estaba expectante.

-¡Dulce, dulce, dulce cumpleaños! -Michael sonrió. La voz de Henry era dulce, y tenía cierta habilidad vocal-. ¡Oh, dulce cumpleaños! ¿De quién este cumpleaños?

-¡Sarah! -Gritaron los niños.

-¡Oh dulce, dulce, Sarah! ¡Otro año más para ti! -Fredbear apareció con una torta entre manos mientras las cortinas se abrían-. ¡Cumplelos feliz!