FEA, PERO NO ESTÚPIDA

Parte 1

Betty fue a la entrevista en Ecomoda y salió frustrada una vez más, la entrevistaron junto con Patricia Fernández, la mejor amiga de Marcela Valencia, una de las socias de la compañía. Era obvio que ella estaba mucho más capacitada que Patricia, sin embargo, terminaron contratando a Patricia por bonita.

Betty regresó a su casa frustrada y se lo contó a Nicolás, mientras miraban la revista donde salían los Mendoza y los Valencia, Betty no pudo evitar sentirse bajoneada y un poco envidiosa de la vida tan fácil que tenía esa gente solo por ser bonita, mientras ella ni siquiera podía conseguir un empleo decente.

Se sintió más enojada y dolida todavía al escuchar a Nicolás alabar tanto a Patricia Fernández, tanto, que Nicolás lo notó y le pidió perdón.

- Ya, Betty, perdón. No se enoje ¿Sí? -Le dijo él al ver que estaba realmente enojada y dolida.

- Ya, olvídelo -Le dijo Betty con un encogimiento de hombros-. Después de todo no somos diferentes de esas personas que nos descartan por feos -Reconoció Betty al darse cuenta que ella era igual que Nicolás, pues había quedado encandilada de la foto de don Armando, quien hubiera podido ser su jefe si hubiera aprobado la entrevista-. Mírenos, todo embobados por sus caras bonitas sin saber cómo son en la vida real.

- No, pues sí -Reconoció Nicolás un poco sonrojado y avergonzado ante la admisión de su amiga.

- ¿Sabe qué, Nicolás? -Le dijo Betty con una realización repentina que acababa de tener-. Somos unos estúpidos, yo siempre espero encontrar un chico guapo que me invite a salir y por eso se burlan de mí todo el tiempo y me la paso encerrada en esta casa, mientras usted también espera que una chica bonita acepte salir con usted sin conseguir nada. Mire la edad que tenemos y no hemos pasado de visitar el cine o su panadería, ¿No le parece ridículo? A partir de hoy, Nicolás, nos vamos a avergonzar mutuamente. Vamos a salir a pasear, conocer nuevos lugares y no se preocupe, que si se burlan de usted por salir con una mujer fea, de mi también se van a burlar.

Nicolás se quedó con la boca abierta al escuchar a su amiga hablar así, tan decidida y por primera vez sin pedir opiniones, simplemente le dijo lo que harían y ya. No pudo evitar sentir admiración por la repentina resolución de Betty, por lo que aceptó sin dudarlo.

- Está bien, Betty -Le dijo Nicolás con una sonrisa divertida-. Asustemos al mundo cuando vean a un par de feos de romance.

Betty se quedó con la boca abierta por un momento y luego soltó una carcajada, siendo imitada por Nicolás.

En eso estaban cuando escucharon a doña Julia gritar que la llamaban de Ecomoda. Betty, asombrada, bajó rápidamente y contestó la llamada, donde la citaron a las 9 de la mañana para una entrevista con el presidente.

Betty estaba extremadamente emocionada al darse cuenta que existía la posibilidad de que la contrataran, aunque tuvo que mentirle a su papá y decirle que la entrevista era como Asistente de Presidencia, estaba más que feliz por la decisión.

- ¿Por qué no le dijo a su papá que el trabajo es como secretaria? -Le preguntó Nicolás a Betty.

- Ya conoce a mi papá, Nicolás -Le dijo Betty con una gran sonrisa mientras subían a su cuarto-. Si se entera que es como secretaria no me deja aceptar el trabajo, de todas formas, si me contratan, estoy segura que ascenderé rápidamente y encontraré una manera de conseguirle un trabajo a usted también.

- ¿En serio Betty? -Dijo Nicolás emocionado.

- Desde luego, Nicolás -Le dijo sonriendo-. Apenas haya una oportunidad, haré todo lo posible para que usted entre a Ecomoda.