rendido ➸ kevin x diego

dolorosa realidad

Desde que miro aquellos ojos verdes por última vez, supo que nada sería igual que antes, un millón de veces tuvo viajes y vistazos al pasado donde se encontró con memorias hermosas; cuando únicamente eran Diego y el.

No existía nada que los separara. Absolutamente nada.

Solo eran dos chicos que estaban juntos en el mismo club y tenían el mismo sueño.

Cuando Edson logro migrar al viejo continente, era claro que de ahora en adelante iba a existir una cierta distancia, pero siempre de alguna u otra manera estaban cerca. O al menos era lo que Edson pensaba, asumía y sentía.

Tal vez solo era Edson.

Porque Diego en toda su estancia en Europa, pensó cada una de sus noches en reencontrarse con Kevin y en estar a su lado, anhelando estar en los brazos de un Álvarez, pero no precisamente en los de Edson.

Al momento de volverse a ver para los juegos que se llevaron a cabo en marzo, el mayor noto una peculiaridad en Diego, algo que no le parecía normal; estaba tan interesado en Kevin, en cada movimiento, en cada palabra, en cada acción que realizaba el pelinegro.

Sin duda ese fue el primer indicio que le hizo descifrar lo que realmente estaba pasando con su amigo.

Edson fue el primero en darse cuenta de la situación, y aunque lo pensó un poco antes de actuar; su mejor opción era preguntarle a Diego que estaba sucediendo entre Kevin y el, sabía perfectamente que el castaño le tenía una confianza indudable por lo que era una realidad que obtendría toda la verdad en la palma de su mano.

Así fue, Diego le contó todo cuando estuvieron solos en el departamento del menor. Edson sentía un dolor punzante y fuerte en el corazón cuando sostuvo en sus brazos a un Diego con el rostro lleno de lágrimas y triste por la actitud que tenía Kevin hacia él.

Y a pesar de que él se sentía sumamente mal por Diego, le dolía más el hecho de saber quién era el causante de tal hecho.

No sabe en qué momento fue buena idea decirle a Diego que debía hacer que Kevin cayera rendido ante él. Solo quería lo mejor para el castaño, para que lograra ser feliz, aun incluso sabiendo como se sentía el al respecto.

Lo que resta ya es historia. 

Ahora que logra pensar bien y ser objetivo lo único que corre por sus venas es el arrepentimiento.

Esa sensación que no es para nada agradable y perdura por un buen rato socavando su mente una y otra vez, todo se ha estado volviendo cansado para Edson, sobre todo revivir ese momento.

Ha pasado por tantas cosas tantas cosas en su vida últimamente, reflexiona, analiza y se entera por su propia cuenta que en estos momentos parecía que Diego ya logro el objetivo que el mismo le dijo que debía cumplir y, además la última pregunta que le realizo al menor esa última vez que se vieron le quito todas las dudas que tenía al respecto.

"¿Lo sigues queriendo?" el mediocampista le miro enternecido, esperando que el más alto entendiera el mensaje y aunque no haya tenido una respuesta verbal, supo que todo estaba perdido.

"Bien, lo entiendo. Si quieres después de esto vete con él y cógetelo." ni siquiera sabe cómo tuvo coraje para hablar si su garganta dolía horriblemente, aun así, aquellas fueron sus últimas palabras antes de alejarse de Diego y salir con prisa del lugar.

Es un recuerdo en el que piensa casi a diario.

Esta tan dañado, porque sabe que a pesar de todos sus intentos en ninguno de ellos saldría triunfante por más que lo intentara, el nunca levantaría una medalla por obtener el amor de Diego.