FEA, PERO NO ESTÚPIDA

Parte 2

Al día siguiente Betty asistió puntual a la entrevista y para su gran alegría fue seleccionada, sin embargo, se dio cuenta de varias cosas que necesitaría tomar en cuenta urgentemente si quería mantener su trabajo y escalar rápidamente en la empresa.

La primera era dejar de encandilarse por la sonrisa de su jefe y es que ese hombre tenía una sonrisa matadora y por un momento se había olvidado hasta de que estaba comprometido. Enamorarse de don Armando sería una gran estupidez, no solo porque era su jefe y estaba comprometido sino porque claramente era un hombre muy mujeriego y los hombres como ese no se fijaban en mujeres como ella.

La segunda cosa que notó fue que Marcela Valencia, la novia de su jefe no estaba de acuerdo con su contratación, por lo que era posible que hiciera todo lo posible para que la despidieran y su jefe era la única persona en esa empresa que la apoyaría, por lo tanto, decidió apoyar a su jefe en todo lo que pudiera. Después de todo, claramente era el único que tenía la mente clara en este asunto, don Armando necesitaba una secretaria que hiciera bien su trabajo, no una cara bonita que mostrarles a los clientes, sin embargo, no estaría de más buscar la manera de hacerse un cambio de look profesional.

La tercera era que, si la contrataban en Ecomoda, tenía que buscar con urgencia maneras de aprender más de moda y todo lo referente a la producción y comercialización de ropa en Ecomoda, pues con doña Marcela en su garganta todo el tiempo, no podía centrarse únicamente en los números. De ese modo, si doña Marcela intentaba hacerla cometer un error, no lo lograría.

Mientras escuchaba a doña Marcela ofenderla y tratar de anularla como candidata, Betty sonrió maliciosamente y se dijo a sí misma que ella podía ser fea, pero no era estúpida, por lo tanto, si don Armando la contrataba y ellas intentaban hacer algo en su contra, se defendería.

Cuando don Armando salió para decirle que sería contratada, casi le da un abrazo de la emoción, pero se contuvo.

- Señorita -Le dijo Armando-. Puede pasar a administrativa con el doctor Gutiérrez, la está esperando para que firme su contrato.

- ¿De verdad? -Dijo Betty emocionada.

- Sí, puede empezar mañana a primera hora -Le dijo Armando con una pequeña sonrisa enternecida por la alegría de Betty.

- Muchas gracias, doctor -Dijo Betty emocionada-. Estoy a las 6 de la mañana.

- No, no -Dijo don Armando con una de esas sonrisas que deberían estar penadas por ley en opinión de Betty, a cadena perpetua si fuera posible, porque no había derecho en ser capaz de causar tantos estragos en una persona solo con una sonrisa-. Esté aquí a las 8, tranquila.

Betty asintió y fue hacia el área administrativa para firmar su contrato, pues mientras más pronto tuviera un contrato firmado, menos posibilidades habría de que doña Marcela hiciera a don Armando cambiar de opinión. Era posible, claro, pero poco probable.

Una hora después ya estaba todo listo, solo tenía que presentar su foto mañana a primera hora y todo estaría en orden.

Aprovechando que no tenía nada que hacer después de esto, decidió pedir ayuda para conocer la empresa, después de todo se veía que esta era una empresa bastante grande y no podía estar buscando los lugares a última hora si don Armando le pedía que fuera a algún lugar específico de la empresa.

- Hola, disculpe. Soy Beatriz Pinzón Solano -Le dijo Betty a una de las secretarías que parecía desocupada, una bastante alta, aunque bonita-. ¿Será que hay algún mapa de la empresa o lista de los lugares más importantes para el doctor Mendoza? Es que me acaban de contratar como su secretaria y empiezo mañana, así que me gustaría familiarizarme con las distintas áreas antes de empezar a trabajar.