Genshin Impact, Brisa a Través de Teyvat 『 1 』

Capítulo 66 - Mi Vida ha Terminado

Yomite y Lumine se acercaron al Jean colapsado.

"Yo, Gran Maestro Interino. ¿Estás vivo?" Él empujó con curiosidad su espalda expuesta y musculosa con el dedo.

(Blando pero tan firme. Muy agradable.)

"¡¡Eeep!!"

Al sentir que alguien la había pinchado, se dio la vuelta y lo miró con una expresión de enojo pero contenida, propia del Gran Maestro Interino.

(... ¿Ella acaba de decir... Eeep? Lindo...)

Su expresión se relajó cuando descubrió quién era.

Se puso un frac largo sobre su espalda expuesta para cubrirla y pronto, una sonrisa adornó su rostro, "Si no son los Caballeros Honorarios Yomite y Lumine. Me alegra ver que lo estás haciendo bien. ¿Es la Resin?" ¿La hospitalidad de la Posada Resin Moon es buena? Espero que sí."

"Umú." Lumine dejó escapar un solo sonido de reconocimiento.

La comida fue excelente, especialmente en comparación con las cosas que Lumine se vio obligada a comer antes de reunirse con Yomite.

Eran tiempos de miedo.

Cientos de veces, se contuvo de comer Paimon o algunas plantas y hongos al azar, pero ahora estaba contenta de no haberlo hecho.

Y había decidido que actuaría mejor con Paimon.

Ese pensamiento no tenía nada que ver con esa pesadilla aterradora con la que soñó no hace mucho tiempo.

¡Totalmente no!

Ella solo estaba siendo una buena amiga.

"Honestamente, es genial, tenemos una habitación enorme y la comida es deliciosa. Me gustaría agradecerte por eso."

"Me alegro, entonces, ¿Por qué has venido aquí?" Ella preguntó.

Y así, Yomite comenzó a explicar todo el camino desde el principio.

Desde conocer al Bardo que resultó ser un chico y no una chica, hasta aceptar ayudar a Dvalin, robar la Lira y luego la cooperación de Diluc.

"Así que fuiste tú... Francamente, me alegro de que sepamos dónde se encuentra la lira ahora... deberías haber dicho algo... te lo habríamos dado de inmediato si hubiera podido salvar al dragón. ...Y en cuanto a la cooperación... Diluc... ¿Realmente accedió a ir con los Caballeros de Favonius?

Jean lo miró fijamente, con los ojos muy abiertos.

Algo así no tenía precedentes. Ella sabía lo mejor de todos en Mondstadt que él nunca volvería a formar equipo con Knights.

"Um... para ser completamente honesto, no creo que él sepa sobre eso..."

Jean se llevó la mano a la frente y suspiró.

"¿Ocurre algo?"

Yomite inclinó la cabeza ante su reacción.

"Diluc es un poco... Digamos que por lo general se niega a ayudar a los Caballeros y protege a Mondstadt a su manera... Si se entera de que vamos con él... Podría abandonar toda la operación..."

(Bueno, dijo que los Caballeros de Favonius eran ineficientes, así que sabía que no estaría contento... Eso podría ser preocupante).

"En ese caso, siento que si movilizas una pequeña fuerza de personas en las que confías, podemos convencerlo."

"Ya veo. Es una idea maravillosa. El poder elemental de Lisa se agotó sin parar durante una semana seguida, así que no quiero traerla con nosotros... Busquemos a Kaeya por ahora."

"Suena bien."

"Está bien, espérame aquí, iré a preparar mi espada y luego podemos ir a buscarlo."

Cuando salía de la biblioteca, Yomite vio que Jean agarraba furtivamente algún tipo de paquete en el camino.

"Líder del Grupo, ¿Adónde vas?" Preguntó Lumine.

Yomite se llevó un dedo a la boca y susurró: "Mis sentidos calientes están hormigueando."

"...¿Tu que...?" Lumine esperaba haber oído mal.

Sin darle una explicación, siguió de cerca a Jean y también cierto cuervo que cambió su forma a una pequeña bola flotante.

***

Cuando Jean llegó a su oficina, vio a Noelle leyendo algún tipo de libro con la cara completamente sonrojada.

Sin darse cuenta de que era un libro de su escondite secreto.

Sin darse cuenta, cuando Noelle leía, por lo general murmuraba entre dientes, y justo cuando Jean entraba, la escuchó decir: "Con una ligera fuerza... sacó su hombría... en medio de su cuerpo convulso... la pintó de blanco, seguido de una ristra de cu-"

"¡-Noelle! ¡No leas eso! ¡¡Deja de leer!!" Un grito de agonía y vergüenza escapó de la boca de Jean cuando finalmente se dio cuenta de lo que Noelle estaba leyendo en realidad.

Noelle estaba tan asustada por el repentino grito que dejó caer al suelo todos los libros que estaban apilados sobre sus muslos.

Algunos de los libros se deslizaron por el suelo justo al lado del marco de la puerta y antes de que Jean pudiera recogerlos, Yomite robó algunos para él.

(... Ah... Así que este tipo de libros también existen en este mundo... Pura obscenidad... Interesante.)

Ella observó con horror, viendo cómo su expresión cambiaba de confusión a una sonrisa.

"Gran Maestra Interina... Tú eres muy bonita y lasciva" Se lo explicó con un susurro.

"Por... ase... ¡Juro que no es así!" La voz de Jean chilló.

Su corazón se aceleró inmensamente. El sentimiento de vergüenza que estaba experimentando en este momento no podía describirse con palabras.

Nunca antes había estado en una situación tan humillante.

La expresión en el rostro de la mujer era incomparable con la imagen del caballero perfecto y digno que solía parecer.

A pesar de querer mantener su afición en secreto, ¡No solo una, sino dos personas se enteraron en solo una tarde!

Uno de ellos era incluso un chico... Una persona a la que ella llamaba Caballero Honorario.

(Mi vida se acabó.)